My Digimon Adventure Academia tri

Capítulo 07.5 - Duda, Parte 2 - Determinación Parte 3

Salón de Café "DATERS", 15 de julio de 2005, 08:45 hrs.

Mimi Tachikawa se hallaba parada frente a la puerta adornada con flores de papel naranjas y grises, con la palabra en inglés "DATERS" formada por letras multicolor. Ella todavía sentía un vacío en el estómago por lo que estaba a punto de hacer. Oficialmente ella no había sido expulsada del Comité organizador, solo suspendida de la toma de decisiones.

La propia forma de ser de la chica era la que la hacía estar frente a la puerta dispuesta a presentarse, aunque fuera solo para ayudar a atender a los clientes. En caso de que todas allí la echaran fuera negándose a recibir su ayuda, la chica acataría esos deseos y se retiraría a casa.

El motivo por el que ella llegaba casi a la hora de apertura fue el retraso por recorrer la escuela en busca de dos de las personas que ella lastimó, en muchas formas, por sus decisiones en los últimos días. Pero Mimi no había sido capaz de hallarlas, resignándose entonces a "disculparse" aunque fuese con público externo. Esto estaba motivado también por un mensaje de texto de parte de Meiko, pidiendo que todas ellas se vieran antes de que el Festival comenzara, pero dicho mensaje había omitido especificar el lugar.

El miedo de ella al rechazo de sus amigas lastimadas la hizo retraer la mano al pecho antes de sujetar la puerta corrediza, rememorando en su mente el momento en que encontró a Meiko Mochizuki en el mismo escenario hace unos dias. El recuerdo de lastimar a Palmon, complicar la situación de Izu-niichan y los demás superhumanos, así como darle una bofetada a Momo y gritarle a Meiko, hicieron que ella se arrepintiera y comenzara a tomar rumbo de la escalera.

De repente, una puerta auxiliar a la derecha de Mimi, la cual había ignorado, se abrió de golpe, saliendo de esta Meiko Mochizuki y Momo Yaoyorozu, impidiéndole estas escapar.

Meiko / Momo: ¡Mimi-san! – exclamaron ambas en coro hacia Mimi.

En lugar de toparse con chicas en una actitud de venganza o de ánimos de reprocharle más sus acciones pasadas, la Niño Elegido de la Pureza se quedó estupefacta al ver el vestuario que ellas portaban.

Meiko: ¡Sí viniste! – exclamó contenta la chica de lentes, mientras la vicepresidenta de la clase 1-A sonreía.

Momo: Meimei... Momo-chan..., esa ropa...- decía ella en medio de su estupor.

Momo de inmediato se sintió avergonzada e intentó acurrucarse sobre sí misma, mirando de lado a Mimi. Por su lado, Meiko se volvía presa de los nervios, levantando esta sus manos como si intentara defenderse de la vergüenza.

Meiko: ¡Ah! Bu-bueno, yo.... nosotras... como este ya estaba hecho... - balbuceaba la chica sin poder controlarse.

Mimi: No es por eso... - dijo Mimi con una risa irónica, haciéndole ella ver a la chica que su justificación no era creíble.

Momo: Me-Meiko-san no quería que el esfuerzo de todas fuese en vano. – se apresuró a decir la chica de pelo azabache, con el cabello en peinado deportivo.

Mimi vio asombrada lo que la chica superhumana acababa de decir.

Meiko: Yo... ¡yo solo quería usarlo! – gritó finalmente ella, armándose de valor a pesar de la timidez.

Mimi permaneció asombrada de escuchar a la chica tímida defendiendo su postura frente a alguien más... justo como ella le había dicho a esta hace días.

Meiko: Como fuimos a esas tiendas de ropa y trabajamos juntas en el diseño... ¡digo!, el diseño es más tuyo. – dijo la chica atropelladamente, volviendo a su timidez agitando las manos. - Buscar la tela, coserlo... ¡E-Eso lo hizo Sora-san con la máquina de coser! – volvió a rectificar Meiko las ayudas recibidas.