Amnesia 2032: A la Orilla del Olvido

Capítulo 20: Dirección II

Días antes en Severnaya Luna...

 Omar Louvre yacía de rodillas ante el inmutable René Verlum y sus allegados, entre los que destacaba, un joven de apenas 18 años de edad.

—Sabes Omar, por asesinar a mis primos y despejarme el camino hacia la cima de la corporación te perdonaré la vida, sin embargo debes decirme donde está el núcleo o de lo contrario estas mujeres morirán—dijo René señalando a Yassira, Akari y a Camila—, entonces, ¿Qué dices?

—Muérete, francesito de mierda.

A René no pareció afectarle ese insulto, permaneció inexpresivo en tanto sacaba un arma de fuego de su saco y disparaba contra Camila, matándola en el acto.

— ¡No!, exclamó Omar con gran ira.

—Ultima oportunidad Omar, dime donde está el núcleo o de lo contrario mataré a ambas, ¿acaso eso quieres?, ¿deseas tener su sangre en tus manos sucias?

Simplemente no pudo más y Omar cedió a los designios de René, quien no muy conformé dio una última orden.

—Está bien, pero por hacerme perder mi tiempo una de ellas morirá, afirmó René antes de golpear a Omar en la cabeza con el arma de fuego.

René asintió y eso fue suficiente como para que el joven Vyeter, quien en esos momentos se hallaba bajo la influencia del suero Xaneos-05, tomará el brazo de Akari y se la llevara a la fuerza.

Tan pronto como empezó, termino. Los extraños que se adentraron en su casa se fueron para siempre, no sin antes haberle arrebatado a dos de sus seres queridos.

Yassira se quedó en la oscuridad y comenzó a sollozar, sabiendo que era una suerte que estuviera viva...

A mitad del bosque, donde nadie podía escuchar los gritos de auxilio de Akari, Vyeter supuestamente se dispuso a acabar con la luz de su vida.

— ¡No tienes que hacerlo!, dijo Akari.

El impacto de la navaja se produjo en un área sin importancia letal, donde le daba a Akari la oportunidad de vivir. Ella lo supo al instante, pero aun así no dijo nada. Nada más aguantó la respiración por unos momentos hasta que el peligro pasó.

Esos recuerdos vinieron a la mente de Vyeter, cuando Aleksei mencionó el uso del suero que le había inyectado.

— ¿Qué es lo que vas a pedirme?, dijo Vyeter.

Aleksei caminó hacia un bote de basura en la esquina de la habitación y depositó allí la jeringa vacía, con la que segundos atrás había inyectado a Vyeter, posteriormente camino de un lado al otro rascándose la barbilla con una sonrisa pacifica en el rostro; no obstante en sus ojos se reflejaba una tristeza incontenible.

De repente, su mirada tranquila se transformó en una expresión seria, tal como si fuera dos personas al mismo tiempo.

—Desde hace doce años mi familia ha llevado a cabo una búsqueda alrededor del mundo—dijo Aleksei, quien a pesar de sus palabras serias, no podía ocultar su sufrimiento—, apenas era un niño cuando comenzó, pero al mismo tiempo dejé de serlo. Mi infancia termino sin previo aviso, en mi mente lo único que deseaba era terminar con aquella búsqueda; es por eso que cuando crecí, me uní al Departamento de contrainteligencia Francesa—Una lágrima se disponía a salir desde el ojo derecho del joven—. En consecuencia, lastime a las personas más cercanas a mí, a mis amigos y a la mujer que amaba, sólo para continuar con aquello que mis padres no terminaron y bueno...un día se presentó la oportunidad y aquí estoy. Pero sabes, aun así al final el que terminará con este ciclo de dolor serás tú Vyeter.