Cap 4

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A Lisa la claridad de la mañana la despertó y se sintió desorientada. Tardó varios segundos en recordar porque estaba en ese cuarto extraño e inmenso, recubierto de tapices chinos en las paredes, que no era el suyo.

Cierto, ahora vivía con Kim Taehyunh como... su amante.

Recordar este hecho la llenó de terror.

No podía creer que hubiese hecho un trato con este hombre.

Tal parecía que la ira de anoche la había trastornado, hasta el punto de que no midió las consecuencias de esta decisión.

Bueno, en fin, no era mujer que se echara atrás cuando tomaba una determinación, Doyoung la había engañado y tenía que pagar, al igual que su padre por haberlo apoyado, sin importarle que ella era su hija.

La venganza era dulce.

«Dong-Young  no podía quedarse sin castigo después de haberla hecho sufrir tanto», se dijo y entonces sintió un ruido en el cuarto de baño que la puso en guardia, ya que pensó que podría tratarse del Duque que había vuelto mientras ella dormía.

«Quizá debía ir a ver», pensó, pero no le fue necesario ir a investigar, porque la puerta del baño se abrió y tras ella apareció una anciana vestida de negro y una jovencita, vestida con el uniforme del servicio, quienes notaron cuando ella se sobresaltó por sus presencias.

—Disculpé si la asustamos. —Se disculpó la dama mayor. —Soy la señora Mikyung, el ama de llaves y vigilaba como la joven limpiaba el baño de Milord.

—No se preocupe —Contestó Lisa, avergonzada, de estar ataviada solo con una camisa del Duque que había tomado de su baúl sin permiso.

Esto lo había hecho porque en la madrugada le dio mucho frio y no tenía más ropa, aparte del feo atuendo con que había llegado, que obvio no se iba poner porque estaba húmedo.

«Bueno ojalá no se enojara ese extraño hombre por cogerle su ropa», rogó internamente, al tiempo que veía a la criada ponerse a acomodar el cuarto.

—¿Dónde está el Duque? —Le preguntó Lisa a la señora, quien le contestó con algo de sarcasmo.

—No ha vuelto desde anoche, seño... rita.

Lisa trató de no sentirse mal por el comportamiento la mujer, porque pensó que tenía que acostumbrarse a ese tipo de tratos, ya que cuando el chisme llegara a oídos de la sociedad la repudiarían mucho peor.

—¿No sabe a qué hora volverá? —Siguió indagando.

—Nunca se sabe —contestó la mujer— a veces demora días sin venir a la casa.

Aquella información llenó de curiosidad a Lisa, quien no detuvo el interrogatorio.

—¿Y sabe a dónde va cuando no está en casa?

La otra mujer sonrió encontrando graciosa su pregunta.

—¿A dónde más? A prostíbulos, a tabernas y a ese club donde viven las finas cortesanas. Por cierto, usted es de esa casa de perdición, ¿verdad? Se ve bien bonita y elegante para ser una simple dama de la calle.

—No, claro que no, yo soy  Lalisa Manobal, la hija del Vizconde de So Hyun-joo. —La ama de llaves abrió los ojos muy grandes cuando ella dijo esto. Entonces Lisa con una sonrisa cínica concluyó— bueno mejor se oye, que de ahora en adelante, seré la amante del Duque Kim Taehyung , ¿no cree?

—¡Ay madre mía... nunca pensé que mi lord y usted...! ¡Parecía tan imposible! Hasta yo misma le aconsejé que...

La mujer no pudo terminar su extraño comentario porque la puerta se abrió de golpe.

TODO FUE POR UN ENGAÑO (TAELICE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora