TODO FUE POR UN ENGAÑO (TAELICE)

Cap 13

En la noche, luego de pensar sus próximas jugadas en la oscuridad del cuarto que le habían acondicionado, Lalisa decidió salir.

Iba a hablar otra vez con Kim.

Quería principalmente pedirle disculpas por su comentario de la tarde «aunque quizás a él no le había importado, como ella tontamente se imaginó», pero de todos modos quería disculparse por haber sido cruel.

Nadie merecía que lo humillaran de esa forma como ella lo había hecho, pero la furia de saber que se había pasado unos días con su cortesana, la habían hecho escupir veneno.

Gracias a Dios ya se había calmado y había caído en cuenta que no debía importarle las mujeres con que él se relacionaba.

Lo único que compartían era un trato, un simple trato.

También deseaba conversar con él sobre una publicación que le había dicho, su amigo Bang, había salido hoy en el Times. Ahí su padre relataba que la mujer que vivía con Kim Taehyung no era ella, sino una ramera que se le parecía mucho.

Además, agregaba que ella no estaba en Londres porque se encontraba cuidando a su enferma tía materna, que vivía en el campo y que por eso iban atrasar su boda con Doyoung, que estaba pactada a eso de unos días.

Lisa bufó, pensando que era ridículo que su padre se hubiese valido de aquellas artimañas para tapar que ella estaba siendo la amante de Kim y ya no se iba casar con Doyoung.

Bueno ella le iba quebrar esos inventos.

«Iba a proponerle otro plan al Duque para presentarte ante Doyoung y su padre y, dejarlos como mentirosos, pensó decidida, mientras iba bajando las escaleras hacia el primer piso.

Ya cuando llegó al vestíbulo se fue a al pasillo donde quedaba la biblioteca y cuando ya estuvo ahí, tocó la puerta.

Al no recibir respuesta, pasó.

Dentro pudo ver a Taehyung dormido, con la cabeza pegada al escritorio.

Se acercó y frunció el ceño al notar la botella por la mitad de whisky que estaba en sobre el escritorio.

«¿Por qué bebió así?», se preguntó preocupada.

¿Sería que a él en realidad si le había dolido su comentario?

No, no podía ser. ¿Él por qué habría de sentir dolor?

Sí, él no la quería. Lisa se le acercó más.

El movimiento de sus pasos hizo que Kim abriera los ojos y levantara la cabeza.

—¿Qué quieres? —Le preguntó él con dureza, reincorporándose.

Ella no contestó de inmediato, lo que hizo fue sentarse en la silla que quedaba frente a él.

—Venía a hablar con usted... pero veo que ha tomado algo de más.

Taehyung se masajeó las sienes, después la miró de arriba abajo y notó que ella se había bañado y cambiado de vestido.

—¿Por qué te cambiaste de ropa? —Le preguntó.

—Tenía calor. —Le contestó ella mirándolo extrañada ¿Por qué le había preguntaba eso?

Kim la agarró de la muñeca.

—Entonces si es cierto que te acostaste con el tipo que te trajo. Por eso te cambiaste, para borrar las huellas de tu delito.

—¡No! —le respondió ella tratando de soltarse— ¿Cómo se le ocurre que me voy a acostar con él?