Capítulo 11

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El sermón que le dio Jin a Jimin fue casi interminable...

- "un día tu omega no soportara tu terquedad y te abandonara, pregúntale a mamá lo que se siente tener media vida, vivir media vida, sentir media vida y si la respuesta te gusta sigue como vas, eres un desagradecido, tienes al amor de tu vida frente a ti y lo rechazas, no piensas en nuestra madre que ella desearía tenerlo aquí y no tres metros bajo tierra. Entiende que no solo te haces daño a ti, sino también a Kook.

Jimin se había quedado en cama por un repentino malestar y debilidad pero no había parado de llorar desde que se había ido su hermano, su madre fue a media noche a consolar a su cachorro y por fin la mujer se dio cuenta que tiene que luchar por sus hijos, esa vida que últimamente llevaba, no estaba bien, había perdido a su alfa a su alma gemela, sí, pero aun tenia a sus hijos, el recuerdo vivo de su esposo, el fruto del amor que se habían tenido y por ellos iba salir adelante.

- Tu hermano fue muy duro contigo. - la omega lo abrazó.

- No, él solo me dijo la verdad, tengo que ser valiente para poder hacer feliz a mi alfa así sea menor que yo, no hacerlo sufrir haciéndome sufrir a mí de paso.

- En estos casos la edad no importa hijo.

- Lo sé. Luchare por su perdón porque sé que está molesto conmigo y si el me deja estar a su lado no me importara que sea menor que yo. Lo esperare cuánto sea necesario.

- Te amo hijo.

- También te amo mamá, ¿Cómo te sientes?

- Me siento bien gracias por preguntar.

- Duerme conmigo hoy.

- Claro que si mi amor, mi cachorro de oro...

- Lunas... ¿Por qué papá me puso así? - se rieron suavemente ambos.

- Porque cuando naciste tus cabellos eran dorados y tus ojos eran de un azul intenso parecías un bello ángel así que ese apodo se quedó "ángel de oro" pero después dejaste de ser un ángel - nuevamente rieron pues en realidad el chico era un pequeño demonio cuando era niño - así que solo quedo cachorro de oro o cachorro dorado.

- Amo cuando hablas de papá.

- Perdón por dejar de hacerlo pero mi tristeza era mucha, pero ya no más, ahora estaré para ti y tu hermano, lo prometo.

- Gracias por estar aquí conmigo. - después de minutos de seguir hablando los dos omegas se quedaron dormidos.

En la casa todo estaba tenso. Ji y Jin en la cocina, Jin ayudándole a la cocinera a terminar la cena y Ji hablando de una cosa y otra, hasta ahí todo bien. Pero los problemas venían cuando Jin y Jungkook estaban en la misma habitación. Jin sufría y Jungkook ahogaba todos con su aroma a enojo. Cansado de eso Namjoon llamó a Jin a su despacho.

- Dígame señor Kim - habló Jin con voz triste y a Nam le extraño el oírlo así.

- ¿Qué pasa Jin? - se quiso acercar pero Jin se alejó. - amor que...

- No podemos seguir con esto Nam, tu hijo está demasiado resentido ahora así que por el momento solo deseo que nos alejemos por su bien y por su tranquilidad.

- Jin...

- Lo siento si solo eso quería decirme...

- No Jin espera no me hagas esto.

- Lo siento alfa pero para mí es más importante mis cachorros y uno de ellos sufre por lo nuestro y eso es solo lo que él cree que pasa, imagina si confirma que es verdad.

- De acuerdo esperare hasta que todo esto pase, tampoco mereces estar escondido entre las sombras cuando yo te amo. - Seokjin solo sollozó pero no volvió a hablar.

- Jungkook encontró a su destinado también a eso se debe su mal humor.

- ¿Qué?

- Fue unos días después de que yo llegara aquí.

- Pero...

- Es mi hermano menor.

- Lunas.

- Mi hermano tiene 25 años y le dijo a Kook que no pueden tener una relación al menos no por ahora pero Kook lo entendió de mala manera ahora piensa que mi hermano lo rechazó.

- ¿Y no fue así?

- No señor, el solo quiere darle el tiempo de crecer de que viva su vida y tenga experiencias, viaje, termine sus estudios, etc... pero Kook lo tomó como un rechazo.

- Por la luna...

- Por lo demás no se preocupe, yo cuidare de ellos cuando usted no esté - Jin se dio media vuelta para irse temiendo romper en llanto frente al alfa.

- Jin... - pero el omega no se detuvo, salió del despacho del alfa y se fue a su habitación a calmarse pues tenía que estar en la mesa o Ji no comería si él no estaba.

La cena fue de lo más incómoda todos en silencio y tanto el alfa como el omega mayores estaban desprendiendo su aroma de tristeza, Tae sabía lo que pasaba pero no quiso mencionar nada más para evitar hacer enojar a su hermano y que este dañara más a Jin. El omega se dirigió a la pequeña de los Kim.

- A ver ahora si pequeña, a lavarse los dientes y a dormir. - le indicó Jin a la pequeña apagándole la televisión de la sala.

- Jinnie mañana quiero ir al parque que está cerca de tu casa.

- Pero tienes un parque a unas cuadras de aquí Ji. - se rio el omega.

- Si pero quiero conocer el parque de tu casa.

- Está bien lo hablaremos con tu padre y veremos si se puede por que recuerda que él se ira mañana de viaje.

- Está bien.

Al día siguiente el alfa partió.

Omega Niñero Donde viven las historias. Descúbrelo ahora