Corazón de cristal - Jude Bellingham

Capítulo 1

Sienna

3 años después

Me estaba preparando para ir a un entrenamiento de Trent con mi familia. Debutó en el primer equipo  hace 1 año y se ha vuelto titular indiscutible.Estamos orgullosos de él, todo esto se lo merece sin ningún tipo de duda.

Mi relación con Trent no cambió desde ese día y tampoco sacamos el tema, a veces pienso que lo ha olvidado.

Estaba atandome los cordones de mis zapatillas y la voz de mi padre me interrumpió.

—Sienna, ¿estas lista? — Dijo mi padre con una sonrisa para después entrar a mi habitación.

—Si, vámonos — Dije dando un salto para ponerme de pie.

Mi familia estaba muy ilusionada, Trent para ellos siempre fue como otro hijo más y verlo triunfar tan joven es un orgullo para todos nosotros.

Salí de casa y monté en el coche a mi hermano pequeño Archie.

Archie llegó a mi vida hace 4 años y es lo mejor que me ha pasado en la vida, es un niño estupendo con un pelo rubio precioso a diferencia del mío que es igual de negro que el de mi madre.

Eso sí, los ojos son iguales a los míos, un azul intenso pero no muy oscuro.

—¿Voy a ver a Salah? — Preguntó Archie con una enorme sonrisa.

—Claro que si cariño — Dijo mi madre devolviendole la sonrisa.

Llegamos a Melwood (lugar de entrenamiento del Liverpool) y allí en las gradas se encontraban:

Rachel Roberts:Mujer de Robertson y su hija.
Maggie Salah: Mujer de Salah y sus hijas.
Rebecca Burnet:Mujer de Henderson y sus hijos.

La hija de Henderson: Alice, tiene mi edad y eso hace que nos llevemos muy bien y seamos muy cercanas, de hecho, es la única que sabe lo de Trent.

El entreno comenzó y me senté a verlo junto a Alice.

Era el último entreno que tenían antes del partido de champions contra el Borussia Dormund. Me gustaría acompañar a Trent pero tengo demasiados exámenes como para ponerme a ver un partido de fútbol.

Estudio periodismo, como mi padre. No me gusta, pero a él sí, digamos que me ha elegido la carrera. Siempre me gusto el modelaje pero supongo que tendré que dejarlo para otra vida.

—Estas muy callada — Dijo Alice sin dejar de mirar a los chicos o al chico, mejor dicho.

—Y tu no dejas de mirar a Arnold —  le dije dirigiendo mi mirada hacia ella.

—Yo no fui la que se lo tiró haciendo los deberes — le dí un codazo y ella río.

—Sie, ¿Podemos bajar después con los chicos? — Preguntó Archie con cara de súplica.

—Pregúntale a papá — El me hizo caso y mi padre acepto.

El entrenamiento terminó y bajamos con los chicos.

Archie fue corriendo hacia Trent y este lo abrazó.

Alice se encargo de saludar a su padre para después ir a hablar con Trent y yo me quedé hablando con Roberson y su familia.
__________________________________________________________________

Me encontraba en mi habitación ordenando mis apuntes para la universidad ya que mañana tenía que entregarlos para evaluarlo. La uní me estaba matando. Apuntes por allí apuntes por allá. Un horror.

Mi padre tocó la puerta haciendo que dejara de hacer todo lo que estaba haciendo para centrarme en él.

—Baja cuando puedas — Su rostro se veía feliz a si que no me preocupé.

Recogí todo y bajé.

Me senté en el sofá en el que se encontraban mi padre, mi madre y... ¿Thomas?. Era el representante de mi padre pero, ¿Que hacía aquí,?, ¿Y por qué quería hablar conmigo?

—Hola Sienna — Me saludó Thomas y yo le devolví el saludo — Tengo una oportunidad de trabajo para ti — ¿Que? ¿Para mi?.

—¿Para mí? — Pregunté confundida.

—Si, quiero que viajes a Dormund conmigo— Dijo entrelazando los dedos de sus manos —Queremos que sustituyas a tu padre en una entrevista—

No se si es que escuche bien o es que a mi cabeza ya le había dado por inventar cosas (Lo suele hacer varias veces). Pero era cierto que mi padre no podía viajar debido al pequeño esguince que tenía.

—¿Yo?, Pero ni siquiera he completado mi primer año de estudio y mañana tengo universidad — Dije cada vez más confundida.

—No te preocupes hija — Dijo mi padre — ya hemos hablado con tus profesores, piensa que esto es un gran paso a tu carrera — ¿Mi carrera? ¡Ni siquiera quiero hacer esto!.

No me podía creer lo que estaba oyendo. No me apetece entrevistar a tíos sudados y sin ganas de hablar con nadie. Al ver mi cara de confusión Thomas posó una mano en mi hombro para después comenzar a hablar.

—Los puestos de periodismo están subiendo mucho este último año—  Dijo Thomas alejando su mano de mi hombro para volver a entrelazar los dedos —En un año será imposible encontrar algo de trabajo—

—Creemos que si ven el gran potencial que tienes puede ser más fácil que te admitan en algún sitio— Habló mi padre.

—Pero. ¿Como van a dejarme entrevistar si ni siquiera tengo un título? — Dije.

Thomas y mi padre se dedicaron una pequeña mirada para después volver sus vistas hacia mí.

—De eso ya nos hemos encargado nosotros. No tienes de que preocuparte — Dijo Thomas con una pequeña sonrisa.

Y sin dejarme decir nada mas se levantaron y empezaron a despedirse.

—Mañana a las 7:30 sale el vuelo, vendré a buscarte — Me dijo Thomas para después despedirse de mí y de mi familia.

¿Yo entrevistando? ¿Pero que se supone que debo preguntar? ¿Y a quién?.

—Ve a preparar la maleta, cariño — Me dijo mi madre y yo asentí.

A ella tampoco le gustaba la idea, la conocía y sabía que yo no quería dedicarme a esto, pero tampoco podía hacer nada por mi.

Subí a hacer la maleta, ni siquiera sabía cuantos días me iba a quedar allí.

Después de hacer la maleta me duche y llamé a Trent.

—Hola — Lo saludé.

—Hey Sie— Me devolvió el saludo — te veo seria — dijo sin dejar de mirar la televisión.

—Mañana viajo a Dormund para hacer de periodista — Dije resaltando esa última palabra entre comillas.

Trent me dio una pequeña mirada para después volver a mirar al frente y seguir pendiente a lo que sea que estubiera jugando.

—¿Y?, ¿No es eso lo que estás estudiando? — no lo estaba diciendo en serio, ¿Verdad?.

—Sabes que no es lo que quiero, Alex — Le dije.

—Bueno,es tu padre, no puedes hacer nada, pero mira el lado positivo, a lo mejor me entrevistas a mi — Dijo mirando la pantalla del móvil y regalandome una preciosa sonrisa.

—Si claro. Te veo mañana supongo — Dije despidiéndome de él.

—Te quiero — Dijo.

—Yo no — Dije haciendo que el negara con la cabeza y provocando mi risa.

Apague el ordenador y me recoste en la silla llevándome las manos a la cabeza

No se que iba a hacer y por qué tenía que hacerlo ya.

¿No se supone que primero hay que terminar la carrera?. Supongo que solo yo tenía ese privilegio.

Se que detrás de todo esto está metido mi padre y si está él no puedo librarme.

Será mejor que me vaya a dormir o si no mi mente no va a estar lo suficiente capacitada para pensar preguntas mañana.