Capítulo 14

107 4 2
                                    

Sienna
Miércoles, 14 de abril 2023

Habian pasado cuatro meses desde la última vez que vi a Jude. Dejé de contestar a sus mensajes, no respondía a sus llamadas y tampoco había viajado a Dormund para visitarlo. Tampoco hablé con él para felicitarlo por el paso de su equipo a cuartos en la Champions. Mi padre me prohibió tener algún tipo de contacto con él y en un principio no iba a hacerle caso, como siempre, pero creo que es lo mejor para los dos. En estos últimos cuatro meses mi amistad con Caio ha ido creciendo a medida que pasa el tiempo. Tenemos más confianza el uno del otro y puedo asegurar que se ha convertido en mi lugar seguro estos últimos meses. Suele venir todos los días a mi casa para estudiar y enseñarme un poco de brasileño, idioma en el que he avanzado bastante y ya puedo hablarlo con fluidez. Respecto a Trent, consiguió que quisiera hablar con él. Nuestra relación mejoró un poco, pero no tiene nada que ver a como era antes.

Terminé de vestirme y comencé a bajar los escalones de dos en dos. No iba con prisas pero tenía que prepararme la merienda de media mañana antes de irme. Archie ya estaba de camino a la escuela a si que no tenía que preocuparme por eso. Terminé de preparar el bocata y me dispuse a salir por la puerta.

Llegué a las escaleras de la entrada y a lo lejos pude reconocer a Caio, que tenía su cuerpo apoyado en la puerta y los brazos cruzados. Este se reincorporó cuando vio que me acercaba a él y me fundó en un abrazo como cada mañana.

Bom diaSaludé al brasileño en su idioma.

Bom día, princesaDijo Caio con una sonrisa de oreja a oreja, y yo se la devolví.

Caio era encantador. Era una persona llena de luz, gracioso y siempre estaba dispuesto a ayudarte. Es de esas personas que si te quieren te van a poner por delante de él siempre.

Ambos nos dirigimos a las escaleras a esperar a que sonará el timbre.

¿Te sigue escribiendo? La voz de Caio me sacó de mis pensamientos.

El brasileño sabía lo de Jude. Fue el primero en saber que mi padre me había prohibido hablar con él, después fue Alice y por último Trent. Solo ellos lo sabían a parte de mi familia.

Dejó de hacerlo hace un mes Le dije si mirarlo.

Por una parte estoy bien así, centrándome en mis estudios. Pero por otra parte echo de menos hablar con él. Prometí ayudarlo y ahora, cuando por fin podía hacerlo porque estaba empezando a abrirse yo me alejo de él. Me alejo sin darle ningún tipo de explicación o motivo. Dejandolo con mil dudas en la cabeza. Sin un por qué.

Sie- Me llamó Caio provocando que ahora si lo mirara —Sabes que puedes llamarlo siempre que quieras, ¿Verdad?

Claro que lo sabía, de hecho, le llevaba dando vueltas estos últimos meses. Varias veces estuve a punto de cogerles las llamadas. De coger un vuelo a Alemania y irme unos días con él sin importarme lo que dijeran mis padres o lo que digera la gente. Pero no podía dejarlo todo por él. Mis estudios, mi familia, mis amigos, todo está aquí en Liverpool, y no me veía preparada aún para dejarlo atrás.

He estado a punto varias veces Le hice saber -Pero creo que es mejor que cada uno siga su camino. No puedo dejar mi vida de aquí, no por ahora.

El brasileño asintió e iba a decir algo pero se vio interrumpido por el sonido de la campana. Me despedí de él y ambos nos dirigimos a nuestras respectivas clases.

Una vez entré al aula la mayoría de los asientos estaban ocupados, como de costumbre, y tuve que abrirme paso entre mochila y murmullos hasta encontrar un lugar al fondo. Estaba acostumbrada a los rostros familiares y a las voces conocidas. Sin embargo aquella mañana algo rompió la monotonía.

Corazón de cristal - Jude Bellingham Donde viven las historias. Descúbrelo ahora