Estaba saliendo del colegio, y ya eran como las dos de la tarde, ahora nos estábamos por juntar en la plaza con unos amigos.
Desde el colegio salí con la contu-mi mejor amiga desde que tengo conciencia- y en la plaza nos juntábamos con el facu, el cami y el lauti.
Con ellos me conozco desde chiquita, ya que somos todos amigos de barrio.
Con el que siempre sentí una energía especial fue con camilo, desde chiquita yo decía que me iba a casar con el, pero las cosas no se dieron tanto.
El es una de las mejores personas que conozco, yo lo amo, pero él nos ve como amigos.
La contu me mueve un poco para que salga de mis pensamientos.
-Gorda que pasa- me dice ella.
-Nada amiga, estaba pensando boludeces- nos sentamos en un banco de la plaza.
-Si amiga- me mira de forma graciosa -esos pensamientos tiene nombre y se llaman camilo-
No podía mentir, ella me conoce mucho, y sabe que en estos últimos años me enamore mucho mas de cami o milo-como le gusta a el que le digan-, pero bueno yo sé que el esta enfocado en su futuro, en su música y no lo quiero perjudicar, el es uno de los mejores artistas que conozco no hay nadie que haga lo que el hace, que transmita tanto como él.
-No gorda, el es solo mi amigo, ya está- le digo media triste -vos sabes que él tiene las cosas muy claras.
-Gorda no, vos y yo sabemos que el no te ve como una amiga, pero eso es lo que quiere hacer parecer el- me dice mirándome a los ojos -no sé si será por miedo o que, pero no es así y lo sabes.
-No sé, me da miedo- le digo con la vista en el suelo.
-Miedo a que mela- pero inmediatamente la hago callar, ya que veo a los chicos desde la esquina.
-Bueno bueno ya está, allá vienen- me sentencia con la mirada.
Desde la esquina ya lo ve, el siempre tan lindo, y no lo digo por la apariencia -aunque el tiene un estilo muyy lindo-, venia riéndose, anda a saber de qué, pero se veía tan lindo feliz.
Estuve con el en muchos momentos, yo se todas las que tubo que pasar, por eso también lo valoro mucho, por todo el esfuerzo que hizo por su familia.
Venia también con su mate, que no le podía faltar en su día, eran los mejores mates de todo el mundo literal, podía pasar horas con él, la charla y el mate de por medio.
-Hola chichis- saluda lauti, el era hasta ahora el mas grande del grupo.
-Que ondaa- saludó facu mientras se sentaban en el suelo alrededor del banco.
Y por último milo- Hola chicas- que nos saludo con un beso en el cachete.
-Y que onda todo bien- pregunto -como vienen esos temas- lo miro a milo.
-Nada re bien por suerte, ya tengo un montón de letras, pero tranqui- me mira con una sonrisita.
-Uy si re, yo voy si quieren, pero alguien que me acompañe- digo.
-Yo te acompaño amiga- me dice milo -pero no toquen el mate que cuando venga lo armo yo- dice mientras se va parando.
Llegando a la esquina veníamos hablando de boludeces, pero me pareció un buen momento para hablar un poquito más serio, ya que hacía mucho que no charlamos.
-Y qué onda, como anda la Aldana- le pregunto.
-Allá está la vieji, re emocionada por todo y con un poco de mido también- me dice.
-Si si, me imagino lo que debe ser- se me escapa una sonrisita de la emoción, se lo merecen mucho.
-Y cuando vas a ir a casa, me re pregunta por vos- me dice -me pregunta si nos peleaos la loqui.
No puedo no dejar que se me suelta una pequeña carcajada -Ay dios, la amo, si sos vos el que no me invitas, si sabes que yo voy a donde me digas.
-Bueno, entonces esta noche venís a casa a comer- me dice dejando de caminar para mirarme.
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