𝐈𝐧 𝐘𝐨𝐮𝐫 𝐖𝐢𝐥𝐝𝐞𝐬𝐭 𝐃𝐫𝐞𝐚𝐦𝐬 (𝐓𝐫𝐚𝐝𝐮𝐜𝐢𝐝𝐨)

XXVII

Pasé una hermosa mañana persiguiendo al gato callejero (que ya ni siquiera es callejero porque viene todas las mañanas a desayunar y luego a cenar, y duerme en el sofá todo el día) porque un pájaro había entrado volando en la casa y estaba decidido a matarlo. Logré salvar al pájaro. Gato callejero molesto. Mi gato durmió durante todo esto. Mi perro de alguna manera tenía miedo de los pájaros y se escondía debajo de la cama.

Arte de portada: Curbizzle

Capítulo 27

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—Es mi Semblanza la que lo hizo.

Probablemente la conversación debía haberse retrasado mucho tiempo, incluso si aún no les había dado el contexto completo. El Dr. Oobleck le había sugerido que continuara manteniendo oculto su aspecto de caminar en sueños hasta que al menos pudiera controlarlo, porque la gente sólo se preocuparía a su alrededor si supieran que podría terminar en sus cabezas.

—Eso explicaría por qué tu aura estaba tan loca hace aproximadamente una semana —dijo Ruby—. Entonces, ¿desbloqueaste tu Semblanza? ¿Qué hace?

—Aún no estamos seguros. Por eso es contraproducente. O tal vez ni siquiera es contraproducente y está tratando de hacer algo —tenía la atención de todos, sobre todo de sus compañeros—. Pero trabajo con el Dr. Oobleck todos los días para tratar de entenderlo, y el director y la señorita Goodwitch también lo saben, así que no es que no tenga mucha ayuda en esto.

—¿No hay nada que podamos hacer? —preguntó Pyrrha.

Su preocupación era obvia, al igual que el motivo. Ella lo amaba. Pyrrha estaba enamorada de él. Era difícil mirarla a los ojos y no mostrar alguna señal de saberlo, ya fuera sonrojándose, rompiendo el contacto visual o simplemente tropezándose con sus palabras.

Por eso su Semblanza era un dolor de cabeza.

—El Dr. Oobleck dice que es mala idea practicar con una Semblanza desconocida con personas que te agradan —desvió—. Por culpa de ellas tal vez terminen muertos.

Weiss resopló.

—Una exageración, estoy segura, pero no es un punto irrazonable. Sin control, podrías terminar lastimando a alguien.

—O más probablemente se lastime —dijo Nora.

—O eso. Sin embargo, es bueno que estés buscando ayuda experta de los profesores. Sólo puedo imaginar lo desesperado que estarías si estuvieras andando a tientas con esto por tu cuenta.

Weiss lo dijo con buenas intenciones, incluso cuando lo insultó, y Jaune estuvo de acuerdo con ella de todos modos. Habría estado bastante jodido tratando de manejar todo esto sin la ayuda del Dr. Oobleck. Sin mencionar que había estado en los sueños de algunas personas importantes. Sin el apoyo de los maestros, el general Ironwood podría haber salido impune al arrestarlo.

—No he oído hablar de muchas Semblanzas que vengan acompañadas de autolesiones —dijo Blake.

Antes de que Jaune pudiera entrar en pánico, Yang se aclaró la garganta.

—La mía sí.

—¿En serio?

—No me hago daño, pero mi Semblanza depende de que me hagan daño. En cierto modo, también lo hace la de Nora.

—Yang tiene razón —dijo Ren—. Puede que Nora no sienta ningún dolor al ser electrocutada, pero es autolesión cuando lo hace. O lo sería para cualquier otra persona. La mía podría considerarse igual desde una perspectiva mental, aunque afortunadamente los efectos son sólo temporales.