⌢ : 🔥 𝗖𝗛𝗔𝗣𝗧𝗘𝗥 𝟭𝟱

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Eddie.-
  
  
  
— Les presento a Buck. — Dije con una sonrisa nerviosa y el mencionado levantó su mano derecha para saludar. — Buck, ellos son mis padres y mis hermanas, Adriana y Sophia.

— Es un placer. — Dijo con una sonrisa grande en su rostro mientras bajaba su mano. — Y en realidad mi nombre no es Buck. Me llamo Evan, Evan Buckley. De ahí mi apodo; Buck.

Todo era silencio una vez Buck se presentó. Mis padres estaban callados, con una expresión sería en sus rostros, como cuando una vez rompí uno de los jarrones favoritos de mamá, esas miradas que desde pequeño odiaba ver.

— Que bueno verte, Buck. — Dijo mi tía con una sonrisa de oreja a oreja para levantarse de su silla y acercarse a Buck y saludarlo con un beso en la mejilla.

— Igualmente, Señora Pepa. — Al escuchar como la llamó me golpeé el rostro suavemente con mi mano derecha.

— Sabes que puedes decirme tía Pepa o solo Pepa. Como prefieras, cariño. — Mi tía era tan buena con él, que hasta empiezo a creer que lo quiere más que a mí.

Buck se aclaró la garganta y le sonrió nuevamente. — Claro. Tía Pepa.

Luego de eso hubo un pequeño silencio en el comedor, nadie hablaba. Mi tía fue quien rompió ese silencio.

— Dime, ¿te gustaron los dulces que te envié con Eddie el otro día?

— ¿Qué si me gustaron? — Buck rió — ¡Me encantaron! Sobre todo ese pastel, ¿cómo se llamaba?

— ¡Pastel de tres leches! — Añadió Christopher desde su silla, levantándose para caminar hacia Buck.

— ¡Ese! — Buck se agachó ligeramente hasta llegar a la frente de Chris, donde depositó un beso. — ¿Qué tal, campeón?

— Todo bien, Buck.

Mis padres no decían ni una palabra, pareciera que les hubiera comido la lengua el gato. Al pensar eso volteé a ver al que caminaba por las piernas de tía Pepa y me miró mal. Luego volteé a ver a mis padres quieren seguían con una expresión seria y con la boca cerrada.

— ¿No dirán nada? — Preguntó Adriana. — No es la primera vez que Eddie trae a una de sus parejas a casa sin avisar. — Se levantó de su asiento para acercarse a Buck y saludarlo con un beso en la mejilla también. — Un placer, Buck. Soy Adriana, me da gusto al fin conocerte.

— Adriana, él no... — No pude terminar, como siempre.

El sonido de la silla chillar al ser arrastrada por el suelo me interrumpió, Sophia rápidamente la siguió e hizo lo mismo, beso en la otra mejilla y le tendió la mano. — Sophia. Perdona a nuestros padres, son gente de pocas palabras. ¿Desde hace cuánto que estás con nuestro Eddie?

— Qué él no... — Pude sentir nuevamente mis mejillas arder, podría apostar que estaba más rojo que un tomate. Me aclaré la garganta y solté un suspiro. — No somos pareja, somos amigos.

Adriana me miró sorprendida, luego volteó a ver a Buck. — Pues por como se veían ahí afuera, podría jurar que ya hasta estaban casados. — Soltó una ligera carcajada, Sophia igual.

— Jaja, muy graciosa. — Rodé los ojos y nuevamente volteé a ver a mis padres que parecían más tranquilos que antes, ya no tenían esa expresión de seriedad y posible decepción en sus rostros.

— Un placer, Evan. — Se levantó mi padre para acercarse a Buck y extenderle la mano. — Me llamo Ramon.

— Un gusto, Señor Diaz. — Acercó su mano a la de mi padre para estrecharla.

𝗧𝗵𝗶𝘀 𝗙𝗜𝗥𝗘 | 𝗕𝘂𝗱𝗱𝗶𝗲 | 𝟵-𝟭-𝟭 (𝗘𝗦𝗣)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora