QUE TAL UN AIRE ?

VAIVEN DE EMOCIONES

En el inmenso universo de mis sentimientos, donde convergen dulces nostalgias y profundos lamentos, se despliegan mis versos como hojas al viento, hermosa amalgama de pasiones y sufrimientos. En cada rincón de mi alma se encienden las llamas, del amor más puro al dolor que me reclama, y entre susurros mi voz se derrama, en versos tejidos con hilos de mi propia trama.

Mis emociones danzan como luces en el cielo, caprichosas y libres, van dejando su huella, me embriagan de alegría, me arrastran al desvelo, y mi pluma vuela, libre y bella. En cada palabra hay un torrente de vida, que se desliza por mi ser con ímpetu y fragancia, gozo y tristeza en cada línea tejida, un abrazo cálido o el rastro de una añoranza. Mis versos son ríos caudalosos de pasión, en los que navego ansioso, sin contención, expresando la esencia de mi corazón, en un lienzo de versos lleno de emoción.

Hay versos de amor, dulces y apasionados, con letras que abrazan, que calman los quebrantos, susurros sinceros de corazones enamorados, declaraciones eternas entre margaritas y campos. Pero también hay versos amargos y sombríos, que hablan de pérdida, de tormentos y desafíos, lamentos impregnados de oscuros desvaríos, que desnudan el alma en sus más íntimos vacíos.

Mis emociones se alzan como aves en vuelo, una sinfonía de colores, en un cielo sin miedo,
estallidos de gozo o torrentes de anhelo, cada verso una melodía, cada estrofa mi credo.
En cada poema, se dibuja mi esencia, el eco de mis afectos, su fuerza y su esencia, una cascada de emociones en perfecta coexistencia,
que transforman las palabras en un canto de hermosa resonancia.

-Leyko GZ