Habían pasado días, había perdido la cuenta de cuantas veces sentí que volvía a vivir, sentía que podía ser libre pero al mismo tiempo tenía que esconderme de alguien o mejor dicho; de bill Kaulitz.
Kally me trataba bastante bien, no me controlo en ningún momento, me dio mi espacio y lo mejor de todo él me confesó que no importa que pasaba, él me cuidaría.
-¿Lista?-kally golpeó levemente la puerta de mi baño, yo me estaba maquillando con un deliniado negro.
-Más lista que nunca!-termine con mi labios y salimos, estaban sus chicos en el auto listos para salir.
Kally corría autos y a decir verdad era increíble todo lo que podía hacer, no conocía esa parte de él y me sentía feliz de que se estuviera abriendo conmigo. El llevaba un pantalón roto negro, su camisa tenía unas cuantas cosas escritas y le hacía a juego su chaqueta de cuero roja.
-¿Acaso compartimos ropa hoy?-empezó a reír al verme, yo llevaba un top negro, mi falda era de cuero al igual que mi chaqueta negra.
-Tal vez, igual me veo guapa.-movi mi cabello en forma de fingir que estaba presumiendo.
-¿Y que pasa conmigo oli?-hablo enojado, me encantaba su humor, seguía mis juegos sin incomodarse.
En el camino fue todo increíble, tenía la ventana abajo y la música al tope, me sentía tan bien conmigo misma en este momento que me olvidé que bill posiblemente me estaba buscando o de por si ya me había olvidado. No lo niego, pasamos momentos lindos pero estar junto a él era tóxico, cualquier movimiento o palabra era como veneno hacia mi corazón.
Simplemente no debía estar cerca de él pero al mismo tiempo extrañaba que estuviera vigilandome.
-¿Estás segura de que quieres hacerlo?-pregunto kally, abriéndome la puerta para que pudiera salir.
-La vida es solo una kally.-salí, me sentí intimidada por todas las miradas del lugar, chicas con un culo gigante mirándome mal.
-Déjalas, solo tienen envidia.
-¿Y por qué deberían tener envidia, Acaso eres un famoso o algo kally?-pregunte con sarcasmo.
-No idiota, tienen envidia de que traigo a una chica por primera vez.-acomodo su anillo en su mano, estaba tatuado todo el brazo, su tatuaje se estiraba hacia el cuello terminando en su pecho.
-Ya veo, entonces que se pudran, vamos.-agarre la mano de kally, me encantaba hacer enojar a esas perras.
La noche paso tranquila, tragos y drogas como siempre, kally no tomaba mucho cuando estaba conmigo, siempre estaba al pendiente de mi ademas que ya casi era hora de correr junto a kally.
-¿Estás emocionada rubia?-pregunto eliot, el mejor amigo de kally.
-Tal vez, de seguro kally te gana.-lo empuje leve con mi hombro.
-Oye kally controla a tu chica! Merezco respeto.-rodeo los ojos, me dio la espalda y se fue.
-Debería tener respeto él, por eso me cae mal.-menti.
-Vamos oli, ustedes siempre pelean.-agarró mis hombros haciendo que caminara prácticamente obligada.
Espere en el carro, kally estaba alistando unas cosas antes de correr y los tacones que llevaba ya me tenían hasta la madre, prefiero estar sentada un buen tiempo aquí.
-¿Que haces ahí?-esa voz, esa maldita voz..
Fingí no escucharlo, la música estaba estaba tope y yo miraba la pequeña pulsera que kally me había regalado.
-Bien, no me quieres hablar, entiendo.-hablo más fuerte, ahora dando un pequeño golpe dentro del carro.
Me giré para verlo, estaba cambiado, su pelo ahora estaba más corto y lo tenía lacio, estaba a punto de hablarle cuando veo su estúpido cuello con moretones y lapiz labial, me arrepiento ahora de girar.
-Veo que antes de venir estabas en algo más.-mire su cuello, el maldito labial en su camisa me hervía la sangre.
-Si, tenía cosas que hacer.-prendió un cigarro, su mano estaba estendida en la ventana del carro.
-Bien por ti, yo también tengo asuntos pendientes.-solté una pequeña risa antes de subir al tope la ventana alejando todo tipo de ruido.
Kally llegó justo en ese instante haciendo que mi comentario tenga más relevancia, los vidrios era negros así que no podía ver absolutamente nada, para enojarlo me puse a saltar en el carro para que pareciera que estábamos haciendo algo más que hablar.
-¿por qué pareces loca saltando?-kally me miró, parecía estar entendiendo mi acción y el comenzó a moverse también.
-Le vamos a dar una lección a bill, se la merece.-tome mi lápiz labial, agarre la camisa de kally, le di unos cuantos besos, era oscura pero se podía notar los besos.
Por mi parte mi idea era tener algún chupeton pero no podía hacérmelo yo, me dio pena decirle a kally, así que solo me movi un poco el pelo y mi lápiz labial.
-Solo pídelo.-kally rompió el silencio, sacándome de mis pensamientos.
-¿Que?
-¿Quieres que te haga un chupeton?-pregunto curioso, sus cejas ahora se levantaron.
-No...
Kally agarró mi cara suavemente, posicionó sus labios en mi cuello haciendo fuerza creando un chupeton, tal vez las cosas salieron un poquito de control y ahora estaba en su regazo besándome..
Tal vez se me salio de las manos un poquito mucho.
-¿Listos?-apareció una chica con bra y una falda extremadamente corta.
-Me debes estar jodiendo.-se quejó kally, su voz estaba agitada.
-Mierda..-hable bajo, mi voz estaba aún más agitada.
Me baje de su regazo y me puse el cinturón, al bajar la ventana bill estaba con una mirada de enojo su cigarro ya no estaba y sus manos estaban en forma de puño, me miré al espejo y tenía mi labal corrido, kally tenía unas pequeñas manchas pero le dio igual en dejarlas.
La chica contó hasta tres, su bra salió volando y los carros rápidamente salieron a la carrera.
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Mi vecino de al lado
Mystery / ThrillerUn nuevo vecino llegó al edificio y por error mandaron un paquete a el departamento de olive en lugar al de él, al hablar con su vecino noto su peculiar forma de vestir y comportarse, al notar esto creo en ella una curiosidad por saber el por qué de...