doll.

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En este capítulo se tocan temas delicados por lo cual si no eres apto para leerlos te recomiendo leer solo el final.

(Pueden escuchar "im tired with zendaya" o "what was i made for?" Para mejor sentimiento al leer.)

Pensé que era bill o algún vecino pero cuando abrí la puerta era un chico alto, no me dejo ni si quiera hablar, fue directo y parecía que buscaba a alguien más adentro de mi apartamento.

-¿Tú eres olive?-pregunto el peli negro, sus ojos eran verdes igual que un bosque donde te pierdes fácilmente. -¿Niña?

-Si, soy yo, quien eres o que buscas?-le respondí, no podía ver bien su cara pues tenía un tapabocas.

-Soy David, tal vez no me conoces pero yo si a ti.

Intente volver hablar pero no me dejó, inmediatamente se tiro encima mio haciendo que yo me diera contra la pared, el cerro la puerta de un portazo, intenté gritar pero el me tapo la boca rápidamente. No entendía nada, solo entro y me empujó, me di cuenta que estaba buscando a alguien o algo.

-¿Dónde lo tienes muñeca?-pregunto alterado.

-No se de que hablas..que estas buscando?-intente volver a hablar pero me ignoro entrando a mi cuarto.

Entonces fue cuando recordé lo que bill quería esconder, mi pánico entró cuando el chico empezó a votar todo, empujó el televisor hacia la pared, mi ropa salió volando rápidamente.

Cuando se dio cuenta que no había nada en todo el apartamento se quedó mirándome, sus ojos me dieron ahora miedo, me dio una pequeña sonrisa y empezó a caminar hacia mi mientras yo caminaba hacia atrás hasta que di contra la pared sin tener escapatoria.

-Puedo darle su merecido a bill..contigo.-me agarró de los hombros empujando mi cuerpo contra la mesa.

-Bill no vive aquí él-

Me interrumpió cuando agarro mi pelo fuertemente y me hizo mirarlo, paso su lengua por sus labios lentamente mientras recorría toda mi cara, viendo y analizando mi temor.

-Muñeca, se que él no vive aquí, no te preocupes, voy a ser gentil.-se burló entre dientes de nuevo.

Claro que no me quedaría quieta, le di un codazo en la cara y él se alejó, aproveche al correr a la puerta y pude abrirla pero mis intentos fueron inútiles pues era claro que él era más rápido que yo y la cerro de un portazo, no dudo en empujar mi cuerpo nuevamente hacia la sala, me volví a incorporar intentando buscar alguna salida o arma para defenderme. Empecé a respirar rápido, mi cuerpo empezaba a temblar mientras lo veía que se desabrochaba el pantalón..se quitaba la camisa y por último sacaba un arma.

-Por favor..-hable como pude, mi voz no podía salir de mi garganta, estaba completamente seca, me lamente en abrir esa maldita puerta.

-Si mueves un puto dedo te voy a abrir esa hermosa boca que tienes con un disparó.-escupió enojado al ver mi rechazo.

Me aleje como pude pero el agarró mi pierna jalando mi cuerpo hacia él, se posicionó encima mío mientras su arma estaba en todo mi estómago, tal vez era mejor una bala dentro de mi en estos casos.

Empezó a quitarme mi pantalón, intenté con todas mis fuerzas salir de su agarre, empecé a gritar como loca pero su arma cada vez subía hasta ponerla en toda mi cabeza, miré hacia otro lado y ahí lo vi, un cuchillo de cocina. Tal vez podía ser un suicidio pero prefería eso que me este tipo me hiciera algo.

Mi vecino de al ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora