...
1
Sarvente estaba parada sola en medio de la nada, rodeada por una oscuridad infinita. A lo lejos logró distinguir una casa, así que sin pensarlo dos veces se acercó trotando hacia ella. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, pudo darse cuenta de que el sitio era su antigua casa, donde vivía con su madre y su padre.Se quedó helada al ver el lugar nuevamente, no le traía buenos recuerdos. Permaneció parada mientras miraba, hasta que de repente la puerta de la casa se abrió y vio cómo ella misma, de hace 13 años, salía junto a su madre.
La pequeña Sarv y su madre caminaron agarradas de la mano hasta el patio, donde comenzaron a jugar juntas como solían hacerlo, aunque no tan seguido.
Ambas reían y la pasaban genial, era la relación de madre e hija perfecta, al menos así lo veía Sarv. Siempre amó demasiado a su madre y disfrutaba mucho pasar tiempo con ella.
Luego de varios minutos, otra figura salió de la casa, una figura que Sarv no lograba ver claramente. Su cuerpo era completamente negro y se veía distorsionado.
Ella rápidamente se dio cuenta de quién era y comenzó a sudar.
"¡¿Es que nunca dejarás de atormentarme?!" gritó la Sarv adulta al ver cómo esa figura se acercaba a su versión de hace 13 años y su madre.
La figura volteó a verla y sonrió.
"Hola, Pequeña."
---
~ 16/05/25 | 7:06 AM ~
POV DE SARVENTE
Era muy temprano cuando desperté, había tenido otra pesadilla de ese tipo... No creí que podría conciliar el sueño, así que pensé que lo mejor sería levantarme y quizás comer algo.
Me vestí con mi ropa casual y caminé hasta la cocina para ver qué podía cocinar. Vi que aún quedaba leche y huevos, así que pensé en hacer un omelette. No soy la mejor cocinera, pero tampoco es tan difícil, supongo.
Agarré los ingredientes y comencé a cocinar.
Luego de unos minutos de puro silencio, escuché pasos detrás de mí. Paré de cocinar y volteé para ver quién estaba ahí. Era mi hermana, Taki, quien me miraba fijamente. Su mirada era un poco tenebrosa.
"Oh. Hey, al menos di una palabra, no entres y te quedes mirándome así. Das miedo", le dije mientras reía un poco.
"Aaah, bueno, lo siento. Solo quería ver qué estabas haciendo", respondió ella.
"Mmm, estoy cocinando, Taki, no sé si te gustaría ayudarme."
"Lo que sea por mi hermana", dijo ella en tono de burla.
"Ajá, gracias, gran hermana", dije también en tono de burla.
Ella se acercó y, si bien no ayudó mucho, no estar sola y tener alguien con quien hablar mientras cocinaba no estaba mal.
Al terminar de cocinar, ambas nos sentamos a disfrutar la comida mientras platicábamos.
"¿Y qué planeas para hoy?", me preguntó ella.
ESTÁS LEYENDO
𝐒𝐚𝐫𝐯𝐞𝐧𝐭𝐞'𝐬 𝐅𝐢𝐧𝐚𝐥 𝐒𝐭𝐨𝐫𝐦
General FictionEn un mundo donde los lazos del destino se entrelazan con la oscuridad, Sarvente emerge como una figura enigmática, marcada por su trato con un demonio y las cicatrices de un pasado turbulento. Con la sombra del remordimiento persiguiéndola, se encu...