Nuestro Tiempo es Ahora

The Perfect Night - Hotel P.2

Luego de la emoción de los regalos Becky sentía un poco de cansancio, ya era después de media noche pero nada realmente iba a impedir que Freen y ella consumaran el matrimonio. Freen estaba detrás de Becky, ambas con su mirada a la piscina, Freen desabrochó ambos botones del traje de Becky dejándolo caer al suelo.

B: Babe, que hemos hablado de dejar la ropa en el suelo? En especial este traje tan elegante... dijo un gemido escondido en su voz.

F: Déjame hacerlo solo por hoy, y si quieres compro toda la tienda o la franquicia completa. Besó el cuello de Becky, su hombro izquierdo y dejó su nariz hundida en el cabello de su esposa.

Becky no llevaba nada debajo del traje lo que causó un pequeño ataque de celos dentro de la mente de Freen. - alguien pudo haber tenido un buen vistazo de ella, pensó. Su respiración se aceleró un poco y Becky lo notó enseguida.

B: Nadie puede verme mi amor, solo tú. En esto se dió la vuelta para estar cara a cara con una muy sonrojada Freen, sabía que debía quitar esos pensamientos de su mente.

F: Bec es que... sacudió su cabeza en negación. - Lo siento, a veces me gana mi mente.

B: Sabes que secretamente amo esos celos tontos, se acercó y besó la comisura de los labios de Freen. 

Freen cayó en cuenta lo sexy que se veía su esposa en este momento y recordó continuar con la misión de desvestirla. Se arrodilló ante ella y Becky suspiró en emoción, le dió varios besos en su perfecto abdomen dejando una que otra marca. Estaba frente a frente con el centro de Becky, enganchó sus pulgares en el pantalón y lo bajó lentamente, Becky levanto un pie seguido del otro manteniendo el balance en los hombros de Freen ya que no confiaba en sus piernas, Freen le dió un beso por encima de esa mini tanga que recuerda perfectamente haberle regalado a su esposa hace algunos días. Todo era surreal, el calor y la humedad que salía de esa pequeña pieza de ropa interior estaba haciendo que Freen perdiera sus cabales pero se había prometido así misma no dejarse llevar por su instinto animal y darle a Becky una noche de bodas que jamás olvidara, se deshicieron de ella última pieza de ropa de Becky y Freen no pudo evitar darle otro beso pero esta vez directamente en su punto más sensible.

B: Baby... pensé que entraríamos a la piscina. Dijo casi sin aliento.

En eso Freen se levanta, y empieza a quitarse la parte de arriba de su propio traje, a diferencia de Becky ella llevaba un bralette que también desapareció en el montón de ropa ya en el suelo, solo quedaba con el ajustado pantalón. Pero Becky no se iba a quedar de brazos cruzados ante semejante espectáculo.

B: Creo que es mi turno, dijo posando su lengua entre sus dientes sabiendo que esa miraba hacia enloquecer a Freen.
- Baby, creo que este pantalón está muy apretado, te importa si te ayudo?

Freen estaba como en una especie de trance y apenas pudo sacudir su cabeza para indicarle a Becky que estaba a su merced.

Becky repitió lo que hizo Freen y se puso de rodillas, Freen no pudo evitar mirar hacia abajo y ver a su ángel bajando el cierre del pantalón lentamente y bajarlo hasta sus tobillos dejándola solo en unos bóxer de diseñador ( eran literal mandados a hacer especialmente para Freen )

B: Dios mío baby... tenías mucho tiempo así? Dice dirigiendo la mirada a su esposa. - Perdona que no te presté casi atención en la fiesta, te hubiese dado una mano, dijo guiñándole el ojo.
Freen sintió que con solo las palabras no tan inocentes de Becky pudo haber liberado todo lo que tenía acumulado.

F: Bec, de verdad que no tienes piedad conmigo ni ahora que soy tu esposa.

B: Perdona mi amor es que de nada te pones haha, mira nada más.