Alcohol y problemas

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Ghost la miró directamente a los ojos por varios segundos antes de acercarse.

___ notó su proximidad e inmediatamente miró al suelo, no estaba lista para un posible regaño.

-Deje de esconderse, soldado. Apreciaría ver cara a cara con quien estoy hablando.

Tragó saliva antes de mirarlo directamente a los ojos.

-Su nombre, soldado. Pidió en tono seco.

-Soldado ___, ¡señor!

-Bien, soldado pequeña ___, Espero que sepa que mientras estemos en esta base, es mejor que me llames 'Sargento Mayor' o "Ghost" en lugar de 'Gruñon'.

En secreto, a Ghost le complacía mucho ver que se sentía nerviosa en su presencia.

──Lo siento, no debí d──

──___ ... ──Parecía saborear el nombre en su boca.

──Seguiré llamándote soldado pequeña para ahorrarme el tiempo de recordar tu nombre.── Murmuró con una sútil sonrisa.

Ella ahora estaba un poco más relajada a medida que el sargento se mostraba más expresivo.

──¿Ya le dieron el recorrido?──

──No creo.── Dijo en un tono menos áspero. ──Pero me gustaría que me dieras un pequeño panorama de cómo funcionan las cosas aquí.──

A medida que la tarde pasaba lentamente, ___ y Ghost recorrieron cada piso de la base.

──En KorTac hay todo tipo de soldados, desde amigables hasta los no tan abiertos a hablar.── Remarcó esta ultima parte ──Pero al final del día todos somos personas buscando sobrevivir a la guerra...──

Ghost la observó a medida que caminaba junto a ella, deteniéndose de vez en cuando para tomar algunos apuntes en una libreta.

──Por aquí esta el gimnasio, no hay ninguna regla que prohíba usarlo cuando quiera. Siempre esta abierto.──

──Entonces ¿Puedo hacer uso de el cuando me lo proponga? Interesante.── Murmuró el británico.

Mientras continuaba escribiendo, volteó a mirarla con interés. -O tal vez podrías guiarme en mi primer entrenamiento, soldado.

Ella sintió una oleada de nerviosismo. ──Claro, podemos empezar mañana, en la hora del entrenamiento cuerpo a cuerpo.──

Él levantó una ceja y anotó algo en su libreta.
Ella podía jurar que Ghost sonreía detrás de su máscara.

...

"No debería enfadarme por una mujer" pensó König.

"Ella no vale la pena".

Pero en el fondo se sentía mal, no estaba acostumbrado a que ___ lo rechazara.

El austríaco ya estaba en un punto en el que no podía pensar con claridad, quería confrontarla, gritarle, tener toda su atención, que él sea el único hombre que ella mire.

No le gustaba para nada la presencia del nuevo sargento británico.

Se sentía tan patético mientras se empinaba la botella de Whisky.

──Bien, tal vez no sea buena idea seguir bebiendo. Mañana tenemos entrenamiento.──  Murmuró Horangi, pero el austríaco ignoró.

Miss You | KönigDonde viven las historias. Descúbrelo ahora