Jake no era estupido, sabía que Sunghoon lo deseaba de alguna manera. Estaba seguro de ello, desde pequeños recordaba mil escenarios donde Sunghoon lo veía de una manera extraña.
Sunghoon siempre deseaba tener sometido a Jake ante el.
Cuando Sunghoon invito a Jake a su departamento Jake acepto. Por qué Jake tenía deseo de "ser tomado", Jake deseaba que fuera aún en lo físico, sentirse lleno y pleno.
Tal vez aquella era su manera de sobrellevar la tristeza, unos bebían, otros salían de fiesta o fumaban.
Jake tenía sexo.
Siempre se sentía vacío, que mejor manera de llenarlo?
- Me extraño que aceptaras venir.
- Querías que viniera, no?
Sunghoon asintió suavemente mientras caminaba hasta el gran armario, no tardó demasiado y salió con un par de prendas.
- Puedes ducharte en el baño del cuarto, yo lo haré en el de visitas.
El menor asintió.
La ropa que Sunghoon le había dado quedaba notablemente apretada de sus brazos, sus músculos eran claramente notorios. Aunque a Sunghoon le quedaba ligeramente floja de aquella parte.
Jake se ducho rápido, su mente se encontró divagando después de la ducha.
El techo en tonos marrones se convirtió en su vista preferida mientras sus pensamientos volaban.
Si mente viajo hasta un el de 12 años, cuando su padre le enseñaba a disparar. Jake había sido tan inexperto que se disparó en la pierna, a pesar de sus gritos de dolor y rostro empapado de lágrimas su padre lo obligó a terminar la práctica solo con un vendaje superficial.
Jake odiaba a su padre.
Por qué le arrebato su niñes, su pubertad y la mayor parte de su juventud. Lo aprosionó y lo amoldo a su manera, como simple masa que se debe cocer. Lo hizo querer su aprobación en todo momento, lo hizo dependiente de las personas.
Tal vez por eso Jake no había llevado nunca una relación seria, siempre fue esa clase de chico que necesitaba validación, atención y aprobación todo el tiempo. Siempre demasiado.
Jake salió de la ducha dirigiéndose hacia la cama. No se puso la camisa, odiaba dormir con ella.
Duró al rededor de diez minutos hasta que el más alto entro por la puerta.
Con su pijama de dormir perfectamente planchada y el cabello seco a diferencia del de Jake el cual aún estaba empapado.
- Te enfermaras si te duermes con el cabello mojado.
- Soy lo suficiente fuerte. - Jake se encogió de hombros. Esperaba que el mayor tomara la iniciativa pero Sunghoon no parecía tener intensiones de aquello.
Sunghoon tomo una toalla del baño.
- Bien, te lo secare levemente. Ven acá Jake.
El menor obedeció sentándose en la orilla de la cama.
- Tengo la extraña sensación de que mañana cuando despierte no estarás. - Sunghoon habló mientras reía. - Tienes tendencia a huir.
- Soy un chico libre, que te digo?
- Estás triste por la muerte de tu padre? - Sunghoon detuvo sus palabras un segundo sin parar de secar su cabello. - No parecían muy cercanos pero era tu padre.
Y entonces Jake sintió como su figura de macho alfa y sus ojos se aguadaban.
Jake siempre fue fuerte.
Tal vez por eso odiaba a Sunghoon, como aquella vez que se disparó en la pierna debido a su inexperiencia. Cuando Sunghoon llegó a el con una paleta de hielo lloro en su hombro, no hizo falta palabras, Jake odiaba tener emociones pero Sunghoon lograba sacarlas todas como si de destapar una lata se tratará.
Jake siempre considero a Sunghoon un buen amigo.
Hasta que Sunghoon comenzó a tener hormonas y sentimientos, no supo cómo lidiarlo así que simplemente lo alejo. Al principio Sunghoon no sabía que pasaba, después se sintió herido, enfadado por los rechazos de Jake pero de alguna manera Sunghoon siempre supo que el siempre estaría para Jake.
Y lograría que Jake lo viera de esa manera.
- El.. - Se detuvo unos instantes. - Fue alguien, duro supongo. Pero era el y no podía hacer nada, es como si lo amara por que era mi padre pero lo odiara por lo mismo. Veía a el ser tan dulce con todos e incluso tenía acciones dulces conmigo, yo no podía odiarlo. Pero a veces el era tan frío y distante como si jamás lo hubiera conocido en realidad y solo por segundos lo odiaba, cuando me regañaba por cosas tan injustas y me hacía sentir como un completo estupido. Tal vez si el me hubiera criado diferente yo sería diferente, desearía ser diferente. - Jake se encontró recostandose en el pecho de Sunghoon. - Aún me sanciono si me levanto demasiado tarde o si digo o actuó de una manera que se que el no aprobaría, recuerdo que siempre me volvía un niño necesitado de afecto en su presencia. Eso era lo que más odiaba.
Sunghoon comenzó a acariciar suavemente el cabello ya semiseco de Jake, de una manera suave haciendo que el menor se sintiera reconfortado sin agobiarlo. Jake no lloraba aunque sus ojos cristalinos parecían no resistir más, el fuerte aroma del perfume de Sunghoon acompañado con el olor a jabón lo embriagaron causando una especie de nido.
- Jake, ya no tienes que huir, el ya no está.
- Tengo una vida Sunghoon, una vida que amo. Es como si pudiera ser una mejor versión de mi mismo, sin toda esta mierda, realmente no sabes lo genial que es. - Jake sonrió iluminando sus ojos. - Tengo muchos amigos, Euijoo, Koga y el mejor de todos Riki. Es como si pudiera ser yo mismo con ellos. Todos de ellos aman el arte tanto como yo.
Sunghoon veía a Jake como una pieza delicada en exhibición, como si Jake fuera tan ajeno pero tan suyo y esa ves por primera vez sintió como si aquella pieza hubiera recibido una mejor oferta.
Y el fuera incapaz de contra ofertar.
Tal vez debía dejarlo ir verlo ser tan feliz como en ese momento que le contó cada detalle de su vida. Sabía que el no podía darle otro estilo de vida, volverían a aquel estilo del que huyo y una parte de el, solo una parte pequeña. Quisó encerrarlo para jamás dejarlo ir otra vez.
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Obsessed
Random"Te pongo nervioso?" Aquella pregunta comenzaba a cansarme. "Iré a ducharme" En ese momento sus ojos cambiaron, no eran de ese color oscuro y potente que siempre había visto en el, su semblante se relajo y por un segundo pensé que simplemente se qui...