Capítulo 29

30 4 1
                                    


"And it kills me 'cause I know we've ran out of things we can say"
__

"Y eso me mata porque sé que se acabaron las cosas que nos quedamos sin cosas que decir.

Punto de vista de Jenna

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Punto de vista de Jenna.

Me puse unas gafas de sol mientras estaba sentada en uno de los sillones del living.

—Me hacen una prueba de alcoholemia y triplico. —habló Óliver echándose en mi hombro.

—Normal. Pero es que aún queda Sevilla.

—Yo hoy ya no bebo más. —aclaró mi mejor amigo.

—Que te lo has creído. —me reí.

—Mira por ahí viene tu novio. —me fijé en Lucas, quién no había aparecido en toda la noche por la habitación. Cuando le escuché hablar solo pude reírme, lo había celebrado a lo grande.

Cogí el móvil y le grabé.

—Buenos días, hermosa mañana ¿Verdad? JAJAJAJA. —dijo haciendo movimientos extraños para acabar riéndose al final normal. —Que bien se está en segunda.

—¿Te has escuchado? —dijo Óliver. Todos dirigimos la mirada hacia Cachete el que apareció con Acuña bebiendo de una botella rota.

—Che, reservar que en Sevilla la vamos a romper. —habló Lucas.

(...)

Ojalá pudiera vivir eternamente en aquel día, y no vivir la situación en la que estoy actualmente. Lucas ni me miraba a la cara, normal.

Hoy nos había tocado viajar de nuevo, y Logan volvió a quedarse en Sevilla con mi hermana, no me gustaba dejarla sola, pero ambos teníamos que trabajar.

—Jenna. —me habló Loïc cuando me vio con la mirada fija en ningún lado y dándole vueltas con la cucharilla al café. —¿Te encuentras bien?

Miré al chico francés con trenzas que estaba a mi lado.

—Sí. —respondí sin más.

Él miró a la zona a la que yo miraba y vio a Lucas y Sara riéndose, yo no me había dado cuenta porque estaba perdida pero entonces lo vi.

—Entiendo. —dijo. —Yo no voy a juzgarte por lo que pasara con Adri, pero sé que quieres a Lucas y que Lucas te quiere a ti. Os vi en Budapest y solo dos personas que se aman con locura pueden mirarse así. Si no os quisieráis, Logan no existiría.

—¿Y qué hago, Loïc? No sé qué hacer.

—No sé qué puedes hacer, pero sí te diré lo que no puedes hacer y es quedarte aquí sentada viendo cómo al amor de tu vida se lo lleva una rubia que solo aprovecha estas situaciones. —dijo Badé. —Lucas luchó por ti, ahora te toca a tí luchar por él.

Miré a Badé sonriéndole, y luego le abracé.

—Si sigues sin jugar haré que te contraten como mi ayudante.

—Yo nací para ser futbolista, no psicólogo.

—Te quiero, Loïc. —dejé un beso en su mejilla y me acerqué hasta Sara y Lucas, la rubia me puso una mala cara, pero cómo decirlo sin que suene mal, me la sudó básicamente. —No me mires con es cara que si te molesto, te jodes.

—Pero tú de qué vas. —dijo Sara, levantándose.

—un respeto cómo me hablas, que soy la madre su hija.

—Pero...

—Sara, vete. Luego nos vemos. —dijo Lucas. Ella se sorprendió, pero aquí está la respuesta a todo. Siempre vamos a ser nosotros. Cuando la rubia se fue, mi argentino favorito se dirigió con su mirada hacia mí. —¿Qué quieres, Jen?

—Tenemos que hablar.

—¿Hablar? —rio irónicamente. —vos y yo no tenemos nada de qué hablar.

Salió andando por el pasillo, y yo fui tras él. De verdad que cómo le gusta hacerse el interesante.

—claro que tenemos de qué hablar, y de mucho además. —hablé persiguiendole por el pasillo.

—No gracias, Jen. No quiero hablar de tu orgasmo con Pedrosa.

Auch golpe bajo.

—Oye, eso es un golpe bajo. —me miró levantando una ceja.

—Pues lo siento mucho.

—Lucas de verdad tengo que hablar contigo.

—Pero ahora yo, no quiero hablar contigo.

Otra vez iba a volver a seguir con su camino, pero entonces se me ocurrió como pararle.

Tomé su muñeca, le giré hacia mí y tomé su cuello para besarle, él parecía no esperarselo, pero tampoco puso mucha resistencia que digamos, por lo que luego de separarnos por falta de aire, hablé ante sus brillantes ojitos.

—Antes de que puedas decir nada o llamarme loca, te diré una cosa, tú y yo siempre vamos a ser tú y yo. No importa lo que pase, la situación en la que estemos o el país o ciudad donde estemos. Jen y Lucas siempre van a ser Jen y Lucas, lo era así en 2019 y lo es en 2023. Y puedes hacerte todo lo orgulloso que quieras, pero al fin y al cabo sé que acabaremos en el altar mirándonos a los ojos y dándonos el sí quiero. Y me da igual lo que recorra ahora mismo esa cabecita de purasangre que tienes, sabes que yo te quiero y que tú a mí también

Luego dejé un suave beso en sus labios y me marché dándole la espalda. Había logrado calmar a la furia que llevaba dentro, y aunque no le miré apuesto que estaba sonriendo.

HOLAAAAA

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

HOLAAAAA

queremos a una Jenna en acción.

Perdón por desaparecer taaanto tiempo, pero ya estoy de vuelta para quedarme. 

Corazón Que Miente -Lucas OcamposDonde viven las historias. Descúbrelo ahora