Clandestino: La Verdadera Historia Ninja | Hashimada, Tobiizu, Narusasu, Shiita+

Capítulo 19

El sol iluminaba a través de los árboles, el viento soplaba con tanta sutileza, que parecían ser caricias, acompañadas de una bella melodía que regalaba la naturaleza, sin embargo, ese espectáculo parecía pasar por alto para un par de chicos enamorados, quienes, no podían mirar nada más, que no fuera el uno al otro.

El nerviosismo se sentía en las vacilantes manos de Sasuke, y en la inestable respiración de Naruto, sin embargo, también se podía sentir un hermoso sentimiento, uno mutuo e intenso, el cual se podía incluso escuchar, por el cómo sus corazones se sincronizaron.

Naruto se acercaba lentamente al rostro de Sasuke, quien se aferraba a sus hombros con timidez, esperando por él, tratando de controlar su ansioso ser.

Sus corazones latían al unísono, llamando el nombre del otro, ansiando por que el tiempo juntos fuera infinito, y la distancia fuera nula.

Ambos chicos cerraron los ojos, ladeando levemente la cabeza, sintiendo la respiración del otro en los labios, provocando que su emoción los hiciera temblar, sin embargo, estaban decididos, lo deseaban con la misma intensidad.

- Sasuke... - Susurró el mayor, abriendo un momento los ojos, solo para encontrarse con la imagen más bella de su vida.

Sasuke entreabría los labios, y tenía la respiración agitada; sus mejillas estaban sonrojadas, y sus manos temblaban, sin dejar de aferrarse a los hombros de ese chico rubio, quien ya había comenzado a jadear por lo bajo.

- Eres hermoso. - Halagó Naruto, acariciando las mejillas de Sasuke, quien sollozó, apretando los parpados, acercandose aún más al rubio por inercia.

Sasuke no entendía porqué su cuerpo actuaba por cuenta propia; era como si siguiera una especie de instinto.

~ ¿Qué esperas?... - Preguntó Sasuke en su pensamiento, disfrutando de las caricias y halagos del rubio, pero impaciente por ese beso.

~ No hay problema si me acerco más... ¿Verdad?... - Se preguntó Naruto, a penas rozando los labios de Sasuke con los suyos.

Ese simple roce bastó para encender toda una cadena de emociones, la cual recorrió el cuerpo de ambos en un segundo, haciéndolos suspirar, en señal de gozo.

- ¡Naruto!... ¿Sasuke?... - Regañó una voz no muy lejos, quien parecía atónito por esa romántica escena.

Ambos chicos se separaron de un saltito, tratando de aparentar que nada había pasado, y que no habían estado a punto de besarse, sin embargo, al notar la mirada de esa persona sobre ellos, supieron que no podrían mentir.

- Profesor Iruka... - Llamaron al unísono, totalmente apenados.

- Saben que está prohíbo que se alejen de la academia. - Explicó, ya más tranquilo, colocandose enmedio de esos dos, como obligándonos a mantener distancia.

~ Qué mala suerte... - Se dijo Sasuke, dejándose guiar por su maestro de vuelta.

- ¿En qué estaban pensando?... - Regañó después de un rato, con ese tono suave que lo caracterizaba.

Naruto y Sasuke estuvieron por sonrojarse debido a esa pregunta, sin embargo, el mayor continuó rápido, impidiéndoles pensar en sí quiera encogerse de hombros.

- ¿Qué hubiera pasado si no llego, ah?... - Preguntó indignado. - Menos mal tienen compañeros de clase responsables; Dos de ellos me avisaron que habían venido tan lejos. - Explicó, mientras continuaba su camino, escoltando a ese par.

~ Sai y Neji... debieron ser ellos. - Pensó Sasuke, rodando los ojos con dicimulo, manteniendo la compostura al volver al área de prácticas.

- Ah, Iruka, gracias por hacerte cargo de mis alumnos... - Saludó Kakashi, cerrando su libro al mirarlos acercarse.