Clandestino: La Verdadera Historia Ninja | Hashimada, Tobiizu, Narusasu, Shiita+

Capítulo 3

~ El sol se está ocultando... y Sasuke aún no ha llegado. - Pensó itachi mientras terminaba de preparar la cena, no podía dejar de pensar en su hermanito, y en lo triste que había estado todos esos días.

~ Naruto, fue a verte, ¿No es así?... te lo encargo. - Pensó, mirando por la ventana, suspirando.

Itachi sabía que Sasuke había salido tan apresurado y molesto debido a Naruto, sin embargo, también sabía que el rubio no era una mala influencia, y menos después de tratarlo; pudo notar que su mente también le pertenecía a Sasuke, suspirando aliviado, alegrandose al saber que alguien aparte de él mismo había entregado sus sentimientos para Sasuke.

- Yo... siempre te admiré, Itachi-san - Confesó Izuna con un tono rosado en sus mejillas, sacando al mayor de sus pensamientos.

Itachi se aclararó la garganta con disimulo, recordando al fin que había accedido a que Izuna le hiciese unas preguntas, suspirando un poco apenado por no haberlo escuchado, girando para poder mirarlo a lo ojos, notando qué ocultaba su timidez con un rostro indiferente.

- Lo siento, Izuna-kun, ¿Podrías repetir tu pregunta?, No la entendí del todo. - Explicó cálido, a lo que Izuna bufó un tanto molesto, continuando con cierta altivez.

- Oh, no lo digo por ofender... realmente me gustaría saber el porqué, siendo el genio de los Uchiha, dejaste tu puesto en Ambu para... hacer esto. - Lo miró disimuladamente de arriba a abajo, sin comprender por qué había elegido dejar el uniforme de Ambu, y sus armas, para cambiarlo por un delantal, y cacharros de cocina.

Itachi analizó un segundo su pregunta, haciendo una leve sonrisa para por fin contestar.

- ¿Te sientes decepcionado de mi, Izuna-kun? - Preguntó, sin borrar su pequeña sonrisa.

- No, Itachi-san, nada de eso, solo que... Ser Ambu es a lo que todo ninja aspira para ser el mejor, y tú... gracias a tu talento lo conseguiste en un segundo, pero... lo dejaste todo por cuidar de Sasuke, y Shisui-san... no lo entiendo. - Izuna parecía frustrado, a lo que Itachi echó una pequeña risa, continuando con su característico tono de voz suave.

- ¿Quieres ser Ambu, Izuna-kun?. - Preguntó, volviendo a revisar la comida, probado un poco para poder condimentarla.

- Yo... bueno, sí, ¿Quién no?... es el rango más alto antes del Hokage, pero... esa no era mi pregunta, Itachi-san. – frunció levemente el ceño esperando a que el mayor de diera respuestas.

- ¿Porqué renuncié a Ambu? - Reiteró la pregunta, suspirando por lo bajo, continuando en la cocina, revolviendo ese guiso delicioso mientras parecía recordar.

~ ¿En serio está escuchandome?. – Se preguntó Izuna, notando que Itachi lucía un tanto disperso.

- Ambu... se encarga de la seguridad especial, y están bajo las órdenes directas del Hokage. - Explicó, girando hacia el menor, quien frunció el ceño.

- Sí... se lo que es ser Ambu. - Izuna se cruzó de brazos, sin embargo, dejó su mal semblante un momento, ya que Itachi le dió a probar lo que cocinaba, dejándolo tranquilo un rato.

Itachi estaba inmerso en sus recuerdos, sonriendo con la mirada, provocando aún más curiosidad en Izuna.

- ¿Itachi-San? - Preguntó, ladeando la cabeza.

El mayor parecía sumergirse en sus pensamientos; su semblante lucía imperturbable, tranquilo y sereno, tanto que Izuna decidió guardar silencio, y esperar hasta que decidiera hablar.

~ Qué manera de hacerme enojar. - Pensó Izuna, antes de que Itachi se acercase de nuevo, continuando con un tono dulce.

- Yo adoro vivir aquí, los lideres lograron la paz en muy poco tiempo, y eso me tranquilizó. - Explicaba, a lo que Izuna lo miraba atento.