Capítulo 13

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Pasos apresurados inundaban los pasillos de ese recinto. Gotas de sudor ya caían por el rostro de ese hombre cansado, quien buscaba desesperadamente a su amado.

- ¿Dónde estás?... No me preocupes de esta manera... - Suplicó, con la respiración agitada, sintiendo como el nerviosismo se apoderaba de su cuerpo. - ¿Dónde estás?... no me hagas ésto. - Sollozó, abriendo varias puertas, sin encontrar rastro de ese a quien buscaba.

Pronto, ese hombre cansado llegó al final del pasillo, aún sin encontrar respuestas, sintiendo su corazón contraerse.

- Hiruzen. - Llamó Danzo, entrando sin avisar a la oficina del nombrado.

- ¿Y a ti que te pasa?... ¿Porqué estás todo sudado?. - Preguntó el nombrado, levantando una ceja, como confundido.

- ¿Has visto a Kagami?. - Preguntó Danzo, totalmente preocupado.

Hiruzen lo miró un momento, apretando lo labios en señal de molestia sin notarlo, fingiendo serenidad al instante.

- No lo he visto desde anoche. - Explicó, volviendo su mirada a los pergaminos que tenía enfrente.

- Pero sabes algo... por favor, dime dónde está. - Pidió, adentrándose en la oficina de su compañero sin permiso, a lo que este exhaló como cansado.

- No se nada, Danzo. ¿Porqué-

- Ayer te vi salir de su oficina... ¿Qué hacías allá?. - Preguntó, ya con cierta molestia.

- Eso era lo único que querías saber, ¿No es así?. - Preguntó Hiruzen, desinteresado, continuando sin mirar a su compañero.

- No tenías nada que hacer allá, se muy bien que siempre lo estas molestando. - Exclamó Furioso, golpeando el escrito de Hiruzen, a lo que este levantó la mirada, como cansado. - Ayer se fué molesto, y tú fuiste a la última persona a la que vió.- Explicó, echándole una mirada de odio, sin embargo, Hiruzen permaneció sereno.

- ¿A caso crees que lo estuve acosando?... ¿Por quién me tomas?, solo le fuí a desear buenas noches, y me ofrecí para acompañarlo hasta su casa. - Explicó, con una malévola sonrisa. - No me mires así, como siempre, él se negó, y-.

- Estuviste molestandolo... lo sabía... - Interrumpió, mirándolo fijamente. - Si Kagami cambió su base a otro lado por culpa tuya, no te perdonaré jamás. - Amenazó, a lo que Hiruzen echó una risa sarcástica.

- Kagami no se irá a ningún lado, Danzo, y, si ayer se fué molesto, no fué culpa mía; Fué porque su amado "Tobi-san" salió temprano y no pudo verlo. - Explicó el castaño, con cierto tono burlón.

- Si Kagami se va-.

- Kagami no se irá a ningún lado. - Interrumpió, rodando los ojos en señal de hartazgo. - Sueñas con que se aleje de Tobirama pero, ni tu acoso, ni el mío, ni el de nadie lo hará irse de aquí. - Explicó, volviendo su mirada a los pergaminos que tenía en las manos.

- Eres un sin vergüenza, acabas de admitir que lo acosas. Si te llevo ahora mismo con Tobirama-

- Al menos yo le digo mis intenciones de frente, eso no es acoso, solo le doy a saber lo que siento por él, algo que un verdadero acosador como tú no podría hacer jamás. - Explicó, levantandose de su asiento para estar a la altura de Danzo.

- Yo no lo acoso. - Replicó el pelinegro, apretando los puños como preparándose para pelear. - Yo... solo le llevo el desayuno, le ayudo en sus deberes cuando puedo, y-

- Y, le robas sus pertenencias, además de que lo has espiado en las duchas. - Explicó Hiruzen, mirándolo como amenazando.

Danzo sintió como si le robaran el aliento, nunca imaginó que alguien supiera acerca de sus malas conductas.

Clandestino: La Verdadera Historia Ninja | Hashimada, Tobiizu, Narusasu, Shiita+Donde viven las historias. Descúbrelo ahora