Lejos de la civilización, en una ubicación segura, Magneto estaba sentado en un trono viendo su casco fijamente hasta que entró aquel hombre que lo ayudó a volver: Tomura Shigaraki.
— Me sorprende que haya logrado una demostración como esa desde tan lejos — dijo Shigaraki tras ver la transmisión de Washington.
— Solo porque haya sido lobotomizado por mi viejo amigo, no significa que haya perdido mi poder — contestó Magneto con frialdad —. ¿Te has contactado con el equipo de Mystique en Europa?
— Sí y lograron completar el ataque al palacio de Versalles y la basílica de San Pedro dejando la evidencia que usted ordenó — Shigaraki miró fijamente a Magneto y entonces le preguntó algo que le daba mucha curiosidad —. ¿Por qué decidió atacar esos objetivos en específico? Estratégicamente, no tienen valor alguno.
— Los humanos tienden a representar su valor por personas que lograron grandes cosas en nombre de dios o cualquier ideología que, según ellos, represente sus valores de turno — explicó Magneto levantando la vista hacia el hombre frente a él —. No somos solo la evolución de la raza humana, somos su reemplazo y no podemos avanzar sin dejar ese mensaje grabado en la mente de cada Homo sapiens sobre la faz de este planeta y eso no pude completar en mi anterior intento. Muchos dicen que solo somos niños jugando a ser dioses, pero realmente somos hombres y mujeres que decidimos ser superiores.
Ante la respuesta del amo del magnetismo, Shigaraki sonrió como si fuera un loco.
— Mutante y orgulloso — dijo el demente.
Mientras tanto, en la mansión de los X-men, todos estaban en la entrada viendo atravez de la puerta y las ventanas la llegada de Thor quien veía fijamente a Wolverine.
— ¡¿Qué quieres?! — gritó Logan mientras relámpagos caían alrededor de la mansión.
— ¿Puedo pasar? — preguntó Thor tranquilamente y sacó una botella que llevaba en su espalda, además de que los rayos cesaron — Tengo hidromiel.
— No seré buena compañía — contestó Logan quien ya había sacado sus garras.
— Eh — decía Thor como si hubiera escuchado una tontería —. Seguro tendremos mucho de qué hablar.
Ante la respuesta del dios pelirrojo, Logan le hizo una seña y este entró a la mansión mostrándose muy calmado. La gran altura y corpulencia de Thor contrastaba con Logan que era bastante pequeño e intimidaba mucho a los jóvenes héroes.
— Qué lindo lugar — comentó Thor.
Todos juntos fueron al comedor principal donde Thor dejó su martillo y la botella de hidromiel en la mesa y Logan se sentó frente a él sin dejar de verlo fijamente.
Bobby trajo un par de vasos en los que sirvió el hidromiel y cuando le estaba por dar uno a los chicos, Logan detuvo su mano y regresó el vaso a la mesa.
— Pudiste decírmelo antes de que lo sirviera — dijo Thor tomando uno de los vasos.
— ¿Por qué estás aquí? — cuestionó Logan.
Thor tomó otro vaso, lo acercó a su rostro, pero en vez de beber, solo olió la bebida mostrando cierta tristeza.
— Solo intento ser amable — contestó el dios.
Los chicos no entendían lo que pasaba y las respuestas de Thor solo los dejaban con intriga. Lo más extraño fue cuando él untó sus dedos con el hidromiel y lo esparció en su martillo.
— Pareces una persona tranquila y sensata — comentó Thor —. ¿Eres una persona tranquila y sensata?
— Cuando el momento lo amerita.
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Marvel Genesis
FanfictionAlgunos héroes como Iron Man o el Capitán América son amados por todos, pero los mutantes son repudiados por el mundo que juraron proteger. Nuestro protagonista fue discriminado por esto mismo, pero bajo la guía del héroe número uno (All Might) y el...