~ 𝔼𝕟𝕒𝕞𝕠́𝕣𝕒𝕥𝕖 𝕕𝕖 𝕞𝕚 ~

Capítulo 2

Narra Kotaro:

Hoy era un día soleado, después de ayer que parecía que la lluvia inundaba las calles, ¿Irónico no?. Me encontraba de camino a la Academia junto con mi hermana y sus amigas, Katarina y Aiko.

Ellas hablaban de cosas de chicas, ya saben, que chicos les gustan, que harían el fin de semana, que ropa estaba de moda, de que color se querían pintar las uñas. Cosas de chicas.

Cuando llegamos a la Academia ellas tomaron rumbo a la biblioteca y yo iba a hacer la misma rutina de ayer, ir a mi asiento a recostarme y dormir un rato. Cuando entre me encontre con Kotaro. Se me hace un poco raro llamarlo así sabiendo que yo me llamó de la misma manera, le buscaré un apodo.

—Hola Kotaro—Me saludo buscando algo en su bolso—Ten, muchas gracias por prestarmela—Me estaba devolviendo el paraguas de ayer.

—De nada!, somos amigos, y para eso estamos, no? —Dije sonriendo, pero el se veía algo confundido.

—¿Amigos?...

—Si, ¿Te molesta?.

—Ah... ¡No!, si no que... Nunca antes había tenido un amigo... —Me dijo con una ligera sonrisa en su rostro.

Sentí que el calor se subió a mi cara. Le devolví la sonrisa y me senté al frente de el, estuve pensando y es mejor que le deje mi asiento.

—Y dime Kotaro, ¿Quienes son tus padres? —Me pregunto intrigado, yo solo me voltee para responderle.

—Mis padres son dos hombres, Shin Higaku y Umeji Kizuguchi, puedes adivinar que soy adoptado—Le sonreí y el quedo sorprendido.

—Entonces eres hermano de Beniko Higaku—Me dijo intrigado.

—Sip, ella es mi hermana menor, y que hay de tus padres? —Pregunte para no dejar morir el tema de conversación.

—Me imagino que habras escuchado de mi papá, Megamo Saikou, pero casi nadie sabe quién es mi mamá, es Ayano Aishi—Me dijo mientras me veía a los ojos. Esos ojos de color gris combinaban tan bien con su cabello negro y su piel pálida.

—Vaya, de seguro mis padres tienen que conocerlos, ellos estudiaron aquí, y me imagino que los tuyos también—Dije mirando sus manos, que estaban tapadas por unos guantes negros.

—Si, mi papá era el líder del Consejo estudiantil, y dijo que se enamoró de ella por ser tan problemática—Sonrió como si hubiese recordado algo—Ellos dicen que tal vez me llegue a enamorar de una chica problemática por ser igual que mi papá—Su sonrisa no se iba, me reí un poco y volvi a mirar sus manos.

—¿Por que usas guantes? —Pregunte curioso.

—Ah, eso, pues... —Se veía algo incómodo—Bueno, te lo enseñare por ser mi único amigo—El se quitó los guantes y dejó ver sus manos con algunas quemaduras—Me pasó cuando era pequeño, fuí de campamento con mis padres y mi tía y primos, yo no me llevaba bien con ellos pero nos pusimos a jugar, y yo le gane a una prima. Entonces ella me empujó y yo caí cerca de la fogata, mi camiseta se incendió y se propagó hacia mis brazos y manos... Después de eso me llevaron al hospital y quede con quemaduras en todo mi torso, brazos y manos. Y uso los guantes para esconderlas, por que ahora están feas... —Dijo como si estuviera a punto de llorar. Yo tome sus manos y empece a acariciarlas, sintiendo aquellas cicatrices por las quemaduras.

—Yo no las veo feas, a pesar de tener quemaduras son muy suaves... No se como unos niños fueron capaces de hacerte esto siendo tan lindo—El enseguida se sonrojo, y yo termine de procesar la estupidez que había dicho.

—¿Soy lindo para ti? —Se veía muy tierno con sus mejillas Rojas, pero debía inventar una excusa rápido.

—¡Si!, P-pero lo digo de manera amistosa!, E-eres lindo pero como cumplido de amigo a otro amigo, sabes? —Dije sonando nervioso.

Estúpido, ahora se dará de cuenta que lo dijiste con otra intención.

—Si, si, entiendo—Me dijo bajando la mirada mientras se ponía sus guantes otra vez.

—Oye, una pregunta... —En realidad, no quería terminar la conversación con el—¿Puedo llamarte Ash? , ya sabes, por que tenemos el mismo nombre, y como tu apellido es Aishi pues de ahí lo saque, puedo? —Dije intentando haber como si el tema anterior nunca existió.

—¿Y si yo puedo llamarte Gaku?, al igual manera por tu apellido—El lo pensó un poco y se retractó de sus palabras—Esta bien, puedes llamarme Ash, total, no me gusta mucho mi nombre, creo que te luce mejor a ti—Me dijo viendo por la ventana. Yo sonreí entusiasmado .

—¿Que haras después del colegio Ash? —El me miro pensativo.

—Nada...

—¡Entonces vayamos a por un helado!.

—Por mi... Esta bien.

Espero que les haya gustado el capítulo de hoy💓.

¡Que viva el Ayano x Megamo!.