~ 𝔼𝕟𝕒𝕞𝕠́𝕣𝕒𝕥𝕖 𝕕𝕖 𝕞𝕚 ~

Capítulo 30

Narra Kotaro:

Ya había pasado un buen tiempo desde que pasó aquel accidente, ya puedo caminar mejor y me siento mejor, me encontraba en el comedor desayunando junto con mis padres.

El timbre había sonado, mi papá Shin se levantó de la mesa dejando su comida intacta, mientras iba a abrir la puerta.

El no ha comido bien desde que mi hermana Beniko se escapó...

—¡Hija!, ¡¿Donde estabas?!, ¡¿Por que te fuiste?! —Los gritos emocionados de mi papá Shin se escucharon hasta en el comedor.

Mi papá Umeji y yo salimos del comedor hacia la puerta para ver qué pasaba, y nos encontramos con Beniko!... Pero ella....

Tenía un ojo morado y el labio partido, además de que tenía varios moretones repartidos en su cara.

—¡Beniko!, ¡¿Que te pasó?! —Dije mientras me acercaba a ella y la ayudaba a pasar.

—Y-yo... —Ella no quería hablar, así que la lleve a la sala para que se sintiera más cómoda.

—Dime, ¿Que te paso?,¿Quien te hizo eso? —Papá Umeji se sentó al lado de Beniko y la agarro de la mano.

—Yo... Conocí a un chico por Internet... El dijo que me amaba y quería vivir conmigo, y decidí que ambos debíamos escaparnos para ser felices... Porque sabía que ustedes no lo iban a aceptar... Después de un tiempo viviendo juntos me trato muy mal... Y ayer me golpeo... —Dijo mientras unas lágrimas salían de sus ojos.

—¿Quien es ese chico?, Las va a pagar muy caro por tocarte... Pero no creas que tu no te salvas, después hablaremos sobre este asunto... —Dijo papá Umeji mientras veía a mi hermana con algo de enojo.

—Si papá... Ahora quiero dormir... —Dijo mientras bajaba su mirada.

—Ven Beniko, yo te llevaré a tu habitación... Kotaro debe ir a la Academia y se le hará tarde—Dijo mi papá Shin, ahí entre en razón.

Tome mis cosas y mi papá me llevo en el auto, aunque la Academia quedaba muy cerca el no quería que tuviera un accidente, y más cuando no podía correr mucho por mi pierna lesionada.

Una vez que llegamos me despedí y baje del auto, ahí en la entrada estaba Ash esperandome... Camine rápido hacia el y lo abrace, dejando un beso en sus labios.

El correspondió felizmente y cuando nos separamos, nos agarramos de las manos y nos fuimos así hasta el Salón. Ya ahí nos sentamos en nuestros asientos correspondientes y nos quedamos hablando un rato.

—¡Kotaro! —Al salón había entrado Daiki,Yuzuro, Keiya y Satoru.

—¡Hola chicos! —Dije mientras me volteaba a verlos.

—¡Kotaro tonto!, por que no nos dijiste que estabas en el hospital! —Keiya me dio un golpe en el brazo.

—¡Si debiste decirnos! —Dijo Yuzuru mientras me daba otro golpe.

—Tranquilos chicos, fui cuidado por el mejor... —Dije volteandome, encontrándome con la mirada avergonzada de Ash.

Me acerque a el y deje un beso en sus labios.

—¡Nuestro querido Kotaro ya encontró el amor! —Dijo Daiki mientras nos veía asombrado.

—Si, el es Ash, mi novio... —Dije dejando otro beso en su mejilla.

—Bueno chicos, es mejor que los dejemos solos, ya vámonos! —Yuzuru empujó a los demás sacándolo del Salón.

—Tus amigos son algo escandalosos—Dijo Ash mientras agarraba mi mano.

—Ellos son así, total, no les hagas caso—Dije mientras apretaba sus manos.

—Compre entradas para ir a ver una película—Dijo cambiando el tema—Es a las 7 de la noche, podemos ir a verla? —Dijo mientras ponía unos ojos de cachorrito, era imposible resistirme!.

—¡Claro!, ¿Nos vemos en el cine?

—Si, nos vemos en el cine...
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Ya estábamos los dos en el cine. La película que se iban a dar era de amor, y digo, a lo mejor a Ash le gustan este tipo de películas.

Nos sentamos y nos quedamos esperando a que empezará la película. Nos quedamos un raro dándonos algunos mimos mientras esperábamos.

Cuando empezó Ash se veía totalmente emocionado por verla, así que solo agarre su mano y empezamos a verla.

Después de más de una hora, terminó la película, era muy buena. Invite a Ash a comer una pizza o lo que el quisiera y el se decidió por la pizza.

Ya se habían hecho las 10 de la noche, le dije a Ash que se quedará a dormir a mi casa y el aceptó, ambos fuimos a mi casa y lo lleve a mi cuarto.

El tomo un baño y le preste algo de mi ropa, la camisa le quedaba súper grande y el pantalón de pijama por suerte le quedaba bien. Después me bañé y me puse mi pijama favorita.

Ambos ya estábamos acostados, Ash enredaba sus piernas con las mías y me abrazaba, tenerlo tan cerca de esta manera... Me hace enloquecer...

—Ash... Todos están dormidos... Que tal si?...