=͟͟͞͞🏴 "¡Pulga! ¿¡Que haces chapandote a la inglesa!?"
.・゜゜・Los ingleses eran el odio de los argentinos, pero la mayoría de ingleses amaban a Leo Messi. Con un hermano messilover, no hace falta tanto para que la Bambi se vuelva una mess...
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Paul Tillich una vez dijo "El primer deber del amor es escuchar". Y una vez, la Bambi adolescente escuchó aquella frase en su clase de literatura, recuerda haberla olvidado e ignorado por andar interesada en sus uñas bien pintadas, hubiera prestado atención a la clase de literatura que parecía acertar con ciertos detalles de su vida adulta.
Porque ahí estaba ella, su madre analizaba su departamento como si buscara todos los detalles de este, y como si la presencia de su hija en frente fuera menos que el estado del departamento.
Bambi suspiro, hace un rato que había entrado a su departamento, Micaela no estaba y el mensaje de "estoy de joda, regresó en un rato" fue suficiente. Entendía también que Joshua tampoco vendría, literalmente estaba sola y nadie podía aparecer de imprevisto para salvarla de esta crisis que le daba estar con su mamá.
━ Gracias, querida ━ su mamá tomó un poco del té de manzanilla ━ Que raro es el té aquí ━ confesó tras probar un poco.
━ Si, lo se ━ suspiro intentando calmar sus nervios ━ ¿Para que viniste, mamá?
La progenitora la miró con una ceja alzada. Bambi siempre vio a su madre como el ejemplo de la elegancia y el poder, el segundo nombre de su madre era Elina Styles (si, el mismo que el de Bambi), recuerda cómo su madre empezó a usar más su segundo nombre "porque quedaba mejor a su edad", eso había sido hace un año como mucho, así que Bambi había aprendido a llamarla por su segundo nombre. Elina Styles tenía el poder de someterte a su poder, era una mujer poderosa y elegante. Su cabello rubio, su melena perfectamente peinada y alisada para no mostrar los rulos naturales. Su ropa no era extravagante, era de diseños clásicos pero de marcas reconocidas, mientras tu remera simple valía 500 pesos capaz el de Elina valía el cuádruple. Sus uñas perfectamente hechas con una francesitas blancas, y ese anillo de oro en su dedo (el famoso anillo de compromiso) y las pulseras pequeñas pero que costaban un ojo de la cara. El rostro de su madre era perfecto, tenía un cuidado en la piel muy marcado, sus labios siempre hidratados, sus cejas depiladas a la perfección y sus ojos con las pestañas arqueadas, y unas sombras para que no se notarán las arrugas de su rostro.
━ Toda madre tiene derecho a ver a su hija ━ la sonrisa que surco de sus labios le provocó desconfianza ━ He visto de lo que fue tu vida, querida.
━ ¿Y ahora es que vienés? ━ la brusquedad en su voz fue instantánea, impulsiva y real.
━ Tengo cosas que hacer ━ le dolió, obvio que había algo mejor que ella ━ Tu padre no para de trabajar, yo también y no podemos darnos esos lujos de descanso. Hemos querido hablar con ustedes, contigo, pero no nos dan los tiempos.
━ Joshua está bien, gracias ━ ignoró sus vagas justificaciones, era mejor dejarlo pasar que sobrepensar al respecto.
━ Lo se, se le ve cómodo. No sabía que vino a Argentina ━ agarró su taza ━ ¿Como son los originarios de aquí?
