Κοίτα με Άλφα |Mírame Alfa|

En el fondo, eres un manipulador... eres un alfa.

(Salto de 6 meses)
Se ha dicho un par de veces que para poder ver todo el panorama es mejor hacerlo desde una perspectiva diferente, como un observador de todo un gran escenario y no un actor de la obra.

Leopold aún no estaba acostumbrado a las visitas de Erica, sobre todo que apareciera de sorpresa y sin avisar, invitándose sola y creyéndose la dueña de casa. Aunque era algo que estaba asimilado en su vida, el problema era cuando estaba ocupado y ella no lo dejaba centrarse en sus deberes, ya sea terminar su trabajo o interrumpir algún plan de salida.

─Creo que todos ustedes son iguales, hacen y deshacen a su antojo, fingen ser criaturas compresivas pero al final son los que siempre tienen la ultima palabra. 

Butters hizo un gesto de no comprender a que se refería, de hecho, llevaba ya unos 40 minutos intentando terminar de corregir unos exámenes para pasar a preparar las lecciones de la próxima semana, cosa que ya consideraba imposible por culpa de la omega deprimida que tenía sentada frente a él.

─Recuerdo que tenías varias botellas de vino─. Mencionó Erica de forma casual. 

─Eran solo dos.

─Bueno, bueno, no importa ¿no te los has bebido, verdad?

─No suelo tomar licor en casa.

─.... ah, entonces ¿no puedes ser mi amigo de copas por una hora?

Finalmente agotado de no poder corregir la misma hoja de examen, se rindió, apartó todo todas las carpetas, cuadernos y extras -para no mancharlos- y se centró en su amiga.

─¿Que te pasa? ¿Extrañas a ese alfa con el que estás viéndote?

Erica dibujó el circulo de la orilla del vaso con refresco, hizo ese gesto un par de veces, parecía estar pensando seriamente en que responder.

─¿Ya te ha marcado?

─Si.

Leopold sufrió un sobresalto, sus manos se volvieron puños y sus pupilas se encogieron.

─Ya lo sospechabas ¿verdad?, no es que te mintiera por alguna razón especifica, realmente pensé que esto no duraría.

─..... Va casi un año Erica, sé que has estado con el mismo desde que regresaste.

─Ummm, me pregunto.... no, realmente no lo entiendo─. Agitó su cabeza bruscamente, ya sea por negar o por intentar deshacerse de alguna idea que se le cruzó por la cabeza. ─Siempre logra que seda ante él. Todos ustedes son unos manipuladores de cuidado.

Butters se sacó las gafas para luego apretar levemente el puente de su nariz.

─No recuerdo haberte manipulado desde que te conozco─. Frunciendo el seño mientras la miraba acusadoramente. ─Tu eras la que "llevaba la correa" en "nuestra relación".

La omega se cruzó de brazos y se giró, haciendo pucheros con la boca, luego miró el perchero al lado de la entrada, como ese día era entre semanas, no se encontraba la típica chamarra del omega intruso. 

─¿Cuando me contarás tu historia con el PEQUEÑO omega?

Ver la cara de enojo y repudio del alfa era gratificante.
Llevaba más de dos meses evitando referirse al mocoso rubio como pequeño o cachorro, ella pudo ver claramente a través del él. 

─Solo estoy apoyándolo moralmente.

─¿Eso incluía cederle MI habitación y criarlo?

─Las cosas se terminaron dando así, no es como si lo hubiese traído por que fuera mi intención.