Κοίτα με Άλφα |Mírame Alfa|

Manzana.

Butters dejó escapar un bostezo mientras se cubría la boca con la mano que tenía libre, su aspecto era algo lamentable, casi recostado sobre la mesa, soportando el peso de su cabeza sobre una de sus manos y con ojitos tan chinitos que intentaban no cerrarse.

-Parece que no tuviste una buena noche ¿Me vas a contar que pasó ahora, Butters?

-El niño comenzó a trabajar con los Tweak.

-¿El niño? ¡Oh! ¿Te refieres al hermano de Karen?

Butters asintió con la cabeza.

-¿Eso que tienen que ver con que estés tan cansado?

Charlotte observó como su colega sacaba su barbijo del bolsillo de su chaqueta e inmediatamente le untaba de ese raro perfume para bloquear feromonas, últimamente lo solía hacer muy seguido.

-¡Por cierto! ¿Ya te ha contactado Broflovski?

-No, él no se encarga de este tipo de tramite, la abogada a cargo es Testaburgue-. Señaló Butters.

-¿Entonces por que estaba contactando contigo tan seguido?

-Es por el divorcio.

-Ah....

-Kyle aún no a logrado tener una reunión de reconcilian con Turner y Cartman-. Con una relativa pereza se acomodó el barbijo en su cara por debajo del mentón. -Como yo conozco a Erica me pidió que intentara convencerla para asistir este viernes.

-¿Lo hiciste?

-No.

-Bueno, tampoco estás obligado.

Finalmente el sonido de la cafetera avisaba que el café ya estaba listo para tomar. El alfa se puso de pie inmediatamente y se hizo una taza bebiendo con calma del liquido negro. Luego de acostumbrarse al hirviente brebaje, dejó escapar un suspiro.

-¿Entonces? ¿Por qué estás tan cansado?

-¿Me puedes alcanzar una manzana?

Charlotte parpadeó confundida, miró hacia donde apuntando el dedo del rubio, una bolsa de papel sobre la mesa, en su interior habían 5 manzanas de un aspecto bastante suculento. Le lanzó una a Butters, quien la atajó sin problemas para inmediatamente darle un buen mordico con bastante fuerza, casi como si fuera un muerto de hambre, llegando incluso a salpicar un poco.

Charlotte le acercó una servilleta de papel y de paso aprovechó para servirse su propia taza de café.

-Deja de evadirme y responde.

-No lo sé.

-Por favor Leopold ¿Te dormiste tarde?

-Si.

-¿Por qué?

Butters colocó su ya vacía taza sobre la mesada, tiró el corazón de la manzana y luego se cruzó de brazos.

-Algo no está bien conmigo.

-¿Que cosa?

-No estoy seguro.

-Bueno, intentemos descubrirlo.

-Charlotte, no lo sé, simplemente no lo sé.

-Tsk, que complicado eres, piensa un poco ¿cuando sentiste que algo no estaba bien?

El alfa miró hacia un punto fijo de la sala de maestro, luego pasó su vista a través del cristal de la ventana, al exterior podía ver a los alumnos en su receso de 20 minutos, entre ellos notó los dos moñitos de un pelo castaño claro. Su dedo indice comenzó a golpear consecutivamente sobre su brazo, Charlotte podía notar su máxima concentración en Karen McCormick.