𝗕𝗮𝗱 𝗟𝗼𝘃𝗲 𝗧/𝟮; Tom and Bill Kaulitz

𝐄𝐱𝐭𝐫𝐚| 𝙷𝚊𝚌𝚒́𝚊 𝙲𝚊𝚕𝚒𝚏𝚘𝚛𝚗𝚒𝚊

By Tom K.—

Después de aquella boda terminé por retirarme a la mitad. A decir verdad estaba feliz por ella, por él, pero no me sentía de esa forma

Manejaba rumbo al último lugar que me gustaba estar, pronto me iría de Hamburgo, nadie sabía de esto más que Amalia y eso fue porque me descubrió hablando con Viry sobre un vuelo a Estados Unidos - California. Mi mente estaba cansada al igual que mi corazón. Escuchaba la radio y no tardó en sonar Automátic. Sonreí, sin darme cuenta su letra era perfecta para mí, saqué un cigarrillo del tablero de mi auto, y está vez no dije que sería el último porque sabía que no iba a ser de esa forma, apreté los labios al recordar que Liesel no le gustaba que yo fumara, según ella lastimaba el cuerpo. Es estúpido, ella terminó por lastimarme el corazón

Pero ya no me sentía roto, sentí como mi corazón me susurraba: no llores, no tiembles, recuerda que ya pasamos por esto

—Maldita mierda—Susurre dentro del auto

Inhale el cigarrillo , era de noche y el aire de la carretera despejada era perfecta, me había atado el pelo para que no me estorbará a la hora de manejar. ¡Joder bendita noche!

Tenía el corazón roto pero no podía sentirme así, más bien me sentía vacío, no podía sentirme triste, ni siquiera enojo por haberme rendido, no fui yo quien lo hizo, fue mi torpe corazón. ¡JODER!¡JODER!

—Mi corazón fue el débil no yo—Susurré entre dientes mientras me veía por el espejo retrovisor—Cabron de mierda—Me maldije a mi mismo

Al ver cómo las lágrimas empezaron a caer por mi mejilla, rozaba por mis labios, eran saladas, estaba de la mierda, frene el auto en medio de la carretera y empecé a golpear con todas mis ganas el volante, no tenía la culpa pero era lo que estaba a mi alcance. Maldito corazón. Maldita mierda. Has perdido torpe corazón, deja de joderme y sal de mi pecho, acabaste con mi alma, terminaste por conseguir tu objetivo, abandona mi cuerpo y entra en cualquier otro estúpido que se deje utilizar como un títere, sal de mi pecho y déjame en paz, ya me has jodido

—¡AGGG!¡FUISTE TU EL DÉBIL NO YO!¡FUISTE TU EL QUÉ PERDISTE NO YO!—Me grite al verme en el espejo

Cualquiera que me viera a estás hora de la noche diría que era un loco, pero me daba igual, me sorbí la nariz, tome la palanca subiendo la velocidad y pise el acelerador, el auto avanzó con tanta velocidad, podía jurar que me sentía en una pista de carreras callejeras

—¡TOM KAULITZ JODETE!—

Grite como un perro rabioso, estaba apunto de llegar a la barranca, podía persivirlo, podía ver cómo al fondo ya no había carretera al menos que volteara el volante a la izquierda, pero joder yo iba directamente a ese lugar, acelere una vez. Sentía la puta adrenalina, veía como el fondo de la barranca estaba acercándose más a mi. Joder ¿Que pasa si no freno?¿Dejara de doler está mierda?. Sonreí de lado, estaba acercándome, estaba cerca del final de mi mal amor, las llantas rechinaron con la tierra seca y ¡BAMMM!

Frene al instante, las piedras y seguramente un poco de polvo cayeron al orificio de la barranca cuando frene justamente a la orilla, heche el auto hacia atrás y salí de inmediato, tome otro cigarro y me recargue sobre el capo de mi auto, joder la vista aquí era preciosa, podía verse la luna con claridad acompañada con estrellas pequeñas. El móvil empezó a sonarme era Gustav quien me llamaba

—Joder, Tom ¿Dónde estás? Hemos leído la carta—Escuche la voz molesta de mi amigo
—Esa carta debieron leerla cuando la fiesta debía terminar—
—Estuvimos buscándote como locos y Viry terminó por darnos aquel papel, ella no sabía lo que contenía—