𝟐𝟏| 𝙼𝚎𝚕𝚘𝚍𝚒́𝚊𝚜 𝙵𝚛𝚊𝚐𝚖𝚎𝚗𝚝𝚊𝚍𝚊𝚜

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Había llegado la hora del concierto. Tom no había vuelto buscar a Liesel después de esa noche, y no dejaba de recibir mensajes por parte de Amalia, y no era por ser grosero en realidad le había dolido tanto el corazón que ni siquiera tenía ganas de volver a sentir ese dolor, poco a poco podía sentirse seco como un nuez. Tom llegó al edificio de los camerinos con los ojos llenos de ojeras, y en cuanto abrió la puerta de su camerino se encontró con Amalia y Liesel, ambas estaban acomodando lo que necesitaría la mayor para esta noche de concierto

—¡TOM!—Gritó  Amalia con mucho entusiasmo y una sonrisa grande que dejaba ver sus dientes perfectos
—¿He llegado demasiado temprano?—Dijo tratando de evitar miradas con Liesel
—No, está es la hora correcta, todos están en el comedor—Contestó Liesel. Tom asintió levemente con la cabeza, luego miró por el pasillo con la intención de irse ya
—Bueno, entonces iré con ellos, las veré luego—
—¡Tom!...—Soltó Liesel

El volvió a girarse y la miró directamente a los ojos, pero enseguida volvió a desviarla al suelo cuando empezó a sentir una chispa que los ojos marrones provocan en el

—¿Podemos hablar?—
—¿Hablar?¿Ahora?—

En realidad no quería, tenía miedo de escuchar algo que pudiera lastimarlo, Amalia salió del camerino dejando al par de dos a solas

—¿Estás bien?¿Todo bien?—
—Si...todo bien—Contestó el
—No hemos podido hablar—
—Mejor dicho no has querido hablar—

Liesel se acercó a él, tomando de la mejilla para comprobar que tanta emoción y sentimientos sentía por él. Pero el dió un paso atrás

—Creo que Heidi no debe tardar en llegar, si eso es todo....te veré luego—Soltó en tono seco, tratando de ser firme, tratando de no ser débil por sus sentimientos, simplemente estaba cansado

Mi temor de seguir entregándome al amor cada vez se estaba haciendo más presente, claro que quería que me tocara, que me besara pero eso significaba volver a caer, volver y dejar que sus manos me manipulen a su antojo ¿Desde cuándo fue así? Yo era la que tenía el control de los sentimientos ¿Por qué ahora ella tiene ese poder?

Sin darme cuenta me enamore. Me enamore de ella perdidamente y jodidamente, un amor que simplemente va más allá de los límites, un amor ciego y necio, tanto que si ella me dijera que lo dejara todo, simplemente lo daría todo porque mi amor era tan grande. ¿Pero de qué servía que fuera tan grande? Si ella no lo notaba...

—Te noto distante...—
—¿No era lo que querías? siempre soy yo el que te busca, y sinceramente me estoy volviendo loco—
—Lo siento...yo.yo—
—¿Lo sientes?¿De verdad lo siento? O solo abres la boca por qué ¿Puedes?—
—Tom...—Musito Tom tratando de tomarlo del brazo

Pero el rodeo los ojos al mismo tiempo que se soltó de su agarre, el corazón también puede cansarse, el corazón también puede rendirse, el corazón pide a gritos que dejen de romperlo

—Estoy cansado Liesel ¿Por qué me haces esto?¿No sabes lo mucho que mi corazón te ama? Te quiero tanto que estoy permitiendo que me destruyas—
—Mi corazón también te ama—
—Tus labios dicen algo pero tus acciones dicen otra cosa, solo quiero que seas sincera, voy a entenderlo pero por favor dímelo, no puedes romperme más de lo que ya has hecho—

Lo sé, pero cómo podía demostrar que ¿De verdad lo amaba? No podía hacerle daño a una mujer, quería besarlo, y tocarlo pero ¿Cómo?¿Cómo podía hacerlo sin sentirme culpable por aquella mujer que esperaba ansiosamente su boda?

𝗕𝗮𝗱 𝗟𝗼𝘃𝗲 𝗧/𝟮; Tom and Bill KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora