LAW ||HENRY CAVILL||

Parte 28

"Alucinación"

LILI

Escuchaba la clase del señor Moor, creo que poco a poco estoy descubriendo que aunque me encanta el derecho no quisiera volver a ejercerlo, la idea de retirarme joven rondaba por mi cabeza aunque creo que a mi padre no le va agradar la idea

—¿Aburrida? – Dacre Montgomery me sacaba de mis pensamientos

—La verdad es que si – seguí haciendo garabatos en mi cuaderno

—Supongo que no tienes que recordar esto cuando se te volvió un don

—Bueno, quizá tienes razón pero la verdad es que no quisiera ejercer otra vez

—¿Por qué? - me miró extrañado

—Quiero descansar de eso, lo único que recuerdo es lo cansada que estaba en cada jornada, no me quiero volver a sentir así

—¿Entonces por qué estás aquí?

—Para sentir que hago algo con mi vida

—Si yo tuviera el tiempo y el dinero que tú tienes me iría a viajar por el mundo que estar en esta clase aburrida – me sonrió

—Es cierto pero no me gustaría viajar sola

—¿Con quien te gustaría ir?

Era un cuestionamiento confrontativo para mi

—No me digas el primer nombre que piensas si no el que sientas

A veces pienso que Dacre sería mejor psicólogo que abogado, desde que se volvió mi amigo y le conté todo lo que recuerdo no para de hacerme preguntas que ciertamente me ponen a cuestionar mi decisión de irme, dejando todo atrás, dejando a Henry atrás

Para mi suerte la clase había terminado haciéndonos salir del aula

—No me has contestado

Era inútil huir de él y sus cuestionamientos cuando su curiosidad se ve incrementada

—¿Me pides un café y un panqueque? – traté de cambiar el tema

Además Dacre habla mejor el italiano que yo, me fui a una mesa de la cafetería a esperarlo

—Henry – le respondí a su cuestionamiento cuando llegó a la mesa con dos cafés y dos panqueques

—Lo sabía – sonrió —. Deberías hablarle

—¿Y si ya tiene pareja?

Solo pensarlo se me revolvía el estómago, no podía pensar que alguien más estuviera con Henry esa idea me lastimaba

—No lo creo, si está locamente enamorado de ti como me lo haz contado de seguro sigue deprimido

—¿Cómo puedes estar tan seguro de eso?