Corrimos por un largo pasillo y luego de eso las luces comenzaron a parpadear.
Aun con tacones puestos podía correr sin problemas, pero dolía como la mierda.
Doblamos y derrapamos en más de un pasillo pero Jackson no soltaba mi mano.
Pero mientras corría su rostro y su expresión de desconcierto aún seguían frescas en mi mente.
Él estaba aquí. Él estaba aquí y...
-¡Ahí!-susurro Jackson apuntando a una ventana.
-¡Sí!
Corrimos hasta la ventana. Jackson entrelazo sus manos y las puso sobre su pierna.
-Vamos, tu primero.-coloque la plataforma del tacón en su palma.- A la de tres. Uno... Dos... ¡Tres!-me impulso hacia arriba y logra atravesar la ventana. Utilice mis brazos para arrastrarme por la hierba y sentí la tierra mojada y las pequeñas piedras lastimarme los antebrazo. Finalmente pude salir y me agache para poder ayudarle a Jackson.
-Jacks...-me metí en la pequeña ventana y lo vi parado mirando hacia los costados, luego fijo su mirada en mí.
-Extiende los brazos.-le obedecí y el tomo mis muñecas y yo me aferre a las suyas.
Pero hubo algo que no vi venir.
No vi venir a dos hombres que me arrebataron a Jackson de las piernas y los brazos y lo llevaron lejos de mí.
-¡Jackson!-el grito salió desesperado y asustado.
-¡Vete! ¡Vete!
Sentí una opresión en el pecho y mordiendo mi labio me puse de pie y comencé a correr.
****
No sé cuánto tiempo paso desde que llegue al hotel.
-Tienen a Jackson.-dije mientras cruce la perta de la habitación. Jessie se levantó rápidamente de su silla y me miro preocupada. Intento decir algo pero le corte.-No hay tiempo, tenemos que buscarle.
-Sabes que podemos desatar una guerra de pandillas contra nosotros, ¿verdad?
-No me interesa. No cuando tienen a uno de los míos, ya se torna personal.
Hice tronar los huesos de mi columna vertebral.
Tome una playera negra sin mangas y unos pantalones ajustados color azul oscuro. Me quite la peluca y posteriormente me masajee las sienes para dejarme el cabello suelto.
Jessie se encontraba cargando los cartuchos de las armas y Will tecleaba rápidamente en el computador.
-Tenemos suerte.-soltó mientras me sentaba sobre la cama para atarme los cordones de las botas.
-Suelta todo.
-Jackson dejo que te vayas por el mero hecho de que tenía un rastreador colocado en su zapato.—Dejo el ordenador de lado y miro su móvil.-Y ya tengo en mi GPS la dirección exacta de donde están, y si se mueven, vamos a saberlo.
-Genial.-murmure poniéndome de pie y tomando un par de armas.
-¿Desataremos una guerra?
-No hemos venido a eso, solo busquemos a Jackson y nos vamos directo a la zona sur del país.
-¿Y qué hay del plan?-preguntó Jessie. Suspire.
-No podemos continuar, debemos rescatar a Jackson y largarnos.
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Lo que nadie sabe de mi.
AkčníLa vida es dura, lo puedes aprender de muchas cosas, de muchas razones, de muchas ocasiones. Dicen que nada pasa por casualidad, que todo tiene una razón, o que simplemente es tener mala suerte,una de las tantas personas que dicen eso es Emma Broo...