Lo que nadie sabe de mi.

Capítulo 28

Era mamá, sin dudarlo, era ella.

Fotos de mamá cuando era más joven y cuando estaba embarazada, no sabría decir si de mí o de Jason.

Debajo de varias fotos había notas viejas. En una de ellas decía.

"Se han encontrado curas recientes, pero no efectivas." Fruncí el ceño. ¿Curas no efectivas? ¿Qué es esto? ¿Maze Runner?

Otra de las notas decía "Conforme el tiempo pasa, a veces voy a verla, la he dejado libre, pero no se siente así. Siento que la he dejado escapar, pero a la vez no creo que sea así, tiene algo que es mío..."
Mi corazón latía con rapidez.

Mire otras anotaciones, pero eran fórmulas de química que no entendía. Tal vez Evan sí...

Continúe mirando y encontremos notas sin sentido, fotografías de mamá, algo que llamo mi atención era una jeringa en una bolsa de plástico con zipper mal cerrada. La jeringa se había... oxidado, no contenía líquido alguno.

Moví mi cabeza de lado a lado. Una carta blanca llamo mi atención en el fondo de la caja.

"Sé que estás leyendo esto y sé que aún no es muy tarde. Aun estas a tiempo de salvar todo, de salvar a todos.

Sé que no me conoces, pero yo si lo hago Emmilia. Sé que tienes un plan de hacer una emboscada esta noche en el cabaret, lo tienes todo planeado, excepto a quien tienes que atrapar, ¿verdad?

Te diré en quien no tienes que confiar. Un hombre importante ira hoy, es más, todos los hombres que estarán ahí son importantes. El único objetivo que debes tener en mente es eliminar a todos, sin importar que. Sé que no lo entiendes, pero debes confiar en mí. Un extraño al que no conoces. Pero te daré una razón para que confíes en mí.

Sé valiente.

Tú decides que hacer."

El escalofrió que recorrió mi espalda fue lento y me dio... miedo.

Dios, no entiendo nada, nada de nada. Demonios, no sé qué pasa aquí.

Tome mi cabeza entre mis manos mientras miraba la carta y la volvía a releer.

De pronto encontré una foto de la mitad de una mariposa, era una mariposa parda, pero en color azul. Detrás de la foto estaba escrito. "Información vital."

Todo encajaba perfectamente. Podía ser una trampa, excepto por... por la frase. Eso me dijeron mis padres, y nadie lo sabía salvo yo, y eso me aterraba.

En definitiva no sabía qué hacer.

Me recosté en el tronco y cerré los ojos.

Últimamente sentía que hacia todo mal.

No debería de estar saliendo con Evan, sentía que me involucraba demasiado, podía salir herido o... o simplemente morir.

La idea de que pudiera morir me daba un dolor agudo en el pecho, no se sentía bien. Sentía que con cada movimiento que daba, todos a mí alrededor estaban expuestos, que en cualquier momento algo saldría mal y todo detonaría.

El amanecer ya se encontraba sobre mí. Suspire y decidí guardarme para mí todo lo que estaba aquí.

****

-¿Dónde estabas?-murmuró Evan adormilado.

Me acosté a su lado en mi cama.

-Tuve que acompañar a Jessie al médico.-le mentí mientras le daba un beso en los labios.