Guía para la bruja moderna en apuros [Hexes #1.5]

Sanación del nuevo año

Anotaciones de Dolores Martínez, enero de 1930

El comienzo de un nuevo año es el momento indicado para realizar rituales de inicios y limpiezas de energías para desembarazarse de aquellos pesos que nos aquejan. Practicados en el día indicado, con ingredientes cosechados bajo la fase lunar correspondiente, resultan ser beneficiosos incluso para quienes no creen en el poder sanador de las hierbas. Funcionan, en parte, para nosotras también.

En uno de los pocos viajes que tuve la libertad de disfrutar por el norte de Argentina, tuve el placer de conocer a un curandero salteño que compartió parte de su sabiduría conmigo. Además de ofrecerme uno de sus talismanes, purificado en un baño de salvia y ruda, impartió sus enseñanzas para llevar a cabo un rito sanador. Advirtiéndome de los engaños a los que solían echarle mano falsos profetas y manosantas (incluyendo operaciones quirúrgicas que no eran tal, tirones de cabello y soplos de bebidas espirituosas), me entregó semillas para mi siembra y detalló los pasos de su ceremonia básica.

Con los años, tratando de apagar mis deseos de volver a salir de esta ciudad de concreto y sueños olvidados, adapté sus saberes a un procedimiento que las Martínez pudiéramos sobrellevar y transmitir de generación en generación. Aquello que a los humanos les sirve no siempre se condice con lo que las brujas les es necesario. Si bien continúa siendo imperfecto, el siguiente hechizo se acerca lo suficiente al éxito.

Para la apertura de nuevos caminos y la cura de heridas espirituales

Ingredientes

Doce hojas de salvia machacadas en un mortero de piedra

Seis hojas de ruda machacadas en un mortero de madera

Seis hojas de laurel machacadas en un mortero de bronce

Un vaso de agua purificada a la luz de la primera luna nueva del año

Una rama de romero cosechada en la primera noche del año

Cómo realizarlo

Combinar todas las hierbas ya machacadas en un cuencode losa. Verter el agua y llevar a hervor durante tres minutos. Retirar del fuegoy dejar que la infusión enfríe hasta alcanzar una temperatura tibia. Embeber larama de romero y trazar frente, cuello, pecho, manos y pies con ella, en eseorden. Masajear cada zona con cuidado, utilizando movimientos circulares. En casode quedar restos de la infusión, puede usarse para pulverizar la entrada delhogar y la entrada al cuarto de descanso.