Nunca te olvide. Chaelisa G!P

18. Otra oportunidad.

-Lisa, yo no quiero más hijos.- Dice Rosé.

-Esta bien, entonces yo tampoco tendré más hijos.- Responde Lisa.
-Amare a este pequeño como mi más grande tesoro.- Dice Lisa besando el vientre de la rubia.
-Por favor sólo permíteme estar cercas.- Ruega Lisa, Rosé quiere decirle que sea parte de su vida también pero se detiene, se queda callada, y solo asiente.

-Estarás involucrada todo lo que quieras, no te lo impediré.- Le dice Rosé.

-Te dejo descansar iré a ver que te prepare alguna sopa, o algo para que comas, y hablaré con Tom, estarás una semana en cama, esperemos que con las fotos que tomo sea suficiente.- Dice Lisa mientras sale de la habitación con las manos en los bolsillos y Rosé sonríe feliz con la castaña, es tan adorable.
Media hora después regresa con un plato de sopa y un vaso con agua y hielos.

-Toma, ya me encargué de todo, nadie te molestara la siguiente semana, tendrán que pasar por mi primero.- Dice Lisa sonriendo a la rubia, se sienta con ella en la cama, mientras se asegura que Rosé comience a alimentarse.

-Gracias, pero no tienes que hacerlo.

-No hay problema, solo quiero asegurarme que estén bien.- Dice la castaña sonriendo a Rosé, mientras Rosé come, le ofrece cucharadas a Lisa que las recibe gustosa, aunque ya había comido los cocineros de la casa de la rubia eran muy buenos.
Cuando Rosé termina de comer Lisa toma la bandeja y la lleva a la cocina, y regresa a la habitación de la rubia.

-¿está bien si me quedo un rato contigo? Solo quiero asegurarme que todo esté bien.- Dice Lisa y Rosé trata de disimular la emocion, extrañaba tanto a la castaña un mes teniéndola a lado y no poder acercarse a ella, y ahora la tenía para ella sola no quería perder la oportunidad.

-¿estas segura?- Pregunta la rubia.
-¿no tiene que atender fiestas o algo?-pregunta indiferente como la gran actriz que es.

-Primero es la mamá y mi bebé.- Responde levantando los hombros desde el marco de la puerta.

-Pues si para ti está bien, por mi no hay problema.- Dice la rubia con algo de sueño y cansancio que su cuerpo siente después de tantas emociones causadas por la castaña.
Lisa casi corre a lado de la rubia y se acomoda cuidadosamente a lado de Rosé.

-¿que ves?- pregunta Lisa.

-Un documental.- responde y en ese momento siente como su cerebro se desconecta, sabe que hablará sobre alguna historia de algún famoso actor con una muerte trágica, lo que Rosé amaba ver, pero ella odiaba y dormía en esos momentos.
-¿quieres ver otra cosa?- pregunta la rubia.

-No, está bien.- Dice Lisa acomodándose en la cama, a los veinte minutos de que Lisa ve el documental siente como no puede soportar el aburrimiento, abraza a la rubia cual almohada y se queda profundamente dormida mientras Rosé sonríe feliz, con su hermosa castaña abrazada a ella, acaricia su cabellera mientras Lisa se niega a despegarse un milímetro de ella.
Cuando Rosé termina de ver su documental apaga la pantalla y se acomoda para dormir, aunque se le complica con la castaña que se aferra a ella, así que se da por vencida y se queda dormida abrazada de la castaña.
A la mañana siguiente Rosé sonríe feliz, a ver a Lisa que no se ha movido ni un milímetro lejos de ella y sin poder evitarlo besa la mejilla de la castaña, ve su nariz redonda y pequeña y esos labios tan carnosos, sonríe al recordar a esa mujer tan perfecta, que abre los ojos de repente cuando llaman a la puerta y Rosé queda petrificada ante la mirada de la castaña.

-¿no puedes dejar de verme?- Dice con una sonrisa victoriosa.

-si puedo, no seas vanidosa.- responde la rubia.

-¿quien?- Pregunta Lisa con la voz ronca.

-Señorita Lisa, llaman a la puerta, y como usted pidió explícitamente que usted atendería cualquier situación.- Dice la ama de llaves del otro lado de la puerta.

-Si, dame unos minutos.- Dice Lisa levantándose incomoda.

-¿Todo bien?- Se ríe Rosé al ver el miembro de Lisa.

-Es muy temprano y sabe que estás a mi lado, déjalo tiene mente propia.- Dice Lisa haciendo reír a Rosé.
-Ya vuelvo.- Se despide dando un beso tronado en la mejilla de la rubia.

Lisa sale de la habitación y en la puerta ve a Joy, y siente como se paraliza, la novia de la mamá de su bebé, aunque si la castaña supiera lo que Joy hizo no tendría piedad de ella.

-¡Buenos días! ¿Eres Lisa la cantante verdad?- Pregunta Joy sorprendida y con algo de desespero.
-Mira necesito hablar con Rosie, necesito explicarle lo qué pasó, necesito que me escuche.- Dice Joy.

-¿De que hablas?-pregunta Lisa sorprendida.

-Yo no quise engañarla simplemente paso, necesito explicarle.- Dice Joy preocupada.

-Mira Joy, ustedes están a mano.- Dice Lisa apretando los puños.

-¿De que hablas?- Pregunta Joy sin entender.

-Que Rosé está embarazada, Rosé y yo tendremos un bebé, yo soy la otra mamá, estuvimos juntas, si tú entiendes de lo que hablo.- Le dice Lisa con una sonrisa burlona.
-Así que están a mano, ahora deberías irte, Rosé necesita descansar por nuestro bebé.

-Te voy a matar imbecil.- Le dice Joy molesta.

-No seas ridícula, nosotras estamos bien, y tú ya tienes a tu amante, así que déjala en paz.- Le dice Lisa molesta, pero Joy con la sangre hirviendo suelta el primer golpe.