Victoria no volvió en todo el día pero dejó los papeles firmados junto con su pasaporte así que agarré al bebé y me fui.
Temprano al día siguiente llegamos a nuestro destino. Marina nos está esperando ya en el aeropuerto. La veo a lo lejos con un cartelito muy lindo.
-Hola, tú-
Nos ponemos delante de ella.
Mariana:-Hola, tú.-
Se agacha a la altura de Owen y él se esconde detrás mío apenado.
-¿Qué sucede bebé?-
Me mira curioso y la apunta.
Owen:-¿Llama tú?-
Nos reímos.
-No, ella se llama Mariana-
Llegamos a casa y acomodó al bebé en su nueva habitación.
Mariana:-Pensé que no llegarías a tiempo ¿cómo te fue?-
Sirvo un poco de jugo y me tomo mi tiempo para hablar.
-Victoria y yo discutimos en más de una ocasión. Comprendo que es muy difícil para ella que yo llegue de la nada y me lleve a Owen pero ¿qué se supone que debía hacer? Ella queriendo que nos volviéramos a juntar como si nada hubiera pasado y yo queriendo traerlo a mi hogar actual. No pienso alejarla de él solo quiero que entienda que estará ahora conmigo.- Me doy cuanta que en ese tiempo que hablé dejé de respirar, me trato de tranquilizar. -¿Por qué me miras así?-
Mariana:-¿Así comó?-
-Con cuiriosida como si fuera un paquete extraño que llega a casa y tienes miedo pero también tienes tantas hansias por ya abrirlo.-
Mariana:-Desde antes de llamarte estaba asustada porque pensé que me dirías "Lo siento estoy con mi familia y no quiero volver" y ahora que estás aquí tú te vez tan distinta.-
-¿Distinta?-
Mariana:-Tal vez solo estoy exagerando después de no verte por casi 3 semanas.-
-Iré a ver a Owen.-
El juega con unos muñequitos que Mariana le compró. Se da cuenta de mi presencia y me invita a entrar.
Owen:-Mamá, mira.-
-Es lindo ¿cómo se llama?-
Observa con mucha atención al pequeño perrito en su mano y me siento junto a él.
Mariana:-Ella se llama Bingo.-
Dice para unirse a nosotros.
Owen:-¡Bingo! ¡Bingo!-
Marina:-Ella es su hermana y se llama Bluey. Su papá Heeler y su mamá Chilli.-
Pasamos alguna horas jugando. Preparamos la comida que Owen pidió.
Mariana:-Creo necesario ir al súper.-
-Podemos aprovechar para comprarle ropa a Owen para mañana.-
El camino a la plaza se la pasaron cantando.
-Hay que comprar una carreola.-
Mariana:-Vamos a comprar primero lo que necesites para Owen y luego vamos al súper.-
-No tengo idea de hace cuento no me hacerco a las tiendas o áreas donde está todo lo de niños.-
La tienda es enorme y la verdad es que me empiezo a emocionar con lo pequeña que es la ropita y tantas cosas que hay para vestirlos como si fueran muñequitos.
X:-¿Quiere que le ayude llevando eso a la caja para que pueda seguir viendo?-
-Gracias.-
Le doy toda la ropa que voy cargando a una de las vendedoras y sigo mirando la ropa.
Elegí algunas cosas que se me hicieron tiernas y voy a pagar.
Mariana me ayuda con las bolsas y con el bebé para volver al carro.
-¿Podemos estrenar la carreola?-
Mariana:-Es buena idea para no guardar la caja en la casa.-
Se pone a armarla mientras husmeo en las bolsas. Owen saca un sombrero de sol e intenta ponérselo así que lo ayudo.
-Te ves tan hermoso y tan dulce quiero comerte a besos.-
Lo agarro y lo beso en su pancita, él se ríe y se mueve como lombriz.
Mariana:-Amor, está lista la carriola.-
Subo al bebé y volvemos a entrar en la plaza.
-Prometo comprar solo lo necesario.-
Mariana:-Fingiré que te creo.-
