Hay una profecía: "cuándo el hijo de Adán en carne y hueso, en el trono de Cair Paravel esté sentado, los malos tiempos se habrán ido...
"Una antigua leyenda dice que dos hijos de Adán y tres hijas de Eva van a derrotar a la reina blanca y a restau...
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╔════════════════════╗ Cinco días después
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- ¡Ya estoy harta! -exclamó Lucy la décima noche cerca de la cubierta del barco sentada en el suelo junto a Lía y a Adrian.
- La nueva ruta no sirvió de nada, seguimos sin tener alguna señal de tierra -Lía se quejó.
- Tengo hambre -gimió la pequeña junto a ellas.
Lucy y Amelia se miraron con preocupación, ya que al no haber pisado puerto en casi dos semanas la comida comenzaba a faltar. Amelia suspiró y miró hacia el cielo por completo nublado, con enormes y espesas gotas cayendo de el y feroz viento azotandoles la cara.
- ¿Habrá algo que ella pueda comer?
- No lo sé... Iré a preguntarle a alguien.
Se puso de pie y caminó hacia la cubierta, mojandose de inmediato con la lluvia y resbalandose de vez en cuándo. Miró por todos lados tratando de reconocer a alguien que pueda ayudarla.
Al tener ahora poca comida Lord Trinian creyó que lo mejor era trasladar las municiones al sótano y la comida en otro lugar. Así que ahora intentaba localizarlo a él o a Rhys.
- ¡Alteza! -se giró al escuchar la voz del capitán-. Ya le he dicho que no es seguro que usted esté aquí.
- Lo se, lo siento, pero la pequeña tiene hambre, quería saber si hay algo que podamos darle... Aunque sea un poco.
Trinian soltó un gruñido antes de asentir.
- Sígame.
La guío hacia unas escaleras y ambos entraron a una cabina que estaba detrás de timón, adentro estaban Rhys y Caspian discutiendo en voz baja.
- Solo digo que deberías pensar bien las cosas -decía Rhys.
- ¡No hay nada que pensar! -respondió bruscamente-. No lo haré.
