Capítulo 11

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Su corazón seguía roto pero cada vez se iban cosiendo pequeños trazos con delgados y débiles trozos de seda

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Su corazón seguía roto pero cada vez se iban cosiendo pequeños trazos con delgados y débiles trozos de seda. Pero aún así se estaba arreglando. Sin embargo, cualquier cosa podría volverlo a destruirlo, y puede que esta vez fuera para siempre. Sin tener ninguna solución... Incluso podría pensar en hacerse daño a sí misma... pero aquello debía ser impensable para cualquier ser humano del planeta donde vivimos. No sé cuánto dolor puede tener una persona y lo mal que lo tiene que estar pasando para pensar en aquellas cosas... El dolor puede hacer que las personas quieran hacer cosas que nunca tendrán remedio... en vez de pensar en pedir ayuda... en vez de pensar en su futuro y en quitarse el dolor de una manera mejor. Es cierto que no todo el mundo piensa así y que hay personas que sí piden ayuda y que son capaces de salir adelante. ¿Pero qué pasa con aquellas personas que terminan de descoser su corazón? ¿O con las que ni siquiera empezaron a coserlo y ya está demasiado dañado y no tiene solución?

Su corazón seguía roto, pero se estaba arreglando... lento pero sin parar.

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El reloj dio las tres mientras Julie empezaba a recoger sus cosas para así salir de la clase cuando Kang se colocó a su lado. Esta, nerviosa por la situación vivida minutos antes de reanudar la clase, no fue capaz de mirarle a los ojos. Sin embargo, el chico le empezó a hablar sin importarle no sentir los ojos café de ella sobre sus ojos miel.

— Bueno...

— Bueno...

— Perdona por lo de antes... se me olvidó que tenías novio y...

— No... no te preocupes... agua pasada... — dijo mientras le empezaban a caer pequeñas gotas de sudor por la frente.

— ¿Seguro?

— Sí... segura al 50%... — dio un paso hacía la puerta de la sala sin casi mirar a su compañero.

— Mejor me voy... no quiero molestar — y tras ver que no le respondí acogió sus cosas y salió por la puerta.

— ¿Problemas con tu pareja?

— Qué susto... — le dijo Julia al pensar que su profesora ya había abandonado la clase — . Sí... más o menos...

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