LOTR (EL CORAZÓN MALDITO)

COMIENZA EL SEÑOR DE LOS ANILLOS, Y LA COMUNIDAD DEL ANILLO

NARRADOR
El anillo estaba siendo transportado por 4 hobbits de la Comarca hacia Rivendell. Estaban esperando al mago Gandalf en la posada del Pony Pisador.
Frodo, el hobbit que portaba la carga del anillo, se puso el anillo y desapareció delante de toda la posada, eso llamó la atención de un montaraz conocido como Trancos.
Frodo y sus amigos hobbits le explicaron que debían llegar a Rivendell con el anillo, pero que estaban siendo perseguidos por jinetes encapuchados.
El montaraz de nombre Aragorn, hijo de Arathorn, les ayudaría a llegar hasta Rivendell, tierra de los elfos del bosque.
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Frodo fue dañado por una de las espadas de los jinetes negros de Sauron y por lo tanto, le envenenaron, la oscuridad le consumía.
Elaila se encontraba en Rivendell cuando pudo ver, gracias a los poderes que le habían sido concedidos lo que le habí sucedido. Tenía todos los conocimientos acerca de la magia blanca, pero tambien sobre la magia negra, dado que todo el tiempo que estuvo en Mordor le permitió comprender todos los secretos que ocultaba esa magia oscura.
Por ello, en mitad de la noche, salió con su caballo, el mismo que la llevó lejos de Mordor a buscar al Hobbit y a salvarlo con sus conocimientos curativos.
NARRA ELAILA
Llegué lo más rapido que mi caballo pudo cabalgar, sabía que podía salvar al hobbit herido, pero necesitaba tiempo, lo único que Frodo no tenía.
Al llegar, pude ver a Aragorn, el heredero de Isildur, solíamos ser amigos cuando éramos niños, ya que ambos dos pasamos mucha parte de nuestra infancia en Rivendell, pero al crecer nuestra historia se torció y perdimos el contacto, pero esa historia ya os la contaré...
ELAILA: (le apunté con mi espada a su cuello, no sabía si todavía podía fiarme de él) que hace un Montaraz perdido por estas tierras.
ARAGORN: hola Laila, ¿Que haces aquí?
(Recordé que solía llamarme Laila cuando éramos pequeños).
Tras explicarle brevemente mi llegada, me condujo hasta Frodo, pude traerlo de vuelta durante un tiempo pero necesitaba los hechizos de los libros de magia blanca que estaban en Rivendell, debía llegar hasta allí.
ARAGORN: le llevaré a Rivendell, allí los elfos le curarán.
ELAILA: los elfos no pueden ayudarle, es magia negra lo que lleva en su interior, puedo hechizarle para salvarle, pero no puedo hacerlo aquí. Soy una jinete más rápida, iré yo.
ARAGORN: Namarië Laila, Nai ayuval maara (adiós Laila, ojalá estés bien)
ELAILA: Hantale, Enquetuvalve (Gracias, volveremos a vernos).
Galopé con Frodo delante mía, esquivando todo lo rápido posible a las criaturas oscuras de Sauron, nos pisaban los talones así que tuve que ir lo más rápido posible, tenía que cruzar el río.
Cuando finalmente pude cruzarlo, dije un pequeño cántico élfico, que hizo que las ramas de los árboles atasen a los caballos al suelo y pude crear una gran ola que se los llevó de mi vista.
Pude llegar a Rivendell, pero Frodo ya estaba demasiado grave, debía actuar rápido o moriría.
Al llegar, Elrond acudió corriendo al cuarto donde Frodo dormía, cada vez más cerca de ser sucumbido por la oscuridad. Había leído cientos de libros acerca de la magia negra, y despues de lo que Elrond me enseñó de la magia blanca, solo un hechizo bastaba para sacar la agia oscura de él. El problema era que no sabía si funcionaría, ya que mi magia no es "pura" actualmente. De todas formas era la única con la capacidad para poder invocar tal hechizo, ni siquiera Gandalf podía llegar a hacerlo.