Se trata de un fanfic del señor de los anillos. La historia es fiel a los libros y películas, lo único se añade un personaje más, Elaila, princesa del reino de las hadas del bosque.
NARRADOR Los orcos se escuchaban cada vez más cerca, y la espada de Frodo (que brillaba cuando detectaba orcos), comenzó a brillar. LÉGOLAS: ¡Orcos! Bormir se apresuró a cerrar la puerta que custodiaba la tumba del enano y los hobbits se situaban detrás de todos para estar más protegidos. LÉGOLAS: Elaila detrás mía, recuerda lo que practicamos BORMIR: (soltó en un claro tono irónico) tienen un monstruo de las cavernas, por supuesto.
La puerta se abrió y despues de que Légolas abatiera a unos cuantos orcos con sus flechas, comenzó la batalla. Todos lcuhaban contra los distintos orcos, y la batalla parecía estar ganada hasta que llegó el monstruo de las cavernas, el cual hirió a Frodo, pero gracias al Mithril, sobrevivió. Debían huir de ahí, puesto que cada vez llegaban más orcos, peor llegó un punto donde se quedaron parados en mitad de un circulo, rodeados de decenas de centenares de orcos. Pero por un extraño ruido, huyeron corriendo sin dejar rastro de ellos. BORMIR: ¿Cual es esa nueva entrega? (volvió a decir en un tono sarcástico) GANDALF: Un Balrog, un demonio del mundo antiguo, este enemigo sobrepasa a cualquiera de nosotros, menos a tí Elaila tienes el poder suficiente como para destruirlo, pero desatar tu poder nos pondría en peligro al resto. Asía ue, ¡CORRED! NARRA ELAILA Todos corriámos siguiendo a Aragorn, que según había oído, Gandalf le dijo que nos guiara hasta el puente. Pero mi cabeza aún no asimilaba lo que me acababa de decir Gandalf, como iba yo a derrotar a un demonio antiguo, si lo único que se hacer con mis poderes el hacer crecer las flores, y de vez en cuando, tener visiones sobre situaciones que están sucediendo o futuras. Legolas me ayudó a saltar un trozo de las escaleras que estaban rotas. Pero el demonio antaño conocido como Morgoth apareció y Gandalf se enfrentó al él, pero cuando parecía que iba a ganar la batalla, se cayó en el barraco con el demonio y murió. Frodó gritó, pero ni yo ni el resto de la comunidad lo hicimos, debíamos salir de ahí, pero estábamos en shock, no podía ser real, Gandalf no podía estar muerto. —------------- Finalmente, la comunidad salió de las Minas de Moria ARAGORN: Légolas, se que levanten, aún queda mucho camino por delante BORMIR: ¡Dales un minuto! Todavía están en shock ARGORN: Al anochecer estas tierras estarán infestadas de orcos, debemos llegar al Bosque encantado Légolas se acercó a Elaila, notaba su culpabilidad por lo que Gandalf tule dijo antes de morir LEGOLAS: no es tu culpa, el mismo te pidió que no hicieras nada ELAILA: no es eso lo que me está atormentado, es el hecho de que pude salvarlo, pero aún no sé cómo, me han enseñado a controlar mis poderes, pero no a usarlos. LEGOLAS: será mejor así, si Gandalf lo menciono por algo sería. ELAILA: quizá tengas razón
La comunidad avanzó por la tierras rocosas hasta llegar al bosque, un bosque lleno de vegetación en distintos tonos morados, algo sin duda mágico ante los ojos de cualquiera. Pero para poder llegar al corazón del bosque debían cruzar un lago, con barcas custodiadas por hadas del bosque. Aragorn se subió junto a Elaila y el hombre que manejaba la barca. ARGAGORN: ¿Estas bien? Pareces preocupada ELAILA: No pisado estas tierras desde mi secuestro, no sé si quiera si recibieron mis cartas, pues nunca respondieron. Temo a la reacción que puedan tener al verme. ARAGORN: Te comportaste como una verdadera reina debe comportarse, no se trata de hacer lo correcto, sino lo adecuado para cada situación, hiciste bien en actuar así ante la adversidad y tú pueblo lo entenderá. ELAILA: Muchas gracias, eres un buen amigo Aragorn, siento que las cosas salieran así entre nosotros. ARAGORN: (le rozó la barbilla con los dedos alzándole la cabeza para que le mirase) también hiciste lo correcto, era Legolas con quien debías casarte, no conmigo.
Finalmente llegaron a la otra orilla, era un lugar hermoso, un bosque parcialmente nublado, pero tanto la niebla, como las flores e incluso las mariposas eran de distintos tonos de morados. Pero aún a pesar de su belleza, Elaila estaba asustada, no sabía que iba a encontrarse al llegar al bosque, o como reaccionaría su madre al verla.
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