CAPITULO 32

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- hola - saludó culposa a Renato entrando a la habitación del hospital - cómo estás?

- mejor que nunca - respondió desde la camilla





Emi se acercó al borde de las lagrimas, tenía un nudo en la garganta que casi ni la dejaba hablar.





- no me mires así, no me voy a morir - soltó Rena cuando ella se estaban sentando en la silla de al lado de donde el estaba recostado

- obvio que no - golpeándole suave el hombro - pero que te pasó? por qué estas acá?

- *alza los hombros* no se, me agarraron convulsiones y me desmayé un par de veces

- pero así de la nada?

- *asiente con la cabeza* me están haciendo estudios, por eso estoy acá

- si, me dijo mi papá





Cruzaron miradas por un rato, Emilia se moría de la culpa, notaba en Renato una mirada seca, una mirada fría, nunca la había mirado así, y aunque sabía que se lo merecía, le dolía igual.





- por que no me dijiste nada? podría haber vuelto antes - ya algunas lagrimas recorrían sus mejillas

- no te quería molestar, ni a vos, ni a Mateo

- pero no molestas Renato, no digas boludeces

- mira si se iban a volver de Londres por lástima Emilia





La chica lo miró confundida, el corazón le dejó de latir por unos segundos.




- iban? - preguntó asustada

- *suelta una carcajada* ya se que te fuiste con el





Ahora tendría que describir la reacción de Emilia, pero simplemente no hubo reacción, se quedó dura, con la mente en blanco, no sabía que decir, que hacer, no sabía nada.





- encontré el test de embarazo que escondiste en tu pieza - agregó tras el silencio de la chica - no te estaba revisando, quería ver si tenías manteca de cacao, y tampoco te esforzaste en esconderlo mucho





Emi agachó la mirada, no le dio la cara para seguir mirándolo a los ojos.





- era obvio que no era por mi, me hubieses dicho, aparte supuse que te lo habías hecho esa semana que estuviste con vómitos, y no habíamos cogido, yo nisiquiera había estado las semanas anteriores, así que no hacía falta dudar mucho





Las lágrimas eran cada vez más y la culpa también, quería explicarse pero no le salían las palabras, quería pedirle perdón pero sabía que no valdría la pena.

Renato no lloraba, se lo notaba bastante fuerte contándole la situación, eso no significa que no le doliera.





- no quise desconfiar de Mateo pero fue la primera persona que se me vino a la cabeza, e indagando un poco mas me entere que estaban juntos allá en Londres, ya era obvio por quien te habías hecho el test

- indagando un poco mas como? - preguntó mirandolo





Le parecía muy raro que se haya enterado, solo sabían sus dos amigas y los amigos de Mateo, para cubrirlo, pero nadie diría nada, y mucho menos a Renato.





- te parece que soy yo el que tengo que dar explicaciones?





Emi soltó un suspiro volviendo a bajar la mirada, en serio que no sabía que decir, no tenía palabras.





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