- qué explicación le diste a Juliana para poder venir acá? - preguntó Emilia camino de vuelta a casa
Ambos estaban empapados, pero gracias al clima no tenían frío.
- le dije que me iba de viaje con mis amigos
- *suelta una carcajada* en serio???
- y si, no le podía decir que venía con vos
- que tiene? - alzando los hombros - me venís a cuidar como hermano mayor - dijo sarcástica
- mmmmm no - ambos se rieron - te cuido nomás, lo otro no suena tan bien
- y si mi mamá me pregunta? que sos?
- su futuro yerno decile - respondió sonriendo
- ya quisieras - soltó en una carcajada
- decile eso, la vas a dejar re contenta, no viste lo bien que le caí?
- no me vas a contar nunca por que te peleaste con Renato? - preguntó cambiando por completo el tema de conversación
No aguantaba más, lo tenía que largar. Mateo se quedó en silencio unos segundos, no se esperaba para nada esa pregunta.
- por que te interesa tanto?
- por que ya se la respuesta, pero quiero que me la digas vos
- como que sabes la respuesta? - preguntó confundido
- lo hable con tu hermano
El chico soltó un suspiro y siguió caminando en silencio, pero a Emilia le ganaba la ansiedad, necesitaba escucharlo de su boca.
Se posicionó enfrente de el, haciendo que ambos detuvieran el paso, cruzaron miradas por unos segundos y después la chica rompió el silencio.
- un día soy una que te coges por pura calentura, al otro me vengo a enterar que hace un año estabas enamorado de mi, pero como sos tan indiferente no puedo deducir si sigue siendo así o es verdad que solo te sacaste las ganas
- Emi...
- un día me decís que hagamos como que no nos conocemos, por que lo nuestro no fue nada - lo interrumpió - y al otro te subís a un avión conmigo diciéndome que la vas a pelear por mi, por que la queres pelear Mateo? por ver quien de los dos hermanos me coge mejor?
- que decís? - le molestó la última acusación
- no se, lo que me haces pensar vos
- yo no soy el único que decidió que hagamos como que no pasó nada
- deja de dividir culpas y decime que carajo sentís Mateo porfavor
- que te amo Emilia! - soltó harto de los reclamos - que cada vez que veo a Renato cerca tuyo lo quiero dormir de una trompada, hasta que me acuerdo que es mi hermano y que vos lo elegiste a el
- no me diste nunca la oportunidad de elegirte a vos - al borde de las lágrimas
- por que nunca me miraste, de que oportunidad me hablas? soy yo el pelotudo que hace dos años te vio en los pasillos de la escuela y se quedó loco, y que no te encaró nunca porque eras mas chica - hizo una pausa - y a los meses apareciste en casa como la novia de mi hermano y me quise matar, pero no podía hacer nada
Emi no podía creer lo que estaba escuchando, un par de lágrimas pasearon por sus mejillas, ni ella sabía porque.
- y me siento una mierda, porque Renato te ama, yo se que el te ama, pero es que no puedo no amarte Emilia, no puedo - agregó
- y porque no me aclaraste las cosas desde el principio en vez de hacerme dudar tanto?
- hacerte dudar de que?
- de lo que sentías Mateo, me sentía una pelotuda por enamorarme cuando pensaba que vos solamente me querías coger
- que se yo - alzando los hombros - yo tampoco nunca supe lo que te pasaba a vos, yo también pensaba que te querías sacar las ganas nomás
- *suelta una carcajada* al final somos dos pelotudos nomás
- puede ser - devolviéndole la carcajada
- y que esperas para comerme la boca y demostrarme todo lo que me dijiste? - con una leve sonrisa
- todo el mérito yo tengo que hace...
La chica besó sus labios antes de que el pudiera terminar de hablar, ambos sonrieron y se abrazaron, ella por los hombros, el por la cintura, sin dejar de besarse.
Mateo la alzó un poco apenas despegándola del piso para empezar a caminar, ambos soltaron una carcajada entre sus labios.
- podemos ser felices estos días y después que pase lo que tenga que pasar? - preguntó la chica
- *asiente con la cabeza* no pensemos si esta bien o mal, disfrutemos
Volvieron a sonreírse y a besarse, los corazones de ambos latían casi a la par, estaban muy felices, se sentían libres, sentían paz al estar uno con el otro, sentían conexión, de esa conexión que ninguno había sentido nunca con ninguna otra persona.
- que lastima que tengamos que sacarnos la ropa húmeda - dijo Emilia entrando a la habitación
- si, que lastima - el chico le siguió el juego sacándose la remera
- no me mires - dijo antes de hacer lo mismo que el - desubicado - dándose vuelta
Mateo se rió y se sacó las zapatillas, la chica ya había dejado ver su espalda descubierta tirando su remera al suelo, paso sus brazos por su espalda para desabrocharse el corpiño pero se hizo la que no pudo.
- me ayudas? - preguntó sólo girando su cabeza hacia un costado para verlo
- si, como no - acercándose
El chico le desabrocho el corpiño y también ayudo a bajarle las tiritas para que saque los brazos.
- gracias - dijo Emi tirando la prenda en el piso
- no gracias no, yo no hago nada gratis - respondió en su oído pasando su mano por su brazo
El tacto suave en su piel, la respiración de el chico tan cerca de su cuello, y el choque de pieles de su espalda con el abdomen de Mateo, hicieron que a ella se le forme piel de gallina, el lo notó y sonrió.
- no? y cuanto me va a salir? - quizo seguir con el juego aunque ya estaba un poco nerviosa
- caro - respondió en una carcajada bajando su boca por su cuello
Emilia soltó un suspiro, ya no podía responder, la mano de el ya estaba paseando por su abdomen, mientras la otra recorría el otro brazo, empezó a besarla suavemente por su cuello, se notaba por el tacto de sus labios que estaba soltando una leve sonrisa, le encantaba notar los nervios en ella.
- pagas o te endeudas? - preguntó antes de seguir
- pago - respondió muy segura
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BIEN O MAL
Fiksi PenggemarEl corazón es caprichoso, no sabe lo que esta bien y lo que esta mal, lo que si sabe, es que siempre el amor termina ganando... - Trueno