- no te veo muy feliz por que nos hayan dejado - soltó Emi al terminar de subir las escaleras
- queres que tire cuetes? - respondió Mateo, el estaba unos pasos mas adelante
- no te amargues por lo que dice Renato - largó en un suspiro adelantando su paso - son dos personas completamente diferentes, dos extremos, pero ninguno está mal
- no hace falta que me consueles - dijo serio mirándola
La chica lo miró sorprendida, cual flasha contestándole así?
Chocaron miradas por un rato, ella estaba esperando unas disculpas, él nisiquiera había pensado en dárselas.
- que hacen? - sintieron una voz que los interrumpió
Ambos miraron hacia las escaleras, que es de donde provenía el llamado, era Renato, recién volvía del gimnasio.
Mateo lo ignoró por completo y entró a su habitación, Emilia se quedó ahí parada.
- qué pasó? - preguntó el chico acercándose
Quizo darle un beso, pero la chica sé corrió antes de que toque su boca, el la miró confundido.
- te pedí que no le vayas con el cuento a tu vieja y vas y lo haces - reprochó enojada
- *suelta un suspiro* no tengo ganas de pelear Emilia
- y yo no tengo ganas de que me quieras controlar todo el tiempo, si queres ser un aburrido de mierda a mi no me arrastres
- viniste acá a tratar mal a todos? - la voz de Mateo le impidió seguir hablando
Estaba asomado en la puerta de su pieza, había escuchado todo.
- primero a mi vieja y después a el, quien te pensas que sos? - acercándose
- Mateo - intentó frenarlo Renato
- es tu novio, te esta cuidando, desagradecida
- desagradecida yo? - iba a explotar de la bronca que había acumulado ese día - a Juliana le hablé así justamente para que nos deje hacer una joda que VOS quisiste proponer - acusándolo poniéndole el dedo índice en su pecho - mientras vos te quedabas paradito atrás mio como un pelotudo
- te crees muy capa por eso? - desafiándola acercándose aún más
- no, no me enorgullece para nada faltarle es respeto así, pero cuando quiero algo lo consigo, no me quedo como una estupida bancándome los insultos de todos
- deja de bardearme a mi porque salís perdiendo Emilia
- *suelta una carcajada* que miedo
- basta! los dos! - se interpuso el hermano menor - Mateo estoy hablando con mi novia no te metas
- me estas jodiendo? - después de mirarlo enojado - te vas a dejar tratar como una mierda por esta pendeja - señalándola
Emi iba a hablar, pero su novio lo hizo primero.
- anda Mateo
- *chista la lengua* ma si, matate - cerrándole la puerta en la cara
- me voy a bañar - soltó en un suspiro - después hablamos
- no voy a estar después
- eh?
- me quiero ir a la mierda - con la voz cortada
- que decís Emilia? no seas caprichosa
- me quiero ir a estar un rato sola, o le vas a decir a mi papá que no me deje?
- anda Emi - respondió ya harto - cuando dejes de querer evitarme todo el tiempo hablamos - entrando al baño
La protagonista pasó sus manos por su cara y soltó un suspiro en el que se contuvo las lágrimas, le había dado muchísima impotencia que Mateo se metiera y la tratara así, al fin y al cabo porque tenía razón, desde que se mudó que trata mal a todo el mundo, y odia eso, no es así, pero ni ella entiende lo que le pasa.
- ya vengo - avisó caminando hacia la puerta
- a donde vas? - preguntó Gabriel
- a recorrer el barrio
- sola?
- me ves acompañada?
- por que no le decís a Rena? es peligroso que andes sola, no conoces y ya va a anochecer - recomendó su papá
- porque no somos una sola persona, quiero estar sola un rato, puedo?
- *suelta un suspiro y asiente con la cabeza* anda
La chica se fue, Gabriel miró a su mujer preocupado.
- no se que le pasa, esta rara
- vivió siempre sola Gabi, debe ser difícil acostumbrarse a tener tanta gente de un día para el otro - intentó despreocuparlo Juliana
- pero eso no justifica los malos tratos
- ya va a estar mejor, debe tener un mal día - contestó tranquila
- la bolsa de boxeo? - preguntó Mateo interrumpiendo la charla
- en el garage - respondió su padrastro
El chico asintió y empezó a caminar para donde el hombre le había dicho.
- vendate Matu - dijo su mamá mientras el se alejaba
- ya se
Buscó la bolsa y fue a colgarla al patio, Gabriel se había encargado de hacerle un soporte para que el pueda ubicarla.
Estuvo un buen rato entrenando afuera, con un poco de música, pero siempre alguien tenía que molestarlo.
- que te pasa con Emilia? por que la trataste mal? - preguntó Renato acercándose
- no me rompas las bolas - sin dejar de boxear
- es mi novia, no tenes ningún derecho a tratarla así - ignoró las palabras de su hermano
- y ella no tiene derecho a tratarte así a vos - todavía sin frenar
- estaba enojada nomás
No obtuvo respuesta, así que hubo un rato de silencio hasta que después de un suspiro volvió a hablar.
- no me querrás llenar la cabeza para que la deje no? yo no me olvido de lo que te pasaba antes de que yo esté con ella
- que decís? - ahora si por fin lo miró
El dejar de pegarle a la bolsa tan repentinamente hizo que esta se siga tambaleando, primero le chocó el hombro pero después la frenó.
- que mierda decís!? - empujándolo
- te pregunto nomás - alzando los hombros
- la próxima vez que me preguntes una estupidez así te uso de bolsa de boxeo a vos - amenazo todavía respirando agitado
- tanto te vas a enojar? si fue una estupidez no te atajes - siguió provocándolo
- pasa que el que me está preguntando esa estupidez es mi hermano - agarrando una botella de agua que había dejado en la mesa - no pensas nada bueno de mi? tan mierda me ves?
- *suelta un suspiro y niega con la cabeza* perdón
- anda que quiero seguir entrenando - después de tomar un trago de agua
Renato soltó un suspiro y se fue para adentro, Mateo volvió a pegarle a la bolsa más embroncado que antes, al final Emilia no era la única que no aguantaba mas estar en esa casa.
ESTÁS LEYENDO
BIEN O MAL
FanfictionEl corazón es caprichoso, no sabe lo que esta bien y lo que esta mal, lo que si sabe, es que siempre el amor termina ganando... - Trueno