Intenciones

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Ya había pasado una semana de que Harry había cumplido su castigo con Snape, no se había topado a Draco entre esa semana, ni en el Gran Comedor y en las clases de pociones, Snape milagrosamente no los puso juntos, de hecho parecía que todo mundo evitaba el encuentro del moreno con el rubio

Harry simplemente había notado a todo Hogwarts raro conforme a los encuentros de éstos dos chicos, Ron y Hermione simplemente ponían excusas a Harry para no tener que detener una pelea a medio pasillo, y al parecer Draco también parecía evitar a toda costa aquellas peleas que solían ocurrir con frecuencia semanas antes, de hecho desde que ambos chicos pisaron Hogwarts, ahora, gracias a que las peleas eran evitadas mucho antes de que sucedieran, la paz inundaba los pasillos de aquel inmenso castillo, lo cual agobiaba de alguna manera a Harry, sentía tanta paz que sus pensamientos solían explotar cada que ese zumbido sumamente molesto se incrustaba en sus oídos y parecía no tener fin hasta que alguien le hablaba sacándolo de sus pensamientos

En cambio Draco ya había recuperado el fragmento de memoria que había perdido aquella noche extraña, recordaba cada detalle, era inolvidable, ya entendía el porqué Potter le había borrado la memoria, simplemente en ese momento hubo una explosión de sus magias, se juntaron, por ello Harry falló la primera vez en lograr el hechizo desmemorizador, Draco por supuesto había pedido a su padrino que hiciera de todo para que el rubio no tuviera que toparse más de 5 segundos al moreno, ya fuera en el pasillo, el Gran Comedor, o la clase de pociones, simplemente lo evitaba, algo en su mente le decía que debía evitarlo a toda costa, ¿por qué?, nunca obtuvo respuesta, pero sabía que iba a ser una perdida de su control estar cerca del moreno, era extraño que Draco pensara así, pero por alguna manera esos pensamientos lo convencían y lo guiaban

Draco volvía a su sala común, solo, como la mayoría de ocasiones pues sus amigos siempre se adelantaban, y como ya la mayoría de noches era normal que el rubio escuchara que Potter estaba en su salón, Draco sin saber el porqué se acercó lentamente a la puerta de aquel salón, no escuchó mucho ruido, más lo que parecía que el moreno acomodaba algunas cosas, de repente todo quedó en completo silencio, después de unos segundos que parecieron eternidades se escuchó un leve canto proveniente de algún punto dentro de aquel salón, el canto parecía de alguna u otra manera atraer a Draco, lo sacaban de sus pensamientos, los hacía irracionales, su mente quedaba en blanco, sabía que debía alejarse o terminaría entrando para ver de quién o qué provenía ese canto, era un canto dulce y algo meloso pero atrayente y embriagante, sin pensar ni controlar lo que hacía, Draco se dispuso a abrir aquella puerta lo cual fué un fracaso ya que estaba cerrada con algún hechizo

Al instante Draco reaccionó y con paso firme e irritado se fué de ahí a su sala común, ¿cómo iba a ser posible que Draco se haya visto atraído por un canto que probablemente vendría del moreno?, al llegar a su sala común, ya nadie estaba afuera, ni Pansy, Draco solo se fué a su habitación, cerró con seguro y se preparó para dormir, pero al parecer esa noche sus pensamientos no tenían planeado dejarlo dormir, seguían repitiendo una y otra vez aquel canto casi angelical, lo cuál no era del todo correcto, sí, el canto podía describirse como angelical pero había algo que lo hacía parecer peligroso para quién lo escuchara, simplemente era inolvidable e incontrolable

A la mañana siguiente, Draco despertó cansado, no había podido dormir mucho de solo pensar en aquel canto que al final de todo le terminó arrullando para lograr conciliar el sueño, Pansy al parecer había logrado entrar, ya que Draco observó que en su mesita de noche tenía una bandeja con comida y una nota que decía que la primer clase ya había pasado y, que si no quería otro castigo con Snape llegara antes de la tercer clase, Draco solo se levantó fastidiado, se dió una ducha, se vistió con lo que debía y salió de su sala común hacía la clase de pociones, se le había hecho tarde, esperaba ser el único

Al llegar tocó, al recibir un pase de parte de su padrino al otro lado de la puerta se dispuso a pasar, pero antes de siquiera dar un paso dentro del salón, Potter le obstruía el camino, al parecer no iba a ser el único castigado, Snape solo los dejó pasar y siguió con la clase, pues ambos chicos ya sabían en donde sería su castigo, Draco no podía estar más frustrado, seguía enojado por seguir pensando en aquel canto y, más aparte ahora se le sumaría con el castigo al lado del niño que vivió

- Draco, cálmate, toda la mesa ésta incómoda, ¿qué te pasa?, tu magia está totalmente descontrolada - Pansy parecía susurrarle con cautela al rubio, pues era verdad, la magia de éste estaba totalmente descontrolada, era como un torbellino de frustración e ira, se sentía como si un dementor se estuviera acercando lentamente a ellos

- No me pasa nada Pansy, ya me calmaré - respondió el rubio, era claro que no le diría a su amiga que estaba frustrado por los recientes sentimientos encontrados por Harry, Draco había descubierto que se enamoró, después de haber recuperado su memoria, el beso que se había dado entre el niño que vivió y él era algo que no lo dejaba dormir, no permitía que se concentrara en otra cosa que no fuera repetir ese pensamiento y aún más las sensaciones que sintió al besar al moreno, simplemente Draco se sentía frustrado por darle tantas vueltas al asunto pero era imposible no hacerlo, ¿por qué se había tenido que enamorar de Harry -el niño prodigio- Potter?, simplemente le parecía absurdo ya que para él todo eso era absurdo, odiaba al moreno con todo su ser solo por creer que Draco no merecía su amistad, ¿quién se creía?, sí, tal vez Draco era un completo idiota, lo admitía, ¿pero y qué?, él también podía ser amigo del elegido, ¿no?

Después de todo el elegido también tenía su mala personalidad, simplemente se creía mucho por ser el elegido y tener a una de las mejores estudiantes de su grado como su mejor amiga, Harry había ocasionado varías lesiones graves en diferentes personas solo por su impaciencia, siempre tan imprudente con su estúpido complejo de héroe, Draco solo lo detestaba, ¿por qué?, no lo sabía, ese odio había iniciado desde primero sin razón aparente y crecía conforme se hacían mayores y los años en Hogwarts pasaban, Harry le parecía un insolente, un cobarde, aún si había sobrevivido a incontables ocasiones solo porque Voldemort no iba a permitir verlo vivo, solo era un niño asustado, esperando no ser abandonado con la muerte de sus únicos amigos y su único familiar que hasta entonces era Sirius Black, solo era eso, un niño inmerso en sus pensamientos suicidas y su miedo al abandono, Draco no era muy diferente pero tampoco igual, el rubio temía a lo que el moreno no, pero ambos temían a quedarse totalmente solos, sin nadie a su lado

Mis ambiciones se resumen en tíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora