Samantha Rivera odia a Abril Garza.
Abril Garza odia a Samantha Rivera.
Un desafortunado evento llamado Victoria obliga a ambas chicas a estar en la misma habitación por las noches. ¿Qué podría salir mal?
•El contenido que se leerá a continuación no...
Esta pequeña carta es donde he puesto toda mi alma para escribirla en un papel resume concretamente nuestra relación. Esa mocosa mimada es terrible. ¿Cómo se atreve? Millaray es mía. En realidad no, pero pronto lo será. Por lo general, no me interesa la apariencia cuando conozco a alguien, pero Nuvia literalmente me dejó sin aliento con su corto cabello rosado y su delicada piel pálida. Recuerdo el primer día en que mis ojos se posaron en aquella belleza deslumbrante, ella caminaba por el pasillo como si fuera dueña del lugar y no puedo olvidar su elegante sonrisa plasmada en su rostro.
Ella era hermosa.
En este preciso momento, ella se convirtió en mi mundo. Los días siguientes no podía dejar de pensar en ella. Pasando de sus ojos redondos y cálidos de color chocolate, su fino rostro de huesos de estructura hasta sus labios rosados en forma de corazón.
Podría expresar mis sentimientos sobre las características de Millaray todo el día si alguien me lo pidiera, y ni siquiera me aburriría de responder.
—Psst. Deja de mirar, das miedo —Me dice Vicky mientras me toca los brazos para llamar mi atención.
Hasta su comentario, no me di cuenta de que estaba contemplando a Nuvia. Por suerte para mí, estaba demasiado concentrada en hablar con Abril y no me sorprendió mirándola. Me muerdo los labios y me vuelvo hacia mi mejor amiga.
—¿Era tan obvio? —Pregunto, un poco avergonzada.
Vicky se ríe y me golpea ligeramente los brazos. Finjo estar herida, pero a ella legítimamente no le importa que yo salga herida.
—Estás tan enculada —dice en un susurro agudo.
Mis mejillas empiezan a arder y por la mirada que me da, parezco bastante graciosa. Ella es consciente de que estoy enamorada de Millaray y le gusta burlarse demasiado de mí por eso. Pongo los ojos en blanco y le doy la espalda para que deje de sonreírme.
—Bien, Rivers. ¿Dónde has estado? —Me pregunta Millaray.
Casi me ahogo con mi propia saliva por su repentina pregunta. ¡Me pregunta cómo he estado, lo que significa que se preocupa por mí! O tal vez simplemente quiera ser educada.
Prefiero la primera opción, me hace sentir importante para ella y no podría estar más feliz pensando en ello.
—Yo... yo-- —digo pero la campana me interrumpe.
—Deberíamos irnos, podemos continuar esta conversación más tarde —sugiere tímidamente la chica de mis sueños.
—¡Nos vemos en la cafetería! —exclama Vicky a Abril y a mí, tomando el brazo de Millaray.
Las dos chicas se mezclan con la multitud dejándome con la que más odio. De repente, escucho sus risitas y comienza a imitar la forma en que le hablé a Nuvia. Especialmente la parte donde me veo más estúpida. No es mi culpa; cada vez que los ojos de Nuvia me miran, pierdo la cabeza.
—Cállate —Gimo mirándola.
—Lo que digas, perdedora. No voy a llegar tarde a mi primera clase por tu culpa —Abril se encoge de hombros y se da vuelta para tenerla de espaldas frente a mí.
Ella mueve su cabello castaño que parece una mezcla de fresas y frambuesas. Ignoro su olor y empiezo a caminar a pesar de que llamamos mucho la atención a nuestro alrededor. Algunos estudiantes no tienen vergüenza de mirarme y yo ya no me siento avergonzado. Mi cabello rubio parece ser bastante llamativo ya que no apartan la mirada de mí. Cuando entré a la universidad, decidí cambiar tiñéndome el cabello con un color atípico. Y en lo que a mí respecta, según Vicky, a mucha gente le gusta mi estilo.
—¡La chica más hermosa finalmente está aquí! —exclama Sebastián, mi amigo Roier, quien de repente apareció a mi lado.
—Mierda, me asustaste —Jadeo poniendo mi mano donde está mi corazón.
—¿Qué haces después de la escuela, nena? —Osvaldo me pregunta y pone un brazo alrededor de mis hombros.
Esos dos son peores que Vicky cuando se trata de burlarse de mí. Nos conocemos desde hace años. De hecho, Valdo y yo somos vecinos, lo que significa que vivimos al lado desde nuestra infancia. Conocí a Roier más tarde porque solíamos ir a la misma escuela secundaria y empezamos a hablar porque le caigo bien a Osvaldo.
Al igual que su hermana Abril, a Osvaldo le encanta molestarme. Pero sé que tiene buenas intenciones y se burla de mí porque quiere hablar conmigo.
—Voy a dormir en mi nuevo dormitorio.
—¿Quién es tu compañero de cuarto? —simplemente pregunta el pelinegro.
Roier es un buen tipo. No le gusta hablar demasiado, a diferencia de Osvaldo, pero cuando lo hace, es el humano más tímido que podemos encontrar.
Sigue a Osvaldo a todas partes como un cachorro perdido, pero es porque le tiene miedo a los extraños.
Por lo tanto, no tiene muchos amigos. En nuestras primeras conversaciones, estaba tenso y reservado, pero a medida que pasaba el tiempo se sentía cómodo conmigo. Incluso puede ser gritón a veces. Estar con una persona tímida no me molestó porque me recordó lo poco comunicativa que era Vicky cuando nos conocimos.
—Vickyy —digo su nombre mientras sonrío.
—Eh wey, ¿le preguntaste a mamá si había llegado nuestro equipaje? —Abril aparece de repente frente a nosotros.
Ella mira fijamente a su hermano mayor, y él solo se rasca ligeramente el cuello.
—¡Ay, verga, te prometo que lo haré en el almuerzo!
Ella suspira y pone los ojos en blanco. Entonces, nos deja tan rápido como vino.
—Es tan mandona —Comento y trato de no retorcear.
—Ella es tan linda —dice Roier con un suspiro.
Osvaldo y yo lo miramos fijamente, con las mejillas enrojecidas. Abril es su hermana pequeña y, como hermano mayor, debe eliminar a todas las personas a las que les guste. En cuanto a mí, no puedo creer el hecho de que él la llamara linda. ¿Qué le parece lindo? Ella tiene una mirada feroz que puede asustar a cualquiera.
Sin embargo, después de pasar toda mi vida escolar con ella sin mi permiso, llegué a la conclusión de que Abril tiene mucho éxito entre chicas y chicos.
Todavía me pregunto el por qué.
—¿Qué? —Osvaldo y yo dijimos al unísono, disgustados.
Roier levanta los brazos en el aire.
—Vamos chicos, Ari es linda, esa es la razón por la que es la presidenta del Consejo Estudiantil.
Bien, tal vez sea un poco guapa.
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