Llenaba el aire un bullicio expectante mientras las hadas se congregaban en un rincón, sus alas zumbaban con emoción al observar a los competidores. El hada presentadora, con su porte imponente, sostenía un pergamino reluciente bajo el sol, el cual contenía los nombres de las parejas destinadas a enfrentar el laberinto.
Caleb hizo una seña para que me acercara. Desde que llegué había buscado a Theo, pero él me había encontrado primero, pero cuando estuvo apunto de saludarme, la competencia me había llamado. Tendría tiempo para hablar con él.
—¡Bienvenidos, competidores!—anunció el hada con solemnidad, su voz resonando en el aire—. En este laberinto, enfrentarán trampas y desafíos, y solo podrán superarlos en pareja. Las alianzas fueron elegidas al azar. Recuerden, la cooperación y el trabajo en equipo son esenciales para superar cada etapa, es esencial que los dos lleguen a la salida juntos, de lo contrario no se contará como victoria.
La multitud reaccionó con murmullos y gestos de asombro ante la elección de Caleb y yo para representar una alianza, interpretada de diversas formas por todos, sabía que ver al príncipe con una humana era algo que daba de que hablar. Sin embargo, nuestra determinación era evidente mientras nos intercambiábamos una mirada breve, un entendimiento implícito de que, a pesar de nuestra historia tumultuosa, este desafío demandaba nuestra cooperación, aunque conociendo a Caleb sería una tarea difícil.
—Sigue mis pasos y nos irá bien —me dice Caleb en cuanto se acerca conmigo.
Cada pareja tiene una entrada diferente al laberinto.
—Estás jugando —suelto una risa ahogada.
—Yo no juego, adefecio.
Escuchó a lo lejos como unas cuantas hadas gritan el nombre del príncipe, el mismo que nos llevará al caos.
—Bien a la cuenta de tres, comenzará su primera prueba —comenzó a decir el hada—. Y recuerden, esto no es un juego, así que cuiden del otro o alguien más o algo más podría llevarlos a su fin.
El tiempo pareció detenerse por un instante mientras nos preparábamos para ingresar a la oscuridad del laberinto, un desafío que demandaría nuestra cooperación, a pesar de nuestras diferencias y rivalidades pasadas.
Una mezcla de incertidumbre, anticipación y la tensión inminente de lo desconocido. Con el conteo del hada resonando en mis oídos, nos dispusimos a adentrarnos en el laberinto, listos para enfrentar la primera prueba.
Los pasos resonaron en el suelo empedrado al entrar en el laberinto. La penumbra envolvía cada rincón, ocultando los desafíos que aguardaban en su interior. Caleb avanzaba con confianza, liderando el camino, mientras yo lo seguía de cerca, manteniendo un ritmo constante.
—Cuidado —murmuré, señalando un desvío abrupto en el pasillo que Caleb parecía ignorar.
Caleb se giró hacia mí con una mirada desafiante.
—No necesito tus indicaciones —replicó con frialdad —. Sé lo que estoy haciendo.
Desde el momento en que Jayden me dijo que trabajaría con el príncipe, supe que sería difícil superar los desafíos con su arrogante actitud.
—Tú no eres el único que sabe leer un laberinto, Caleb —respondí, con un tono afilado—. No te hagas el líder aquí, ambos estamos en igualdad de condiciones.
La discusión entre nosotros se intensificaba a medida que avanzábamos. Cada paso nos alejaba de la salida, sumergiéndonos aún más en la oscuridad creciente del laberinto. Apenas era el comienzo y la noche llegaría en su momento, y cómo estábamos sería una larga noche.
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Sangre Humana (El Legado de las Hadas)
FantasyUn mundo donde las hadas se esconden de las miradas curiosas de los humanos, viven ocultas entre los bosques hasta que un día adoptan a una bebe humana. Olive es la única humana entre las hadas, a excepción de sus hermanos, su pasado es un misterio...