Jealousy ⁞ MiChaeng

༄ | Capítulo 15

La última vez que había hablado con Mina, fue hace dos semanas. En esas dos semanas tuve el tiempo suficiente como para pensar en cómo hablaría con Dahyun, y como extra, tomarme un tiempo para mí. Se me era imposible pensar en cómo estaría Dahyun en estos momentos, ya que tampoco había tenido contacto con ella desde la última vez que nos vimos.

Cansada de las clases que habían pasado, me dirigí a la cafetería de la universidad. Necesitaba urgentemente un café para recargar energías.

— Disculpe, ¿me podría dar un café muy cargado? — pregunté a la vendedora.

— Claro. ¿Tu nombre? — preguntó con amabilidad.

— Chaeyoung — respondí. — Gracias — extendí algunos billetes y la vendedora me los recibió.

— En unos minutos serás llamada y podrás venir a retirar tu café.

Agradecí nuevamente con una reverencia.

Como debía esperar, me fui a sentar a una de las mesas que estaban desocupadas en el lugar.

— Hola Chaeng, tanto tiempo. — no me había dado cuenta que Soyeon había llegado a mi lado. Acercó una silla y se sentó.

— ¡Oh, Soyeon unnie! — hablé sorprendida.
— Tanto tiempo sin verte. — sonreí.

— Si, perdón, he estado muy ocupada. — dijo con cansancio.

— No te preocupes, yo también lo he estado. ¿Y como va todo? ¿Estás bien? ¿Aún sigues con Yuqi? — la invadí de preguntas.

— Todo está de maravilla, Chaeng. — se notaba su felicidad. — Hace algunos días cumplimos dos años saliendo, estamos más que bien. — bebió un poco de su bebida. — ¿Y tú cómo estás? ¿Todo bien con Minari?

Desvíe mi mirada de Soyeon, no estaba realmente bien con eso. Si bien habíamos hablado con Mina, aún me quedaban dudas.

— ¿No debí preguntar? — preguntó con culpa.
Negué con mi cabeza, aún sin mirarla. — Lo siento, estoy más que segura que podrán arreglar las cosas entre ustedes...

— ¿Puedo preguntarte algo, Soyeon unnie?
— interrumpí.

— Lo que sea.

— Hace algunos días tú hiciste una fiesta en tu casa, ¿verdad? — Soyeon asintió. — Y Mina asistió, junto a Nayeon. — nuevamente asintió.
— Mejor iré al grano. — suspire. — ¿Mina se besó con una alguna chica esa noche? — pregunté temerosa por la respuesta que podría recibir.

— ¡No, claro que no! — rió. — ¿De dónde sacaste semejante estupidez? Mina estuvo toda la fiesta hablando conmigo, en ningún momento se separó de mí.

Aliviada, escondí mi rostro entre mis manos.

— ¿Por qué lo preguntas?

— Escuché que en la fiesta Mina había besado a alguien.

— Déjame adivinar quién lo dijo...Fue Nayeon, ¿me equivoco? — negué. — ¿Y le crees a esa idiota? Ambas sabemos que Nayeon ha estado durante años detrás de Mina. Nayeon haría cualquier cosa para que te alejes de ella, ese es su plan.

Me quedé en silencio.

— ¿Ya hablaste con Mina?

— Si, lo hice. Ella me explicó todo y estamos bien.

— ¿Entonces?

— Tengo muchas cosas en mente. Primero esto con Mina, luego con Dahyun, y mi felicidad se está viendo afectada por esto. Siento que en cualquier momento voy a explotar por no saber qué hacer. — respondí derrotada.

— ¿Qué problema hay con Dahyun? Ustedes son inseparables.

— Se me confesó, pero de una forma extraña. — Soyeon me miró un tanto sorprendida. — ¡Mierda! ¡No se que hacer! ¡No quiero lastimar a la persona que quiero mucho! — mis ganas de llorar me amenazaban. — ¡Me siento como una mierda!

— Te aconsejo primero que arregles las cosas con Mina, Dahyun puede esperar un poco. Habla con Mina de buena forma, luego piensa en cómo hablaras con Dahyun. Dilo de la forma más directa posible, pero sin lastimarla. Lo primordial en este momento es tu relación con Mina, no deben dejar que Nayeon interfiera, o lo de ustedes llegara a su fin. Si de verdad están dispuestas a luchar por lo que tienen, no deberían dejar que una persona y menos alguien como ella, se interponga en su relación. Céntrense en ustedes, que en la relación se exista confianza y desaparezcan los celos. Aunque cueste controlarlo, hagan el esfuerzo. Deben confiar en la palabra de la otra. — Soyeon se acomodó en su silla.

— Mina me dijo que Nayeon y ella dejaron de ser amigas.

— Entonces es la oportunidad perfecta para que ambas hablen.

La miré.

— ¿Tú crees?

— Claro que sí. Es más... — agarró su bolso y buscó algo. — Toma, te presto mi apartamento para que hablen. No estaré allí por estos días, les prometí a mis padres que iría a dormir a la casa de ellos, ya que según me extrañan. — reviro los ojos.

— ¿De verdad? — me entregó las llaves.

— Si todo sale bien, podrían tener una intensa noche, ¿no crees? — guiño.

— ¡Yah! ¡Eres una pervertida! — le di una amigable codazo.

— Pero aún así me quieres. — lo dijo con orgullo.

— Lamentablemente si — respondí en broma.

— Bueno, te veo pronto. — se levantó de la silla y me dejó un cariñoso beso en mi cabello.
— ¡Suerte! — gritó antes de alejarse por completo.

Con la palabras de Soyeon, me sentía un poco más confiada en que todo saldría bien.

— ¡Chaeyoung! — gritó la vendedora. — Su café!

Me dirigí al meson y agradecí.

— Todo saldrá bien. — me dije a mí misma, saliendo del lugar con el café en mano.

...