Re-Programado

Tu mejor amiga Spinel

- ¿Quién eres tú? -.
Fue lo único que dijo Steven, podría haber comenzado mejor, pero el daño ya estaba hecho, y la gema simplemente era una desconocida para él.
La gema se quedó un rato en silencio, tratando de evaluar al niño que aún seguía preso de sus brazos de spaghetti rodeados alrededor, y entonces comenzó a reir.
- Oh tontita, soy yo, tu amiga Spinel, veo que cambiaste de forma, pero es imposible no reconocer tu gema, y es cierto que no me veo muy bien pero no esperes que me vea reluciente después de esperar 6'000 años - dijo La Spinel sencilla y risueña pero un poco desalineada, parecia que queria a toda costa pasar de lado cualquier sospecha de traición.
- ¿Esperaste aquí sola por 6 '000 años? - fue lo que dijo Steven sin pensar en nada más - ¿A quién? - después de eso, se sintió un poco estupido, es decir, ¿A quien más esperaría a parte de a su madre?, ahí estaba la prueba, lo que ella decía, la forma en cómo lo trataba y que había esperado la misma cantidad de tiempo que tenía la colonia de Pink.
- A ti tontita, ¿O ya olvidaste nuestro juego de esperar? Supongo que la responsabilidad de Diamante te consumió...- dijo nuevamente Spinel, tratando de sonar imperturbable, pero con un leve toque de locura y dolor en su mirada.
- No, espera, me confundes... - trato Steven, pero al ver como esta gema aun se veía confundida no quería lastimarla más de lo que ya asume que ella estaba lastimada, pero tenía que actuar como un líder, él no iba a ser como su madre, los errores que ella cometió el trataría de repararlos, así que se armó de valor, respiro profundo y comenzó - Creo que hay algo que debes saber... -.
Steven trato de no ser tajante, contó la historia como a él le hubiera gustado que se la contasen, se sentía un poco mal por ver como la expresión de Spinel pasaba de verse inocente a volverse una expresión dolida, preocupada y horrorizada, solo ella sabría lo que pasaba por su cabeza, pero Steven sabia que no seria nada bueno, y tendría sentido, su madre seguro que cometió muchos errores, esta gema sería otra de las muchas afectadas y tendría todo el derecho de estar molesta con el.
Cuando terminó de explicar la versión que todos le habían contado a él sumando algunos puntos que él agregó por cuenta propia, Steven se limitó a solo observar a la gema que estaba callada, sumisa y con una mirada incrédula que apuntaba al vacío.
- ¿Estás diciendo que ella solo desapareció? - dijo finalmente en un susurro sin voltear a verlo aun.
- No lo sé... White dice que su programa desapareció y sólo quedan fragmentos de memoria, y las Gemas no me saben dar una explicación... - trató de explicar a Steven algo que ya tenía muy metido en la cabeza desde hace años, y es que tal vez sea cierto, Steven solo era otra programación, tal vez Pink no pudo cargar con la culpa que decidió mejor reiniciarse, esta gema podría ser solo otra prueba de eso.
- Me olvidaste aquí... - dijo Spinel ahora volteandolo a ver directamente con lágrimas que corrían por sus ojos y en un tono acusatorio, viendo finalmente con algo de ira y locura al niño frente a ella.
- Lo siento, probablemente mi antigua programación no quería... O eso quiero creer - volvió a decir Steven, buscando excusas para defender lo indefendible, esto era un error de su madre, tal vez no fue tan mala pero eso nunca borraría los errores que la persiguen, pero no era realmente responsabilidad de Steven arreglar todo lo malo que ella hizo.
- Espere 6'000 años, de verdad debe haberse olvidado - aumentó la voz la gema rosada mientras se acercaba más amenazante a Steven, aumentando en tamaño y en tono, sin ocultar lo herida que se sentía, viendo incluso con odio al niño frente a ella - ¿QUE OTRA EXCUSA TIENES? -.
Steven se quedó en silencio un momento, viendo a la gema frente a él, enojada, herida, no quería decir nada más, no sabía qué más decir, así que se quedó un rato en silencio hasta que se volvió una línea delgada de tensión incómoda.
- Debes estar muy molesta - dijo el niño diamante atreviéndose a verla a los ojos, y después agachándose, de manera que la gema entendiera que si quería hacer algo contra él, él lo dejaría.
- ¿En serio lo crees? - dijo en un tono sarcástico la gema ahora cerniéndose sobre el chico, con una intención muy asesina grabada en sus ojos, sin embargo, antes de hacer algo que atentara contra el híbrido, simplemente se frenó y se apachurro como fideos derramados - No, no... se supone que debo ser una amiga y los amigos perdonan - dijo con un resoplido que trataba de frenar sus lágrimas de dolor, tratando de convencerse de que tenía que seguir su rol hasta el final, esa se supone que era su programación.
Steven se acercó un poco a Spinel, arriesgándose a que la gema, que en este punto era evidente que era muy volátil, lo fuese a atacar, tratando de buscar palabras que sonaran reconfortantes, abrió la boca para después cerrarla y considerar ¿Que le dices a una gema que espero por 6000 años a un imposible?
Y con un suspiro dijo:
- Pero los amigos también se pueden molestar, es normal enojarse, es natural, y lo más importante es dejarlo salir y no retenerlo, ¿cómo manejas eso? ¿Cómo te sientes? -.
La gema lo volteo a ver esta vez mas derrotada, cualquier rasgo de lucha desapareció dando espacio al arrepentimiento y al dolor.
- ... Yo... - balbuceo un poco, dudando que más decir, bajo la mirada y las lágrimas comenzaron a correr como cascadas - Triste - dijo finalmente ante un Steven que también parecía estar al borde del llanto.
- ¿Quieres un abrazo? - preguntó mientras extendía los brazos como una invitación, esperando que la gema no lo atacara, después de un rato en dónde ella lo miró con duda y no muy convencida Steven se apresuró a hablar - Puedes decir que no, después de todo fue parte de mi culpa que tú... -.
Steven se vio interrumpido cuando la gema se lanzó sobre él y lo abrazó con fuerza, ya no pudo contenerse y con ese abrazo, que de alguna manera necesitaba, también comenzó a llorar y ambos se quedaron así un buen rato, sin querer romper el momento.
- ¿Qué hago ahora? - preguntó Spinel en silencio y con la voz quebrada.
- Yo... no lo sé, pero sé que quiero hacer las cosas bien contigo, así que - Steven se arrodilló frente a Spinel - Olvida tu programación por un segundo y piensa en otra cosa... ¿Qué quieres hacer? -.
- Yo solo quiero un amigo que quiera estar conmigo -.
- Sé que estás programada para ser una amiga pero nunca te dieron a elegir, solo te asignaron a una gema, así que está vez te preguntaré ¿Quieres ser mi amiga? - preguntó el niño con una sonrisa amable.
Spinel vio por un largo rato al niño, con asombro en su mirada, no esperaba está pregunta, es cierto, ella nunca había elegido lo que quería.
- Si vas a ser mi amigo, quiero que tengamos algunas reglas, la número uno, más importante y única es... no más mentiras, y si quieres que no te moleste, simplemente dímelo, puedo tratar de comprenderlo, pero no uses trucos baratos como un estúpido juego - reclamo Spinel ahora un poco animada.
- Lo prometo, y cuando hago una promesa no la rompo, porque eso hace que la perfección de un diamante se vea corrompida -.
- Bien, entonces suponiendo que esto es un reinicio, me presento, soy Spinel -.
Steven sonrió, feliz de que una futura amistad no se viera tan afectada a cómo él pensaba en un inicio por una acción pasada de su madre.
- Soy Steven -
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