WHEN SHE WAS A VIRGIN

"Los famosos celos" #10

Landon:

¿Quién entiende a las mujeres?

¿Quién entiende a Annie Vega?

De verdad estoy haciendo una excepción con ella. Con cualquier otra chica a estas alturas de la noche ya le hubiera propuesto que nos dirijamos a un lugar más privado o en forma directa a un hotel. Sé perfectamente bien que me hubiera aceptado sin dudar. Pero con Annie es diferente y pese a que ella y yo pasamos una noche juntos, la cual no me puedo quitar de la cabeza, se me hace bastante difícil evidenciar mis intenciones.

Es la primera vez que deseo actuar como un hombre sensato en lugar de avanzarme a besarla desenfrenadamente, y todo me sale mal. Quería una cita normal, de esas en la que gastas todo tu dinero tratando de ser el perfecto galán para ella o no sé, conversar largas horas de cursilerías mientras esperas el momento adecuado para besarla.

Lo sé, doy pena.

¿Qué me estás haciendo, Vega?

Aún tenía las palomitas que compré para Annie en las manos y me sentía estúpido por la forma en como actué hace unos minutos. Debí haberme visto bastante idiota con mi pregunta: "¿Acaso te avergüenzas de salir conmigo?".

Caminé hacia la sala de cine y a lo lejos divisé a Megan, quien al instante captó mi mirada. Sus labios se curvaron en una enorme sonrisa y le sonreí devuelta tratando de ocultar mi molestia. Levantó una mano indicándome que había un asiento libre para mí, me decidí a alcanzarla, entonces Annie pasó por mi costado bastante ofuscada. La miré caminar rápidamente hacia el asiento que se encontraba atrás de Megan.

Noté que intercambian algunas palabras, pero al parecer no se estaban diciendo nada agradable, puesto que Annie tenía las cejas fruncidas y los brazos cruzados, una pose muy clásica de ella. Me senté junto a Megan y le dediqué la más coqueta de mis sonrisas. Esta se derritió como mantequilla en pan tostado.

Sé muy bien lo que está pensando:

Oh cielos, tiene la sonrisa más sexy del mundo.

Giré rápidamente la mirada hacia Annie, ella me miró furiosa por unos segundos y luego sacó su lengua pareciendo una niña caprichosa. Revoleé los ojos en respuesta.

¿Ahora quién es el niño inmaduro, eh Vega?

— No puedo creer que estés aquí —habló Megan—. ¿Cómo supiste que estaría en el cine?

Genial, esa es mi pala ahora cavaré mi salida.

— Te imaginé tantas veces en mi mente que... mis propios pensamientos me llevaron a encontrarte.

Ella se enterneció al instante y luego apretó mis mejillas —Eres tan tierno.

— ¡Qué ridículo! —oí decir a Annie.

Megan giró sobre su asiento con cara de pocos amigos y la fulminó con la mirada.

— ¿Qué? —cuestionó Annie—. Estoy comentando al personaje de la película. Es muy idiota y se asemeja mucho a la realidad de ciertas personas.

Tuve ganas de soltar una enorme carcajada porque su actitud me parecía bastante infantil, lo cual no era muy usual en Vega.

Noté a un tipo al lado de Megan. No me importaba si ella estaba saliendo con alguien más, pero justo ahora una cuarta persona solo iba a hacer más difícil la situación.

— Creo que vine en mal momento —dije fingiendo decepción—. Veo que tienes compañía.

Los ojos de Megan se abrieron como platos.