3

396 40 5
                                    

Pete y Clark habían aparecido en la puerta de mi casa, puesto que al aparecer, Pete necesitaba la camioneta de mi padre para algo, por lo que tuve que llevarlos hasta un sembradío

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Pete y Clark habían aparecido en la puerta de mi casa, puesto que al aparecer, Pete necesitaba la camioneta de mi padre para algo, por lo que tuve que llevarlos hasta un sembradío. Ross era el único que sabía que hacíamos por ahí, fue hasta que vimos una camioneta volteada que comencé a preocuparme, pero eso no fue lo único, ver la nave de Clark me paralizó.

-Increíble ¿No creen? -nos dijo mientras señalaba la nave

-¿Qué crees que sea? -pregunto Clark fingiendo demencia e intentando no quedar al descubierto

-Oh, Clark. Es una nave espacial, ¿Qué más podría ser? -respondió con mucha seguridad en sus palabras

Yo solo me mantenía en silencio, mirando a la nave y después hacia cada uno de mis amigos. Nada de esto parecía ir bien, ni para mí, ni para Clark. Él sabía que yo no diría nada, pero aún así estábamos preocupados por lo que sea que podía pasar. Ya habíamos tenido el problema con el difunto Nixon, quien estaba dispuesto a matarnos al Jonathan y a mi para exponer a mi mejor amigo.

-Bueno, no sé, podría haber caído de un avión, o ser un satélite ruso -inventó el pelinegro

-No, no -respondió con entusiasmo el moreno- Esta cosa tiene el sello de extraterrestre

-Si, los duendecillo verdes debieron huir entre las mazorcas -se burló Clark

-Hablo en serio, Clark ¿Habían visto algo así? -yo me mantuve callada, pero Clark decidió continuar para intentar persuadirlo

-Si los extraterrestres vinieran, ¿No crees que buscarían un lugar más interesante?

Bueno, yo si lo haría, si no tuviera mi vida entera en este pueblo. Igual ya le tenía demasiado cariño a este pequeño pueblo, es mi lugar seguro; y aunque deseo prosperar, me encantaría que si llego a tener hijos, criarlos aquí.

-No, piénsalo bien. Circulos en sembradíos, ganado mutilado. Les deben encantar los campos... -ninguno hablo, aunque lo que decía no tenía ni el más mínimo sentido- Llevemos esto a la camioneta

-Pero no podemos tomarla -nego nuevamente Kent

-Clark, cuando el comisario pregunto por el accidente, le dije que no recordaba donde había salido la camioneta del camino. No falta mucho para que la encuentren

Hubo un silencio incómodo, ambos mirándose, Clark tenía una cara de preocupación y culpabilidad que si duraban más tiempo así, Pete se daría cuenta; por lo que decidí actuar rápido.

-¡Ah! -mi grito y brinco los sorprendió- Un duendecillo verde

Me excuse, Pete solo rió, mientras que Clark me miraba.

-Mal chiste, lo se -me escude, yo solo intentaba distraer la atención y la tensión de ambos

Pete nos insistió en mover la nave, por lo que terminamos aceptando. Los tres tomamos el metal y mientras empujamos, Kent hablo.

𝐒𝐌𝐀𝐋𝐋𝐕𝐈𝐋𝐋𝐄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora