Molly & Jessie

Capítulo 008

— ¿Por cuál capítulo vas? — preguntó Jessie una vez se había sentado en la silla desocupada de al lado.

— El ochenta y siete pero eso no es lo importante, me quedan 4 para terminar y estoy a punto de enloquecer— respondió Molly sin siquiera apartar la mirada de las páginas.

Jessie asintió, pero no pudo evitar sonreír mientras jugueteaba con sus dedos sobre su regazo.— Oye, ¿te has fijado en que últimamente son menos las bromas sobre si somos pareja?— soltó, yendo directamente al grano, esperando una reacción de Molly.

Molly frunció el ceño ligeramente antes de asentir. — Bueno sí, eso creo, no estoy muy segura— respondió sin prestar verdadera atención.

— Ya bueno, es que justo eso te quería comentar...

Yo no me había dado cuenta, pero ahora miro atrás; y creo que debío estar nervioso diciéndome eso, en aquel momento. Sin tener seguridad alguna de lo que íbamos a pasar.

— Les dije que pararan, porque no quería que eso te incomodara y pudiera afectar tu juicio sobre hacerlo realidad.— concluyó Jessie de manera tan apresada que mal se entendio la última parte.

Molly finalmente apartó su mirada del libro, porque por alguna razón no se sentía bien no prestarle total atención. — ¿Qué quieres decir? No creo haber entendido—

Jessie miró a los ojos de Molly con determinación. — ¿Si te pidiera salir, qué escusa me darías? Conociéndote como lo hago, estoy seguro de que tienes una bajo la manga, en una carpeta clasificada y lista para las situaciones que se te presentan.

Molly se quedó sin palabras por un momento, sorprendida por la pregunta. — No sé de donde sacas esas ideas, pero yo no tengo una carpeta de excusas preparadas para diferentes situaciones.

Jessie sonrió, decidido a exponer su punto. — ¿¡Ah, no!? Entonces te importaría recordarme porque no podías salir el domingo a ...

— Ya te dije que los domingos los paso en familia, en la casa de mi abuela, vamos después de misa. Y no me habrán dado permiso, así que ni falta que hacía preguntar. Recuerda conozco a mi familia llevo con ellos toda la vida.

— Aja, y que me dices del otro día, tu compañera celebraba su cumpleaños, te invito y no apareciste; me dijeron que no les sorprendía tu ausencia. — continuo incursionando.

— Eso fue porque empezaba tarde y no tenía sentido, aunque me dejasen ir, tendría que estar de vuelta antes de que empezase de verdad. Ya sabemos como es el tema de las horas, si la invitación dice a las 6 pm te esperan a partir de las ocho, porque a esa hora aún están cocinando las alitas u organizando.

Jessie asintió y luego se inclinó hacia Molly, mirándola fijamente. — Seguro. En fin, todavía no has respondido a mi pregunta inicial. Si te pidiera salir, ¿qué me responderías?